viernes, 17 de febrero de 2017

María de los Ángeles 26

Las nueve en punto de la noche eran, cuando Angie salía de su casa de la mano de Luka. Ella con vestido azul turquesa de corte clasico pero juvenil. Corto hasta las rodillas y acompañado eso si, por una de sus rebecas. A ojos de Luka, todo un bombón envuelto en una inocencia ficticia que invitaba a incitarla hasta destapar la verdadera mujer que se escondía bajo esa rebeca. Luka a su vez, había optado por unos pantalones rectos y tobilleros, sumado a una camiseta de amplio escote y americana. Aunque el toque que le daba todo su flow, estaba en su barba. La misma que Angie no pudo reprimirse en tocar al tiempo que se derretía por como Luka la miraba.

- Tu si que estas guapo- le dijo antes de abrazarse a él. Era toda una locura lo de ir a esa reunión colándose por la cara, pero qué ganas de cometerla sentía. Luka le correspondió al piropo y al abrazo, haciéndolo más estrecho en cuanto escucho pasos por la escalera. Si su intuición no le fallaba en tres, dos, uno...
- Uy...que ...estáis-les saludo Jess, seguida por May y su brik de cervezas. Angie paso de fijarse en ropas, maquillajes y demás, yéndose directa a buscar la mirada de May y regañarla. ¿A cuento de qué? Pues sería por las cervezas, quiso creer, serían por los celos que sintió al verla junto a Jess, en eso no quiso pensar, o sería por lo ocurrido la noche anterior entre ellas.

 Cuatro amigos eran acudiendo a una fiesta, pero antes, había que esperar un ascensor. Los cuatro lo hicieron tras saludarse con diferentes pensamientos.

- Llevo cuarenta pavos en la barba, espero se haya dado cuenta. Claro que, con ese vestido tan corto, lo mismo se le está congelando hasta el pensamiento- pensaba Luka.
- No le preguntes por Keko, no le preguntes por Keko. Mierda, ¿con quien lo habrá dejado?-pensaba May.
- Ja...se ha arreglado la barba y le queda tan...no, no y no. No mojes bragas por este, ni se te ocurra-pensaba Jess.
- ¿Es que le da igual con quien he dejado a Keko? Mírala..ni me pregunta ni nada-pensaba Angie. 

Con tanto pensar, ninguno de los cuatro escucho la puerta del piso de Angie abrirse, ni el trote contento de Keko pasando tras ellos. Hasta que Maika, para el asombro mayúsculo de May, los saludo.

- Vais los cuatro guapísimos. No tengáis prisa en volver, de este fachilla ya me ocupo yo- les dijo pasando hasta el piso de May. La cara de ésta era un poema, aunque no muy distinta a la de Angie. ¿Esa mujer acababa de llamar facha a su hijo?- Aquí  estaré más cómoda con él, May tiene un póster de la Pasionaria. Qué gran mujer- prosiguió Maika divirtiéndose de lo lindo, hasta cerrar la puerta. 

Los cuatro siguieron sus pasos mudos, bastante tenían con tragar saliva y no atragantarse con ella. Primero Luka, aguantado la mirada de May sobre él, ya que era el único culpable posible  de que eso estuviese pasando. Después May al aguantar la mirada de Angie sobre ella. Pues si, tenía un póster de la Pasionaria..¿es que lo prefería de Pamela Anserson? Y la última Jess mirándose así misma en su reflejo en el ascensor. Sea, ¿para eso se ponía un push-up? ¿Para que Luka siguiera mirándole las tetas a esa roja?

Visto lo visto, el viajecito en el ascensor, fue un paseo entre tensiones que no se resolvieron. Como hacerlo si varias cuestiones invadían sus espacios; ¿como había llego Maika a quedarse con Keko? ¿Y que había ocurrido la noche anterior entre Angie y May? ¿Keko facha?
La última cuestión es la que preocupaba a Angie y tiempo no iba a tener de pensar en ella. Los cuatro hacían decidido acudir al evento juntos en el mismo coche. Aunque estos cuatro, no es que tomarán decisiones en base a un diálogo enriquecedor, más bien siguieron los pasos del que parecía más decidido que era Luka, hasta el único coche propiedad de alguno de ellos, que era el de Jess. La rubia explosiva, no sin revisar su imagen  en la ventanilla, tomó el mando de su propio coche. A su lado se subió Luka, quien prefirió revisar su barba en el parasol interior. Ese par iba camino de morir en el narcisismo. Tras ellos se subieron Angie y su preocupación, más May y su brik de cervezas. Ya con el coche en marcha, Angie hasta se olvido de Maika y sus ofensas carentes de toda validez, para ir a quedarse boba mirando el brazo desnudo de tela de May pero excitantemente cubierto por tinta. 
- Para presumir hay que sufrir- pensó obligándose a retirar la mirada de ese brazo. Aún pesaba y quemaba en ella, algunos sueños ciertamente pecaminosos llenos a rebosar de tinta. Pero no le fue tarea fácil. May se mostraba especialmente nerviosa o sería incomoda, al menos así lo hacía parecer con sus exagerados resoplidos.
 Y algo de cierto en esa incomodidad había. Para May sentarse atrás con Angie, después de que su madre hubiese llamado facha a Keko y que además, estuviese cuidándolo era incómodo. Incómodo por conocer lo que su madre opinaba al respecto pero déjate, lo peor y más incómodo, es que a su mente enferma, definida así por ella misma, le encantase y flipase en exceso la piel blanca y pura de Angie. Que llevaba rebeca, pero también un vestido corto que sentada como estaba enseñaba de más. Blanca, pura y extremadamente virgen de tinta. 
A su mente enferma, le salió la vena viciosa y siendo así, cierta vocecita vino a joderla.

"Venga..no te cortes. Acerca el brazo y arde en esa contraposición. Tu piel manchada, estigmatizada y la suya pura y virgen. Deliciosamente virgen. Hola, soy tu conciencia y vengo a joderte. Te arrebató tu tiempo libre, tu sueño despreocupado y ahora...es la dueña de tu libido"

La estupida vocecita provocó que abriese una cerveza, para molestia suprema de Angie.

- Ni en broma- que se la arrebató sin piedad.

"Ja..de tus cervezas también. Este ahorcado empieza a no tener gracia: A _ M _ R"

De buena gana se hubiera mandado a la mierda así misma, o podía haber comprado vocal y resolver, pero Angie bebiendo a morro de su cerveza, le provocó una carcajada inmensa. 

- Jajaja no no, recuerda que eres una señorita formal y de bien- le dijo arrebatándolesa de nuevo. Pero fue un error, los labios carnosos y extremadamente mordibles de Angie se quedaron formando una o de lo más apetecible que si, ayudaba a resolver el ahorcado y a que sus miradas se enredasen. Sin olvidar su pique.
- A tu madre no le gustará que emplees ese señorita- enredada a los ojos negros de May, Angie no pudo reprimir morderse los labios que a trazas la mirada de May mordía.
- No siempre sigo sus consejos- contestó May controlando la respiración. Que la aburriesen a ahoracado pero juraría que esa forma de mirarla de Angie...

Llevaba pecado, al menos era lo que Jess advertía sentada delante cotilleándolas descaradamente detenidos en un semáforo, otro que tal era Luka, quien la miró buscando una sonrisa por lo visto por ambos, pero no la encontró. Jess paso de su mirada. Venga ya, ¿ese tío pretendía volverla loca? 
- No hay más tonto que el que no quiere ver-le dijo Luka refiriéndose a las dos de atrás. Pero Jess ya iba revolucionada y no es que lo pillara del todo.
- Y tonto que sigue una linde..la linde se acaba y el tonto sigue- fue la contestación de Jess. Estos pasaban del ahorcado decantándose por rescatar refranes. 

Daba igual, porque los cuatro llegaron a destino. La típica reunión de antiguos alumnos, la cita perfecta dónde acudir para lucir de profesión conseguida, chalet a las afueras, apartamento en la costa, niños adorables o llegar con tres más, ser la misma loca del Insti y que te confundan el cuento con...

- Ay Dios mío Jess, mira siempre lo supe. Tú eres un alma libre..pero joder, ¿poliamor?-

Obvio..las palabras de la antigua compañera de Jess, provocaron reacción en cadena.
May atragantada con una cerveza. Angie santiguándose en repetidos tics nerviosos y Luka mirando inquieto a todos los lados posibles ¿poliamor? ¿donde?
La bomba de esa reunión anual había saltado, Jess compartía su vida con tres personas después de haber pervertido y sacado del convento a la descarriada que ahora, si bien decían amarse los cuatro, se moría por los huesos de la siniestra. Ésta, primera novia del chico, se había dado a la bebida y tatuado todo el cuerpo en Manhattan, donde apareció tras un par de noches locas. 

Nada de eso era cierto, pero ya se sabe cómo corre y se transforma un rumor en una reunión anual. Y siendo así,  la noche tomo connotaciones especiales para los cuatro. 

5 comentarios:

  1. Genial, no tengo otra palabra.

    Ahora, como puede llamar a mi chiquitín, "facha", ay como me ha dolido eso, jajajaja

    Y por último ¿sabes la ansiedad que produce quedarse con ganas de leer más, cuando te enganchas a tus historias, Gemo? jajaja

    Mil gracias,

    A.

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  2. No se lo q me pasa contigo.
    Me enfado y mucho cuando te llevas tanto tiempo sin escribir, y cuando te leo de nuevo se me pasa todo el enfado.
    eres única una escritora q me tienes engancha. Muchas gracias por tu generosidad.
    C.

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  3. Me quedo preguntándome qué palabra es esa del ahorcado...jajaja, te compro vocal!! Gracias Gemo por el trozo.

    X

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  4. ..... '''Pecado....llevaba pecado esa mirada'''.....La dueña?...quien la provoca locuras ya...Podrá resistirse a lo que siente y envolverlo en cervezas donde quiere evadirse...pero solo consigue embriagarse de esa mirada...donde querría seguro perderse ya....donde lo hace...
    Me encantan estas dos...pendientes una de la otra...celosas ya...tan distintas pero enredadas sin remedio...Me gusta esa forma de provocar de la ''chica mala-chica buena'''...Claro que...¿ quien es quien?....eso Escritora sabes ponerlo en duda continuamente ....
    .... Y si...al igual que X...yo me pregunto por esa palabra....porque una es segura...¿ o no?...pero ¿ la otra?...ÚNICA¡¡¡¡..SIEMPRE ...ÚNICA¡¡¡....
    ... Cuando tardo en poder llegar a perderme en tus historias....lo siento....pero cuando llego y tengo que esperar ...pues...pues...no se que es peor...

    .....gracias.....siempre...por ¡¡¡ tanto¡¡¡¡.....

    celeste-negro

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  5. Gemoooo donde andas cariño?
    C.

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