martes, 8 de abril de 2014

Probabilidades (1)


- ¿Que probabilidad hay de que esta noche durmamos juntas?

- Ninguna, cero, ni la más mínima, ¿sigo?

Porque podría hacerlo por mucho que su deseo contradijera esa contestación. Podría continuar buscando sinónimos que le barrieran de golpe la sonrisa sobrada con la que seguía mirándola. Tan sobrada, que cerró las manos necesitando agarrar las ganas de borrársela con un buen muerdo. Atrapar esa perfecta boca, sorber con pasión desmedida sus labios y morderlos entre sus dientes, aproximándose a la saña.


- Uhm...aún nos quedan unas cuantas paradas de metro y tengo la esperanza de que mis posibilidades aumenten- la contestación de la sobrada y como igual de sobrada deslizo sus piernas acomodándose en el asiento, aumentaron sus probabilidades, las de quedarse con todas las ganas.

- Debió ser gordo- contestó en apenas un susurro prohibiéndose mirarla más. Mucho mejor, retomar su lectura. Aunque, aún no la iban a dejar.

- ¿El golpe?- preguntó acomodándose aún más. Tanto, que si giraba su rostro prácticamente podía besarla- Dicen fue de pequeña en un columpio y oh, vino a mi rescate una rubia de infarto. Desde entonces siento devoción por rubitas cómo tú- acabo en un fino susurro e imposible así, retomar lectura ninguna. De un golpe cerró el libro y joder, fue girarse a mirarla y toparse de lleno con su rostro y si, con su sobrada sonrisa.

- ¿Esta estupidez de historia te funciona con muchas?- alzó la voz lo justo, para ganar la atención de unos cuantos pasajeros y la risa de ella- Dios, eres una sobrada de cuidado y no tengo ni idea, de cómo has podido siquiera imaginar que con esa actitud ibas a conseguir algo de mi- concluyó de momento y dejó de mirarla para fulminar a los pasajeros que continuaban mirándolas.

- Me he limitado a comprobar mis probabilidades y mira, ahora se que heterosexual no eres. Eso las aumentan sin duda, ¿no crees?- de nuevo sonreía sobrada y la rubia detenía el paso de su mano hacia sus labios.

- Jajaja, pero vamos a ver...- soltó su mano dejándola sobre sus piernas- que no te conozco de nada, ¿no lo entiendes?- había algo en ella, que contrarrestaba por completo su sonrisa sobrada y el coraje que ésta le producía. Quizás su chispa, o su desparpajo, o lo mismo  eran sus ocurrencias.

- Porque no has querido, pero venga...tenemos tiempo, preguntame lo que quieras saber- se ofreció encantada de poder disfrutar de su compañía. No le había fallado su olfato, y la dueña del lunar más sexy que había visto en mucho tiempo, tenía soltura y nada de simpleza.

- Ay dios...esta bien- puestos a no poder esquivarla, se giró hacia ella cruzando las piernas,dispuesta a escucharla- ¿Como sabes que tenemos tiempo?

- Básico- contestó ensanchando al máximo su sonrisa. Tenía su atención, ahora necesitaba afianzarla- Te has sentado alejada de las puertas, te has puesto los auriculares, has revisado que no tenías nada importante en el móvil y te has dispuesto a leer. Eso me dice, que no te bajaras antes de cinco paradas- bajo la voz conforme hablaba buscando intimidad y ahora fue ella, la que ganó la sonrisa plena de su acompañante de asiento.

- ¿Que probabilidad hay de que empieces a darme miedo?- siguió con las preguntas y la proximidad de ambas, le permitió observar sus larguísimas y pobladas pestañas.

- No voy armada- contestó acercando peligrosamente su rostro y abrió su chupa mostrando la carencia de las mismas. La rubia mujer no rehuyo la cercanía de ambos rostros, haciéndola sonreír por dentro.

- Eso no me garantiza que no seas una loca acosadora- se alejó adivinando la victoria en sus ojos y la mínima desilusión que leyó en ellos, le dieron cierto poder.

- De rubias con un sexy lunar en el labio que leen a Isabel Allende, de toda la vida- dijo corriendo y si, sus posibilidades volvían a aumentar. La dueña del lunar volvía a mirarla y volvía a reír.

- Jajaja...vale, asumo que tienes respuestas para todo.

- Casi, para todo- la corrigió mirando al frente y espero contando los segundos en que ella seguía mirándola para volver a girarse hacia ella- Nuestras piernas me animan a continuar con mi acoso, ¿les hago caso?- su nueva ocurrencia noqueo por segundos a su acompañante- Dicen que según las cruzas cuando estas sentado con alguien, deja ver si existe o no atracción hacia esa persona.

- Y ahora es cuando me dices, que las nuestras muestran una atracción total.

- Si...fíjate que si y no, no lo digo yo, lo dicen ellas- señaló las piernas cruzadas de ambas. La pierna izquierda de la rubia estaba encima de su derecha apuntando hacia la improvisada acosadora y la derecha de ésta se apoyaba encima de su izquierda apuntando a la acosada.

- Lo veo si, una tórrida atracción- se burló provocándola y se le congeló la respiración cuando la mujer busco su oreja, acariciándole la mejilla con su desordenado y largo cabello.

- Tórrido- susurró en su oreja apostando todas sus posibilidades- caliente, ardiente, abrasador...y fue, con sólo verte entrar al vagón.

- Ya vale- la apartó enfadada con ambas. Con ella por provocarla de esa manera y con ella misma, por excitarse- ¿Que probabilidad hay de que te abofetee como vuelvas a insinuar más tonterías?

- Ninguna, cero...- imitó divertida su primera contestación- porque en la siguiente parada dejaré de insinuar. Me muero por probar tu boca.

- Atrevete y llamo a los de seguridad- avisó retirando su vista de ella. La seguridad de su pose era demasiada y ese toque chulesco le hacía variar entre querer abofetearla o directamente besarla.

- Oh oh...eso reduciría al mínimo mis posibilidades- fingió desanimo teatralizando- Tratare de contener mis inmensos de deseos de besarte- miro a su frente y como pasase antes, varios pasajeros las miraban entreteniéndose- Se nos va acabando el trago, sin saber que es lo que hago- cantó sonriendo al improvisado público y se ganó un pequeño empujón de la rubia de sensual lunar.

- Por dios...baja la voz y deja de llamar la atención- la regaño sin saber muy bien a donde mirar. Era increíble en lo que se había convertido otro aburrido trayecto en metro.

- Mandona...encima eres una mandona- babeo en el mismo tono de humor- estoy perdida. Pobrecita yo- declaró cerrando los ojos repetidamente.

- Jajaja, payasa...también eres una payasa- contagiada por sus tonterías volvió a golpearle el brazo. Sin duda era mejor opción que comerle la boquita con espectadores de excepción.

- ¿Ves? Al final no soy tan desconocida para ti. Espera, déjame pensar- cruzo las piernas en sentido contrario y busco apoyo en la barandilla del metro.

- Dios mío...te dejo y desde ya te digo, doy nada por tus pensamientos- le dijo no esperando que tardase mucho en volver a decirle algo. Pero pasaban los segundos y ella seguía con pose pensante. Vale, sólo unos minutos de silencio y se reconocía ansiosa. Era más divertido cuando la provocaba y mucho más ardiente cuando se insinuaba. Privada de ambas cosas, revisó la siguiente parada. Sólo le faltaba, pasarse la suya y tener que regresar andando.

A dos paradas de metro estaban, era tiempo de guardar el libro del que no había leído nada, sus auriculares y de volver a revisar el móvil. Una vez hecho y todo guardado en su bolso, topó con sus ojos café fijos en ella.

- Si contengo mis instintos- volvió a cantar sin importarle más que la imperiosa necesidad de detener el tiempo y quien la detuvo fue la mano en su boca de la rubia.

- Sush...deja de llamar la atención- respiro sonriente. Al final su improvisada y encantadora acosadora no se había dado por vencida y ahí estaba cantando y mordiéndole la mano como sino se acabasen de conocer.

- Uhm- degusto el pequeño bocado y beso su mano antes de dejarla libre nuevamente- Y perfeccionista, cada cosa que descubro me gusta más que la anterior- habló mirando aún la mano que había dejado.

- Vale...¿ahora como sabes tal cosa?- preguntó queriendo como ella, que la parada no llegase. Por dios, era de locos pero a la vez tan vivo, que no lo pudo evitar.

- Te haces tú misma la manicura- volvió a tomar su mano, examinándola más de cerca- Y está perfecta- habló encantada con la suavidad de la mano que volvía a tomar e inconsciente sintió la necesidad de volver a llevarla a su boca y disfrutar así, de su suavidad y olor. Pero la mano tenía vida propia y sello su boca y su intento de besarla.

- Ya vale...como juego ha sido divertido, pero llega mi parada y tus probabilidades, no mejoraron- se despidió sin poder evitar acariciarle los labios con sus dedos y se incorporó con pereza, esperando cualquier ocurrencia que evitara el inminente final.

Esta vez no la hubo y tuvo que llegar a las puertas y buscar su reflejo en los cristales para ver a la descarada estadística, retrepada en el asiento sin retirarle la vista. Fueron eternos los minutos siguientes transcurridos frente a esa puerta. Podía hacerle algún tipo de señal o simplemente girarse hacia ella invitándola a su propia locura inventada. Pero en vez de hacer nada se limitó a regañarse por desear con fuerza inaudita a una tía que acababa de conocer. Revolviéndose contra si misma, dejó de mirar su reflejo y dio inmensas gracias a que él metro se detuviera y pudiera salir dejándola en ese vagón.

Ando los escasos metros hasta la boca del metro a paso acelerado, necesitando llenar sus pulmones de aire. Joder, había estado a sólo una ocurrencia de entregarse a alguien de quien ni siquiera sabía su nombre.

Fuera del metro, se detuvo en seco tratando de recomponerse, pero entonces alguien la agarró del brazo y con temor se giró a ver quien era y que quería. No pudo ver mucho, su loca acosadora tomaba sus labios y su nuca, sin dejarle reaccionar.





 
 
 

5 comentarios:

  1. Cuando acabó la nueva aventura de los Garwi y ví que Madrina también llegó a su fín ya tenía curiosidad por ver lo próximo con lo qué nos ibas a sorprender. Por ahora pinta divertido, permaneceré atenta a la pantalla.

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  2. No se si es un mini-relato o si es otra historia tuya niña pero..wowwww
    Dos mujeres con caracter e ingeniosas para la seduccion...
    (Sobre todo la descarada...que me encantaaaaaaaa)..ejemm...mi lado oscuro niña..ya sabes...

    Un comienzo de lujo Gemo..ojala por mi bien sea largo el relato porque su
    comienzo fue electrizante y me gusto mucho... ...

    Divina-Wilson

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  3. ..... ESCRITORA¡¡.......COMO ME GUSTA ESTAS SORPRESAS PARA QUE PODAMOS DISFRUTARLAS...Y ESTA....ESTA....YA APUNTA A QUE SERÁ DE LUJO...COMO TODO LO QUE SALE DE ESAS MANOS TUYAS QUE BORDAN LETRAS ...QUE YA DESDE LAS PRIMERAS ATRAPAN...
    TENEMOS CHOQUE DE TITANES??...DOS MUJERES EN PIE DE GUERRA...?...PASIONES ENCONTRADAS?...LLEGARAN LOS DÍA..O EL DÍA DE LAS SABANAS MOJADAS??...MUCHAS PREGUNTAS NO??....PERO TÚ...TU NOS FASCINARAS UNA VEZ MÁS DESGRANANDOLAS...
    NO TERMINO SIN APOSTAR A QUE...SEGURO GANA ESA APUESTA QUE DICE O ESA PROBABILIDAD...¡¡¡SEGURO¡¡¡¡¡

    GRACIAS........POR TANTO¡¡¡¡¡

    CELESTE-NEGRO.....

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  4. .....AHHHH....OLVIDARLO NO QUERRIA...SEDUCCIÓN PARA UN NUEVO RELATO...QUE A PIE DE PAG..SIGUE SEDUCIENDO CON Y LO HACE CON CATEGORÍA..¡¡¡ DE LUJO POR TODOS LADOS...

    CELESTE-NEGRO

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  5. Que bien otra historia!! Me ha gustado este inicio.. amboa personajes parecen divertidos y con puntos interesante!

    Cris

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