María de los Ángeles 5

Suiza como los buenos relojes, así se había vuelto May para según qué cosas. Hay quien elige ver programas tipo Sálvame para echar la siesta, si pueden evadirse de los gritos que ahí se dan, hay quien en cambio prefiere documentales de animales, quien elige alguna teleserie y hay quien como May, prefiere leer conversaciones ajenas. Si, le había pillado vicio al grupo que había formado Luka y en el que solo había tres integrantes, de los que solo dos intercambiaban mensajes. 

No fallaba, a esas únicas horas en las que el salón se quedaba despejado, aquellas que antes usaba para que su lápiz inventara nuevas formas y tatuajes, ahora eran la hora de María de los Ángeles y sus cristianas palabras. 

Si su madre la viera, cuchicheando conversaciones donde el nombre de Dios aparecía en prácticamente cada mensaje, le habría dado una buena hostia. Roja por edad, feminista por convicción y revolucionaria por sus ovarios, su madre de enterarse y a su edad, sería capaz de prohibirle mantener cualquier contacto con esa mujer. Le bastaba recordar su última llamada de hacía unos días. 

- Ja...el tipo me miraría las tetas, pero te puedo asegurar que ese no mira unas tetas más, así naciera otra vez y tuviera que mamar-había dicho su madre, tras una nueva trifulca protagonizada por ella misma en algún vía pública de Madrid. A May ni se le pasó por la cabeza preguntarle a su madre qué tipo de escote llevaba, dando por hecho su contestación; el que me salga de los ovarios que para eso me las he pagado- Ja ja ja, toda la pinta de facha que tenía, que si..se que no debo juzgar, pero ese era de hostia divina cada domingo-ahí estaba. El tema estrella de su madre, y con el que May había crecido-May no te quedes callada y dile algo a tu madre.

- Abajo el patriarcado opresor-contestaba por inercia May.

- Jijijij...que bien te parí hija de mi vida. Roja, feminista y lésbiana, como debería estar mandado- se vanaglorió su madre.

Correcto, su madre no se lo tomaría nada de bien. Pero, estaba en su guarida, no había nadie y..el grupo esa mañana había sido un hervidero.

Mensaje de Empotrador (Luka guardado con ese nombre en el tlf de May): Vamos Angie, yo sé que son tus creencias y las respeto. Pero estás buscando trabajo y que vean tu perfil con un rosario, es un poco..es un poco raro y extraño.

Mensaje de María de los Ángeles de todos los Santos y Apóstoles del Señor (según el tlf de May): Angie?

Mensaje de Empotrador: Por abreviar jijijij

¡Bingo! Le molestaba. Luka le acababa de poner en bandeja una nueva forma de molestar a la beatilla de ojazos verdes. ¡Qué ojazos! Keko los tenía iguales, puede que un poco más pequeños, pero clavados en la expresividad que mostraban. Angie le había llamado. Molaba y molaba más por poder picarla a hierro cada vez que pudiera. 

-Joder- exclamó May dejando el móvil. Había visto su propio reflejo en uno de los cristales y madre mía, parecía el gato Garfiled planeando alguna de sus trastadas. A lo importante, ¿ese par que se había hablado para tener pendiente de leer más de 300 mensajes?

Pues habían sido discusiones por la abreviatura del nombre de Angie, referencias católicas de su nombre, la historia de algún Ángel y han cantado bingo de nuevo;

Mensaje de María de los Ángeles y de todos los Santos y Apóstoles del Señor: ¿Y May? ¿También es una abreviatura?

- Aja...así que quieres saber de mí-se dijo May, antes de continuar leyendo las nada acertadas explicaciones de su nombre. Vaya tela, ese era el caso que Luka le había hecho toda la vida a su madre, claro que era de entender, no recordaba a su madre hablando con Luka sin que éste no estuviese babeando por sus tetas.

- Vamos a ver, Luka..piensa un poco que ya me conoces-era uno de los comienzos clásicos de su madre intentando que Luka cayese en el porqué de su nombre.

- Pues- solía ser el breve murmuró de Luka con hilillo colgando de sus labios. ¡Qué tetazas, joder!

- Mayo del 68..más claro el agua-una vez más su madre le explicaba. De ahí venía su nombre y cabía destacar, que Luka siguiese sin enlazarlo y que su madre a él no le regañase ni le montase pollos feminazis por mirarle las tetas. Claro que, para eso estaba ella,  en cuanto su madre se distraía, buena buena colleja se llevaba Luka. Mucha izquierda, mucho feminismo, pero cuidado con mirarle las tetas a su madre.

Como fuera, a los intentos de Luka por explicar su nombre, los miles de emoticonos utilizados por este, la descripción de lo que habían desayunado y hecho, se llevaba unos cuantos de mensajes más.

- Aleluya..aleluuuuuya-canturreando es que May los fue pasando hasta que tuvo que detenerse en unos muy concretos.

Mensaje de Empotrador: Ah, ya sé dónde dices. Eso está al lado del salón y May a medio día suele estar allí. Acércate y ella te indica. Está tirado de fácil.

Mensaje de María de los Ángeles de todos los Santos y Apóstoles del Señor: Magnífico. Trataré de estar allí sobre las 16. Pero, ¿no le aviso?

Mensaje de Empotrador: Naah..ya lo leerá cuando pueda.

Cuando pueda como escribía Luka, fue a las 16 horas justas y a May el tiempo se le detuvo.

 Se le detuvo y al escuchar el timbre del salón, estuvo a punto de dejar caer la cerveza que trataba de llevarse a la boca. ¿Qué María de los Ángeles de todos los Santos y Apóstoles del Señor ahora Angie estaba en su salón? El nuevo timbrazo le confirmó que alguien estaba ahí. Que no cundiera el pánico. Una vez había tatuado a un cura, bueno a un estudiante de cura para ser precisos, que además dejó los estudios para vivir una historia tórrida de amor con un compañero de nombre Tony que fue justamente el nombre  que ella tatuó en el cura al lado de su pe..basta. Debía hacer algo o no hacerlo. Podría quedarse quieta como el gato al que pillas al lado del saco de su pienso, fingiendo no estar. Aquí no hay nadie. Esa era la idea, perooooo;

-Maaaaaaaaaay...soy Keko-escucho desde fuera y no joder, no valía usar a Keko-¿Quieres pintar conmigo?