Otro día de curro a las espaldas y otro camino de regreso a casa, para desahogar el estrés del trabajo a base de insultos a otros conductores, algún bocinazo, frenazo y porque no, alguna sonrisa sobrada al pasar a cualquier niño de papá con cochazo.
- Que no basta el coche pedazo alcornoque, hace falta algo más, hijo de mi vida-
Los rezos ya eran una rutina en ese camino de regreso, si bien podía alternarlo aporreando el volante al ritmo de alguna canción, previa subida de volumen. Le habida pasado desde que consiguiera el carné de conducir. El coche le daba alas, libertad.
- Madrugada fría, carretera sola. Yo espero que este día nunca pase a mi historia-
Como la misma canción que tatareaba mientras su piel se erizaba. El ruido de la carretera, el egoísmo en la conducción y la lucha por llegar a un destino; su casa con una triste ensalada esperándola para ser preparada y engullida. Cosas de ir cumpliendo años esa de la comida equilibrada. Quedaría bien para contarlo, la realidad era que los excesos del fin de semana a según qué edad, necesitaban de equilibrios y ese, ya era su caso. A la mierda. Estaba en su coche y aunque pocos, tenía kilómetros para quemar un poco de gasolina y algún sueño inventado. Ese era su glorioso momento. Donde podía vivir mil vidas, según la letra de la canción que sonase. Pero ese día, en esa carretera y en ese instante, un accidente bloqueaba el paso haciéndola frenar.
- No me jodas, todos los putos días igual-
Se quejaba. Sin faltarle razón. Esto eran cosas de la crisis. Carreteras esperando un desdoblamiento e incluso una autovia. La crisis económica se estaba haciendo tan larga, que hasta la palabra autovia sonaba a pasta.
Como fuera, lo cierto es que tuvo que frenar y detenida, el volumen de la música más que estimularla, la irritaba. Así no había quien fluyese ese medio día. Aburriéndose en tan solo medio minuto detenida, le dio tiempo a cotillear algún coche que venía de frente y después al lugar donde había quedado parada; justo al lado del cementerio.
- No me miréis así, ya sé que yo aún puedo conducir-
Dijo sonriéndose. La verdad es que a veces, tenía una guantá bien dada. Al ritmo frenético al que solía aburrirse, le habría bastado dos minutos más ahí parada para querer salir del coche y ver qué narices ocurría delante, pero un coche aproximándose a ella a toda hostia desde atrás, le hizo erguirse en el asiento y activar rápido las luces de emergencia.
- Veras que me come el subnormal-
Rumió usando el espejo retrovisor interior como arma letal contra el coche que a pocos centímetros detuvo su marcha...sin comérsela. Con su boca preparada para lanzar todo tipo de improperios, el mismo espejo que quiso usar como alma se le revolvió en contra, dejándola callada al quedarse mirando a la conductora. Sin buscarlo, instantáneo, loco e inaudito en ella, se quedo embelesada en los gestos de la tipa que había frenado el coche en el último momento. Ajena a su mirada, la mujer aprovechaba la detención para buscar algo en su bolso, mientras era espiada descaradamente. Algo en esa mujer la imantó. De aspecto pudiente según el coche que manejaba, muy arregladita según el recogido que llevaba y espectacularmente atractiva según se le antojo.
Según la labia que mostraba debía haber reaccionado lanzando algún improperio o al menos algún chascarrillo, pero no hubo reacción alguna, más que seguir mirándola. Ni siquiera el hecho, de creer que la mujer se había percatado la corto. Al revés, que la mujer pareciera estar mirándola como ella, la subió. ¿Sería su ego dado a estimularse por sí mismo? ¿Sería el coche? ¿La libertad? ¿Sus propias ensoñaciones? Lo que coño fuese. Que más daba, si la mala baba del curro, el tráfico y la pésima conducción de los ingleses por la derecha, se la soplaba con la tontería de la tía.
- Ay Merche-
La bautizo, sin ninguna originalidad dada la marca del coche que la mujer conducía. Mira que cosas, la hiperactividad se le esfumó pero para su disgusto, ahora el tráfico comenzó a fluir.
¿De verdad habrían cruzado miradas? Difícil de saber. Pero ojo, debía espabilar o Merche le pegaría un bocinazo porque su carril ya andaba, aunque lo hacía excitantemente lento. Tanto que su imaginación se permitió acelerar. Dos tias en una carretera, se miran, se siguen y al bajarse del coche..se estaba flipando.
- Jajaja, alucino conmigo misma-
Se dijo. Prometiéndose prestar más atención a la carretera. Como subidon no estaba mal, pero debía llegar a casa a ser posible sin golpe con el coche. Ese fue su plan, pero llego al punto donde los carriles se doblaban y Merche aceleró doblándola por la derecha.
- Vamos no me jo..-
Sorprendida aceleró, no dejando que Merche consiguiese su propósito, que no era otro que doblarla a ella y colarse después delante. Ni de coña la iba a dejar por muy buena que estuviese. Acelerando le dificultó la maniobras, habiendo a la otra frenar y pasandola de nuevo.
Pero ojo, no fue pasarla y sonreír victoriosa regalándose una palmada por la maniobra, fue hacerlo y disminuir la velocidad para poder mirarla al pasar. Al hacerlo, chocó con la mirada de Merche, ¿se estaban picando? De ser así, cambiaba el cuento. Dos tias en la carretera, se pican, sube adrenalina, logra hacerla parar y..pero que flipada era. Lo que tenía era que espabilar, porque Merche volvía a estar detrás suyo metiéndole presión y el coche. ¿Estaba sonriendo? Joder, la tipa le sonreía desde atrás, picándola más. No había problema, conociéndose la carretera como se la conocía, podía dejarle crecerse y luego bajarle los humos, por eso se cambió al carril derecho dejándola pasar. En cien metros vendría rotonda y ahí si, Merche y su carrazo se iban a enterar.
El pique continuó unas cuantas rotondas más, y fue una maniobra hábil que Merche tomó la delantera y peor..la salida.
A esto se le llama "tener ganas de guerra".. Gracias Gemo por escribir..
ResponderEliminarX
.... Y si acaba un domingo...saboreas esa copa de vino...queriendo retener su sabor....mientras un cigarrillo se consume entre los dedos dando paso ya a la madrugada....Y entro a este rincón....el tuyo Gemo...que ¡¡tanto¡¡ me gusta....Y además encuentro que tus letras llegan con '''Sueños''' es sencillamente....la mejor de las maneras de terminar esa copa....y sumergirme en ellos....gusta hacerlo....cuando son tus letras las que los hacen....las que los tejen...
ResponderEliminar.... Y sii se ve que como dice X...llegan con ganas de guerra...de sacar adrenalina entre el asfalto....veamos hasta donde puede llevarnos la dueña de ese...cochazo?..No hay nada mejor...que dos mujeres midiendo su fuerza...o sus ganas pisando un acelerador...pisar a fondo....puede ser peligroso...cuando crujen esas mismas ganas...
... Porque ya lo dijo Calderon....'''los sueños....sueños son'''....Y yo...yo dije SIEMPRE....que ''' los sueños ...son para conseguirlos''''....veamos
gracias....siempre....por ¡¡tanto¡¡¡
celeste-negro.