Es la morena de pelo largo. Vestido corto estampado. Esa es tu chica, Cayetana.
"Esa es tu chica, Cayetana"- breve frase capaz de encerrar un aberración. No es mi chica, no la elijo para acompañarme en mi vida, la elijo como puro objeto sexual. Observando a la chica, Cayetana continuaba contradiciéndose. Jaume, le dio tiempo y ambos apuraron inquietos sus copas.
- Joven- dijo a medio camino de un suspiro Cayetana y Jaume bajo los párpados mostrándole afirmación- bonita y por sus modales, no desentonaria en mi círculo de ayudantes.
- Aja, tal cual la pediste-afirmó él.
- Deja de usar ciertos verbos, por favor- exigió a Jaume, colocándose molesta el cabello. Lo regañaba como si fuese él el artífice de tal plan y la única culpable era ella- Me estoy poniendo insoportable o de los nervios, no se bien.
- Jajaja, relajate- le solicitó Jaume, tomándole las dos manos. Espero unos segundos mirándola fijamente y ambos respiraron a la par, en perfecta armonía- Puedes aprovechar y acercarte como si nada, así si no te gusta o al final, no te decides, no tendrías que acudir a la cena- terminó por intentar animarla y fue testigo directo de cómo Cayetana batallaba consigo misma.
Pudo ver cómo sus ojos se movían inquietos y sentir como apretaba sus manos tomando fuerza. Para Jaume era de admirar, Cayetana planeaba el regalo mas doloroso que cualquier mujer, puede ofrecer a su pareja y sin duda, no debía ser nada fácil para ella.
- Creo en lo nuestro más allá del sexo, Jaume- dijo Cayetana, reafirmándose en su idea y lo hizo para Jaume y para ella misma- vivimos sin él durante mucho tiempo y no- soltó el agarre de Jaume al verlo con toda la intención de interrumpir- hablo completo, de a dos. Quiero que sus manos vuelvan a sentir lo que es hacer vibrar a una mujer, nada fingido ni acompasado, que disfrute del sexo en todo su esplendor, salvaje, pasional e incluso desgarrado. Porque la vida es una y a fin de cuentas, después me tendrá a mi.
- Ya- dijo Jaume no ajeno a nada de lo dicho por Cayetana. Todos esos argumentos estaban más que claros y era otro aspecto a tener en cuenta, lo que a él más le preocupaba- ¿Y qué ocurre si después quiere más?
- Lo tendrá- concluyó Cayetana al tiempo que terminaba su copa, la dejaba en la coqueta mesa y se incorporaba ajustando su vestido- Lesbiana, ¿no?- preguntó con los ojos mostrando su misma seguridad de siempre.
Aquella que le permitía coquetear con cualquiera y que tantas veces por unos motivos u otros, había usado a lo largo de su vida. Totalmente decidida a no dar más vueltas y hacer por fin, aquello a lo que había acudido, avanzó hacia la barra donde la chica tomaba algo.
La juventud de la chica le hizo sonreír y por cómo la estaba mirando el camarero, sospecho que la chica debía ser simpática además de bonita. Con cuidados gestos, se sentó junto a ella, fingiendo ser una recién llegada.
- Buenas tardes, ¿que desea?- el camarero dejó su conversación con la chica, al ver a tan elegante mujer tomar asiento y espero, que Cayetana lo mirase primero y después mirase la copa de la chica.
- Uhm...-mirando la copa de la chica, se retrasó, atrayendo la atención de ésta- estoy indecisa hoy para todo. Basta decir, que hasta dudé en qué periódico leer primero esta mañana, si El País o El Mundo.
- Puede que dudara, por sus nombres- dijo la chica, mirando a ambos. Le había resultado curioso que la mujer para decidirse por una copa, recordará el comienzo de su día.
- ¿Cómo así?- pregunto Cayetana girando el taburete hacia ella, la chica tardó poco en secundarla y su atención, le hizo sonreír por dentro. La sonrisa fue mayor, cuando la joven carraspeó nerviosa ante su pregunta.
- Bueno...vera
- Veras- la corrigió Cayetana arrugando levemente la nariz y provocó un nuevo carraspeo en la joven. Sus facciones eran tan jóvenes como esperaba, cierto rubor en sus mejillas le daban un toque encantador. Poco marcadas, de rostro alargado, salpiqueado por alguna peca, un sexy lunar en la mejilla derecha, ojos marrones tirando a negro, largas pestañas apelmazadas, naturales sin duda, como natural era el conjunto dulcemente aniñado de la chica con cabello castaño.
- Si...- intimidada por la penetrante forma en que la mujer la observaba, volvió a carraspear y dejó la copa en la barra. Al final sabía, que empezaría a mover las manos y a saber, que podía pasar con el delicioso líquido que había en su interior- Verás, más allá de las claras diferencias políticas existentes entre ambos periódicos, es curioso que ambos usen el mismo formato para su nombre, ¿no cree?
- El País nació en 1976 y El Mundo en 1989, creo que de curioso tiene poco, es más una clara alusión del segundo al primero, queriendo destacar sobre él. La derecha y su necesidad de minimizar al enemigo. Pero esta es solo mi modesta opinión, no soy periodista y créeme, vocación tuve, aunque no hubiese durado mucho en ese mundo. Valga la redundancia- expuso sin fingir lo más mínimo. La chica quedó callada aunque la continuaba mirando. No queriendo intimidarla más, apuro en disculparse- Lo siento, no me decido porque bebida tomar y te suelto un rollazo, esto podría interpretarse como un detalle a tener en cuenta, ya no es que sea mayor, es que empiezo a parecerlo.
- Para nada- contesto rápido la chica. La mujer que se definía como mayor, se había llevado toda su atención y su conversación podía ser tildada de lo que fuese menos de rollazo. Sin dejar atrás, su más que evidente atractivo físico. El silencio instaurado entre ellas, le hizo mirar la barra nerviosa, para después volver a mirar a la mujer. Por dios, le había soltado un para nada incompleto a toda una mujer. Ruborizada busco su copa mientras intentaba reconducir o terminar el para nada- Me refería a que- sabiéndose observada, jugó con la pajita de la copa nerviosa, alguien debería decirle a esa mujer, que su forma de mirar, intimidaba y mucho- Uff- suspiro y la sonrisa serena de la mujer, vista de reojo, le hizo hablar rápido- Me suena muchísimo su cara y no se de que.
- Jajaja, buen cambio de tercio- río de buena gana Cayetana. La joven era sin duda simpática y parecía honesta.
- No se ría, que vergüenza por favor- pidió escondiéndose en su copa. La risa de la mujer era de lo más atractiva.
Cayetana se apiado de la repentina vergüenza de la joven y menguó su risa, pidiendo un Martini seco. En silencio, ambas esperaron a que le fuera servido y cuando lo tuvo en su frente, Cayetana decidió ser tan sincera, como la joven lo estaba siendo con ella.
- Te sueno por la prensa y soy tu cita de mañana noche- soltó lo que para la joven fue una bomba. Su cita de mañana noche, la mujer que la quería como chica de compañía estaba sentada a su lado, le había dado conversación y toda ella, le resultaba de gran atractivo. Muda quedó por segundos, los que tardó Cayetana, en volver hablar- Si aún, quieres que lo sea.
La joven no pudo contestar más que con un carraspeo nervioso, sin aun poder creerse que su cita para la noche siguiente, fuese una mujer tan atractiva en todos los aspectos. Cayetana manejo con experiencia la conversación, sin querer indagar más. Se mostró simpática y amable y se despidió, con el corazón dividido. Para ella, al contrario que para la joven, la cita de mañana no era ningún motivo de ilusión, pero si era, el regalo con más alma que regalaba a alguien y ese alguien, no podía ser otra, que la mujer con la que compartía la vida y a la que amaba desde lo más profundo.
De regreso con Jaume, decidió que necesitaba divertirse, rodearse de su gente y pasar en definitiva, una noche inolvidable que aliviara algo, lo que pretendía hacer.
Perooooooooooo que pedazo de historia, esto se lee interesante y poquito debate se va armar aquí ,ja,ja,ja.
ResponderEliminarGracias Gemo
Pd: te hago una pregunta pero que no se entienda como que estoy presionando, bueee un poquito si lo hago,je,je, Emergencias vas a darle un final?
Estoy contigo Saja, Emergencias?
EliminarA.
.....¿ dije que podías sorprendernos Escritora?....Pues...pues...SI...lo sigues haciendo de lujo.....FUERTE....muy fuerte arranca esta Historia...Y la pregunta...¿ que podemos estar dispuesto hacer por Amor?...Todo?...Hay que Amar mucho...muchísimo...para querer hacer '''' semejante regalo''...o romperse por dentro....para llegar al límite de '''' por ti todo''....Y sobre todo...¿ donde esta el limite del ser humano?....
ResponderEliminar.....Impactante ¡¡ cruda¡¡...desgarradora¡¡...me temo que así se presenta este nuevo regalo....que no¡¡ no nos dejará indiferentes...eso es que además....contigo nunca pasa.....
.....deseando saber....que lleva a Cayetana....a semejante situación.
gracias.....siempre....por ¡¡tanto¡¡......
celeste-negro.....
p.d...X me temo...que aquí.....aquí te liaras más jijiji...
Empiezo a elucubrar en mi mente pensante, jajajaja, “regalo”... un regalo así tiene varios motivos, uno dejaron de funcionar en la cama, dos han pasado por alguna enfermedad y el libido de alguna a volado. Pero vamos rondando los “40” más menos.
ResponderEliminarEn fin, estos son “regalos” que te pueden cambiar la vida, y lo que pensabas era un aliciente en la vida de pareja puede ser una bomba de relojería y mandarlo todo al carajo.
Lo tiene claro esta Cayetana. Y el Jaumet ayuda poquito, jajajaja
Gemo, ya te dije que prefiero que las historias empiecen con el final feliz, y luego se desarrollen, que mi imaginación es muy de echar a volar sola. Es broma, jajaja.
Gracias, un placer leerte.
A.
Ya me veo "confundida"toda la historia...jajjaa, me puedes decir que le pasa a los 40 más menos?. No eches a volar mucho esa imaginación que acabarás como yo...confundida total, jajaja.
ResponderEliminarX
Por Diosss, dejar que acabe las que tiene en marcha primero, sino acabaremos leyendo un capítulo al mes de cada una y eso para los nervios..fatal, pero fatal, eh!..uhmm, tampoco estoy presionando, jajja.
ResponderEliminarX
Clase..poderio..buena conversadora y..¿de vuelta de todo?..
ResponderEliminarUna mujer poderosa y que(como no)me encanta..como casi todas tus mujeres Gemo..
Enganchada al relato desde ya....
Divina_Wilson
Esto si q es jugar con fuego y lo demás es cuento.
ResponderEliminarFascinante
Esperando más C.