¡Ay, Trini! 5

¿Ella como relaciones públicas de una disco de lesbianas? Sonar...sonaba de puta madre. Aunque, no pareciera que Alba lo viese igual.

- Jajaja, por un momento hasta te creí. Adoro tu humor- rió Alba marchándose de la cocina, dejando en ella a una Trini que murmuraba entre dientes. 

- Ujum...así que Albita no crees que pueda hacerlo, aja...buena cosa es provocarme. No sabes lo que has hecho, no lo sabes- retirándose los guantes de fregar, se detuvo en el último momento. Una femme fatal, cuida hasta el más mínimo detalle como era retirarse unos guantes. A lo Rita Hayworth en Gilda, terriblemente sensual, no sólo los azulejos de la cocina y los cacharros por fregar, fueron testigos de sus, en teoría eroticos, movimientos. Porque Gilda llevaría unos guantes de seda, pero los de Trini eran de goma y salir, no es que quisieran hacerlo fácilmente. Luchando contra ellos culo en pompa, la encontró Alba a su regreso.

- Hoy estás de lo más rara- dijo Alba y poquito más pudo decir antes de quejarse. Al escucharla de vuelta en la cocina Trini había estirado tanto de su guante derecho, que al soltarlo por el sobresalto, salió disparado a la cara de Alba- Joder- se quejó Alba por el gomazo recibido y la chacha que Trini llevaba en su interior quiso correr hasta ella. Su heroína. La chacha interior de Trini pedía a voces ser su heroína. Correr hasta ella, tomarle el rostro, que sus ojos se encontrasen, poder recoger entre las yemas de sus dedos la lágrima que se precipitaba por la hermosa mejilla de Alba, llevar después esa lágrima a su boca y bebersela a milímetros de la mirada más enamorada de Alba. Angélico, esa era su chacha. Pero la femme fatal con guante de fregar que ahora era, avanzó decidida hacía la alucinada de Alba y a un palmo, posicionó las manos en la cadera. Tantos gif vistos de Monica Bellucci, debían servir para algo. Alba no podría sostenerle la mirada, sin que la cosita le palpitara. Quizás vendría una hostia, pero ella pararía su mano y en un gracil movimiento, la giraría hasta tenerla sostenida en sus brazos. Alba de seguro cerraría los ojos y entonces, sólo entonces...Alba volvería a quejarse- Joder, si que duele la cosa esa. ¿Me dices ya que te pasa hoy Trini?- dolorida por el guantazo recibido, pareciera que Alba pasase de su postura más firme. No había problema. Trini sabía moverse el pelo (encrespado) cómo toda una diosa; derrochando feminidad y pestazo a amoniaco.

- Lo siento, si es que...- dándose por vencida en cuánto al guantazo dado, relajó postura. Ese movimiento de cabello sólo podía salir bien llevando el pelo milímétricamente planchado y a ser posible, subida a sus nuevos zapatos de altísima cuña. En bambas, daba para dejar que la chacha se ocupara de Alba y mantener su trabajo- Un poquito rojizo se te puso aquí- pero una cosa eran las  sanas intenciones de la chacha y otra que la femme despertada dentro de ella, no pidiera terreno. Podía sentirla empujar a la chacha y situarse frente a Alba. Joder que buena estaba. Es que estaba rica como para perder la cabeza, volverse lesbiana y lesbianear con ella noche y día, una y otra vez. Vale, quizás la femme iba muy ligera de cascos, pero es que el hambre por probar esos labios gruesos y entreabiertos daba para eso y para más- Ayyy- suspirando, ganó la sonrisa de Alba. La pobre no estaría entiendo nada de nada esa mañana, pero ojo, Trini no había olvidado su objetivo- Hoy te demostraré que puedo hacerme cargo- le dijo sin puntualizar más y Alba volvió a marcharse de la cocina sin entenderla.

- ¿De qué?- preguntó Alba sin interés evidente. Puede que su interés real estuviese en el guantazo recibido que aún le picaba. Despreocupada caminó hacia su baño y en él, tras examinar los daños en su rostro, se dedicó a maquillarse, perseguida por Trini.

- Lo de Stacy- aclaró Trini antes de paralizarse. Increíblemente apoteósico para sus deseos era poder contemplar a Alba maquillandose. De hecho, su madre se había enterado de su repentina homosexualidad, justamente por haberla visto hacerlo.

Aquel día llegó a casa excitada como una cochina. Le había servido de poco el pestazo a muchedumbre del bus, que debería enfriar a cualquiera que lo soporte, de hecho es que según Trini los conductores de los mismos, debían carecer de vida sexual. Tampoco le había servido el arrima-cebolletas del metro al que le había cantado las cuarenta por guarro, ni pensar en la hipoteca que le quedaba por pagar caminando a casa, ni el tiempo que le quedaba de compartir casa como si fuese una universitaria, ni menos aún pensar que se jubilaría limpiando casas, tirando a la basura su carrera y máster. Eso debería haberla hundido como para sólo querer llegar a casa y ahogarse en un baño calentito. Baño al final hubo, pero no se ahogó, aunque con algún gemido estuvo a punto. Normal entonces que cuando Paz entró a su habitación y la pilló en batita de lo más acomodada, improvisando tipos de maquillaje, lo flipase:

- Joder. ¿Me estrenaste a Cayetano?- flipando, pero por el regalito de otra amiga para ella, es como se mostró Paz al verlo sobre la cama de Trini. Es lo que tenía compartir piso con su mejor amiga; si Trini había descubierto su  nuevo juguetito sexual, pues lo probaba y tan relajadita.

- Ayyy, falla un poco a máxima velocidad- en su nube multicolor le contestó Trini. Tanta comodidad, tanto brillo en los ojos y tanto desahogo saliendo por su boca, mosquearon a Paz.

- Jajaja, so marrana ¿que tramas?- quiso saber Paz y no hizo falta más para que Trini se viniese arriba.

- Entre al baño a decirle una tontería y madre mía Paz. Estaba maquillandose y peinandose, tenías que haberla visto. Casi me corrí en el quicio de la puerta- con su naturalidar por delante confesó Trini. Paz la miró sin contestarle de primeras, después pasó a enfadarse.

- Me llevas viendo a mi desde ni se sabe, y no te has corrido nunca- dijo Paz claramente molesta y celosa.

- Ja..es que eres tú- contratesto Trini.

- Si..y una mujer- prosiguió a las suyas Paz. 

- Anda ya..es distinto- aseveró Trini.

- Trini...te tengo que gustar, eres lesbiana, yo estoy muy buena..suma, haz el favor y suma- queriendo gustarle se encabezono Paz.

- Ah no..no. Yo no voy ahora a ser la típica lesbiana que realza el ánimo a su amiga hetero. Por ahí no, Paz- exigió Trini.

- Por ahí si, Trini. No vas a ser la que no- también lo hizo Paz, desatando el genio de Trini, pincel de rimel en la mano.

- Me gusta ella, sólo ella. ¿Que parte no entiendes de que me gusta sólo y únicamente Alba?- a puro grito, no sólo a Paz le quedó claro, a su madre entrando por la puerta..también- Jijijiji, es una serie..una prota..eh..ay Mami a mi edad lesbiana...a mi edad me viene a bailar la almeja una mujer- terminó confesando y en urgencias, por el colapso que sufrió su madre. De regreso al baño de Alba, no pudo quedarse en el quicio como si nada. Se había prometido dejar atrás las evidentes diferencias entre ellas, una lesbiana de bandera, la otra (ella) hetero confusa de poca suerte. Que más daba. La cuestión es que en ese baño, en esos instantes eran dos mujeres mirándose mediante un espejo.

- Ehm...no se si ese tono te va- habló Alba al verla pintarse los labios de un rojo intenso a su lado. Tanto divagar a Trini le había supuesto soltarse de más. De hecho ante la pillada de Alba, ni se achanto. Terminó de pintarse sus labios y lanzó un beso al espejo.

- Yayyyy- exclamó para si. La había besado. Acababa de besar a Alba, vale que espejo de por medio, pero beso había sido.

- Jajaja, me gustas espontánea.. Me gustas de veras- dijo Alba antes de salir del baño, dejando en él  a una Trini al borde del infarto o...o no.

- Me ama...sólo le queda darse cuenta- se dijo antes de recordar sus intereses. El anzuelo estaba puesto, faltaba lanzar la caña- Jajaja, yo también me gusto así como dices y... Esta noche cuenta conmigo, te voy a revolucionar el local- informó sin retirarse del espejo. En él se vio con los labios rojo pasión y no pudo reprimir su impulso de alzarse las tetas- Arrasaras bombón- animandose como si estuviese sola, todo el subidon se le fue por el desagüe del lavabo, al ver tras ella a Alba apoyada en la puerta. Sin cuidados, sonrió cual nena inocente, pero eso si..con las tetas bien alzadas.