jueves, 21 de enero de 2016

Take a Chef 60


En la distancia y en silencio, sin hacerse notar, la Chef dio el tiempo que ella creyó oportuno a Mel. Incapaz de decidir cuánto tiempo necesitaba la rubia contra ese cartel, le vencieron las ganas de acudir a ella y abrazarla. Fue así como en ella ganó esa otra parte totalmente altruista que lleva el amor. Ese que aunque te desgarres queriendo ser la única en un corazón entiendes que...llegaste después y quizás tarde.

Abrazándola por la espalda, no necesito hablar para que Mel supiese que era ella y que contra ella cargase su frustración.
- Se ha ido...se ha ido- gritó tarasqueando a la Chef y ésta aguantó estoica hasta que Mel se giro planteándole cara.
Tres segundos puede que sólo dos, fue el tiempo que transcurrió con ambas en silencio. Para la Chef insuficiente en su necesidad de sentirla bien, y suficiente en cambio para Mel. A la rubia le bastaron milésimas de segundo para necesitar la boca de la Chef. Enrojecida y acelerada como estaba tras la frustración de ese doloroso cartel, necesitaba los brazos de Arel, su cuerpo,  su boca, su mismo aliento. Huérfana se lanzó a por ella y la Chef se tensiono esperando el impacto cuerpo a cuerpo. Podía doler sentir lo pérdida que estaba Mel, pero dolía muchísimo más lo que sus labios la habían añorado. Cuando los labios de la rubia prácticamente rasgaron los suyos, tuvo que abrir los ojos esperando encontrarse con los de Mel. Quizás si se mirasen, podrían detener la brasa que recorría los cuerpos de ambas fomentando un incendio mayúsculo en plena calle. Pero Mel no la miró, limitándose a devorarla con todo. Fue en alguna queja al chocar contra un coche, al recibir un muerdo doloroso o cuando estuvieron por caer al suelo, que la rubia pareció tomar conciencia de lo que estaba haciendo, pero fue solo eso...parecer.
- Lo necesito...lo necesito- pidió agarrándose a la francesa faltandole respirar y bastó para que Arel tomase el mando sacandolas de esa calle. 
De la calle, de su furgoneta, del ascensor y hasta del pasillo. En cada zona las dos se devoraron y el chester de la Chef les dio la bienvenida a ambas, cuando las dos cayeron en él desnudas. 
Lo necesitaba le había dicho Mel y Arel se volcó a consentirla sin tapujos. No sobró un beso, ni una lamida y mucho menos una caricia que sin saberlo, trataba de borrar todas las que ese cuerpo hubiese recibido antes. Pero había un huequito de la Chef, acobardado por las ansias de ésta de dar toda la importancia a Mel y su pedido, que continuaba necesitando encontrarse en los ojos de la rubia. Encontrarse de veras y sin barreras. Mirarse hasta el fondo, reconocerse y al fin volver a sonreír juntas. No fue cuando la rubia se derramó por primera vez entre sus dedos. Tampoco cuando se voltearon en el chester buscando romperse a placer. No lo obtuvo en los gemidos roncos que provocó a conciencia, ni cuando alineo todos sus sentidos en la única dirección de sentirla correrse por ella. Llegó el punto en que a la francesa le pareció imposible encontrar ese consuelo, quizás aliento. Al borde del desgaste en todos los sentidos, cuando ya lo creía impensable, se dejó mover por la rubia y ésta acabó sentada sobre ella. Ahí, con ella encima coronada como la mujer más bonita que había visto jamás, fue que sus miradas se cruzaron. Entonces no hubo segundos que contabilizar e incluso creyó que el reloj sonoro del amplio salón se detuvo. Esos ojos miel, vivos y ardientes, no podían mentirle. 
- Mel- acomodando su nombre en los labios, quiso confirmarlo o simplemente poder respirar. Cuando lo hizo, las lágrimas en esos mismo ojos ardientes y vivos, le estrujaron el estómago. ¿Quien dijo miedo a romperse y quedar rota? Por unos ojos así es que debería desterrarse el miedo y ella lo hizo. Aupandola, dejaron el chester y pasaron a la cama, sin que la rubia rompiese el abrazo formado para marcharse. 
La pasión descorchada en la calle continuó por igual en la cama y en ella las horas continuaron su marcha sin que ninguna les prestase atención. Cualquier falta de palabra fue súplida por innumerables suspiros sobre el cuerpo ajeno; bañándose en ellos. 
Fuera de ese ático, el día pasaba sin que ellas estuviesen haciendo historia. Serían dos amantes más que dedicaban las horas a su razón de ser; amarse. Dos anónimas que sólo marcarían su propia historia. Con más o menos dolor y puede que con futuro incierto. ¿A quién podía importarle? Amores imposibles, amores vendidos, falsos, de conveniencia, idealistas, reales...uno más entre muchos, que sólo ellas mismas podrían juzgar. 
Noche era, cuando el cansancio las dejó con la Chef abrazando la espalda de la rubia. El silencio entonces dolió lo suficiente, para que Arel suspirase contra la nuca de la rubia. Al hacerlo es,  que ésta lo rompió aliviandola.
- Llevo toda la vida con ella. Ya sea como amiga o enemiga....es una grandisima hija de puta que se hizo indispensable para mí. A veces destructiva, otras increíblemente detallista. Ella fue la primera persona a la que confíe mis secretos más ocultos, en quién confíe a pesar de notar que nuestras diferencias sociales en ocasiones la revolvían contra mí. Por mucho tiempo, era la cara que se me aparecía cuando cerraba los ojos soñando con un viaje, una escapada o que se yo. Fue también la primera persona que me hizo sentir mujer haciendo el amor. Mi primer fracaso a continuación, mi recaída después y la segunda oportunidad eterna. Puedo ser una indecisa y una caprichosa, pero no soy injusta. No toda la culpa es suya. Cuando pasamos la línea de la amistad y nos topamos con su lado más posesivo y egoísta, pude mandarla a la mierda y no haber sabido más de ella. Pero a mi modo, la retuve en mi vida y puede que eso sea lo que más me ha jodido de ella esta vez; que fue más fuerte que yo y si...consiguió mandarme a la mierda


11 comentarios:

  1. A pesar de esa noche de pasion..
    (yo diria desesperacion)sigo pensando que Mel esta enamoradisima de Vera y como siempre sigue quitandose las penas utilizando a las demas para aliviarse..con el consentimiento y la paciencia de de Arel..que si esta verdaderamente enamorada de ella..en fin nada mas que esperar nos queda..

    Intensisimo el trocito Gemo uff..gracias..

    Divina_Wilson


    ResponderEliminar
  2. Como dice el dicho "Un clavo saca otro clavo o hace el hueco mas grande",je,je.
    Es bueno que Mel le ponga palabras a lo que le provoca o significo en su vida Vera para poder cerrar una historia que no se dio y poder tal vez enamorarse nuevamente
    Me encanto el trocito ,gracias

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "Un clavo saca otro clavo"... eso dicen, pero el martillazo te lo llevas, jajja...además eso depende de la madera y me parece que a Mel se le van a quedar clavados los dos..uff, le veo un final muy negro.

      X

      Eliminar
  3. Eu penso só uma coisa, a Mel sempre teve a Vera nada impedia ela de ficar juntas, se amavam tanto assim porque cada uma pra uma lado,e mel nunca lê que e ela tinha ciúmes de vera com ninguém, depois chegou arel mel morria de ciúmes dela,se encontravam e era aquela luta pra não se jogar uma em cima da outra, com vera ficamos sabendo agora que tiveram algo porque nuca foi insinuado por elas e principalmente por mel nunca antes ela mencionou sentindo falta ou com ciúmes de vera, então será mesmo que era amor ou só algo que foi interessante na época e depois pela possessividade de vera acabou tudo e ficou só os pensamentos, pq não acredito quando a amor de verdade não ficamos ser lutar ou quando aparece alguém abala sua vida no caso Arel mexeu com mel e suas estruturas

    ResponderEliminar
  4. Tristeza, porque jamás entenderé que se necesite “sexo” para que una persona abra sus sentimientos y verdades, decepción porque a mi Mel, no me descubierto nada nuevo, sigue en el mismo punto, que las dos son culpables, por supuesto ella y Vera, pero por no hablarse claramente. Solo le ha dado palabras a los hechos que están viviendo o han vivido, pero tarde.

    Pero sigo diciendo los mismo “Chapo” por Arel, se ha mantenido fuerte antes las embestidas dolorosas de Mel, y lo ha hecho porque ha puesto la felicidad de esta última por delante del amor que ella pueda sentir, con acierto, no como Vera que sus formas para mí nunca fueron las correctas. Y sobre todo dando la cara de frente.

    Decir, ¿Cuántos amores destructivos hemos visto en esta vida?, que sabiendo que se quieren, no han sabido dejarse marchar y al final se han destruido. Puedo decir que en eso alabo a Vera, que antes de llegar a ese punto de malas formas, eso sí, jajaja también ha sido valiente, y ha dejado su droga en Madrid “Mel”. ¿Sí lo hubieran hecho antes, posiblemente tantas relaciones no se hubieran ido al traste, no?

    Y mi pregunta: ¿Se merece una mujer como Mel, tener a dos “súper mujeres” a sus pies? Cada una que se conteste. Jajajajaja

    Gracias.

    A.

    ResponderEliminar
  5. NO...NO..NO...NO...NOOOOOOOOOO.....JAJAAJAJA

    NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

    ¿SE ME ENTIENDE A ?..JAAJAJAJAJA

    P.D..me encanto tu comentario A..siempre sensato y equilibrado no como yo que soy mas visceral y me enciendo..jaajajaja

    Divina_Wilson

    Divina_Wilson

    ResponderEliminar
  6. Ademas de repetirme..ajjajaaja

    Divina_Wilson

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja,eso es porque tus comentarios valen por dos.

      X

      Eliminar
    2. Perfectamente, no hay duda de tus pensamientos.

      A.

      Eliminar
  7. Ayyyyyyyyy artisstazaaaaa ayyyyy gracias y mil veces gracias¡¡¡
    Las amo las amooooooo amo a mel! Y esta increíble conexión que tienen juntas arel y mel
    Maaaaaaaasssssssssss

    ResponderEliminar
  8. .....Tarde....veo que llego tarde....Porque cuando llego con ganas...con muchas ganas a saber que pasará de nuevo en esta maravillosa....Historia....me encuentro...que...que....ya ...ya....Pero eso lo diré después....ahora...ahora...en este trocito....solo te dire..lo que ya es sobradamente verdad....que eres ÚNICA....Escritora...lo eres....

    ....gracias....por ....¡¡tanto¡¡¡¡....

    celeste-negro..

    ResponderEliminar