martes, 16 de junio de 2015

Emergencias 165



Gracietas comunes entre ellos, que no alivió las extrañas sensaciones que sentía la pareja más joven, tras el día compartido cuidando a Ito.
Como era normal, tras la Primera Comunión a la que habían asistido Xavier y Laura, ambos marcharon a casa de Karla y Nacho, llevándose después a Ito con ellos. El día de estos últimos cuidando al pájaro más pequeño de la familia, había sido toda una experiencia para ambos. El problema, que podría convetirse en problemon para ellos, es que lo habían vivido de forma distinta. Conduciendo hacia el Refugio para pasar el domingo allí con la familia, Karla dudaba en abrir ese melón o dejarlo cerrado hasta que por maduro terminara por abrirse solo. Pero ni modo, siendo una Merino...
- Ey...vas muy callado, ¿tanto echas de menos a Ito?- salió por ahí. Estaba claro para ella que el silencio de Nacho estaba relacionado con su sobrino, más si desde que Xavier se lo había llevado, Nacho se había mostrado igual de pensativo. Tras su pregunta Nacho la miró un segundo y después, volvió a perder la vista por el asfalto que atravesaban.
- Estaba pensando.....no se como se acostumbran. Cuando anoche Ito salió a correr a por Xavier con su "papá papá", te juro que me emocioné, no se si yo sería capaz de acostumbrarme, creo que me  echaría a llorar de felicidad cada vez que me lo llamase- sin mirar a Karla fue sincero y no hacía falta lo que acababa de decirle. Karla había sido testigo de su emoción la noche anterior y la que ahora mismo trataba de ocultarle mirando por la ventana. En otras la Merino hubiese esquivado el melón, en estas se desvió al arcén, detuvo el coche y tuvo que hacerle girar la cara para que el melón crujiera abriéndose- Se que tú no lo sientes así- con una mijita de rencor le dijo Nacho y aún sabiendo la respuesta de Karla, prefirió preguntárselo- ¿Miento?
- No...no mientes- soltandole la cara ella volvió a tomar el volante y arrancó quemando rueda. El ruido que ésta produciría, no sería tan doloroso como el suspiro de Nacho.
Los apenas 30 kms que les quedaban para llegar al  Refugio fue todo un suplicio para ambos. A Nacho porque se los pasó mordiéndose la lengua, queriendo y necesitando una conversación entre ambos seria y a Karla, porque se los paso reteniendo las ganas de decirle, lo que ya en el Refugio, lo hablaba a solas con Lau y su increíble vestido de premama de dos meses.
- No siento nada, no lo hago cuando Ito duerme, ni cuando se cae, ni cuando le doy el bibi. Me refiero, lo amo como mi sobrino que es y lo adoro porque tiene muchísimas cosas de mi hermana. Pero no me despierta nada maternal. Fue Nacho quien le hizo la comida, quien lo bañó, quien....joder, no quiero hijos y él si, Lau- dijo Karla.
Ella con Laura apartadas del resto y Nacho con Marina, sentados ambos en la arboleda, con Marina abrazándolo por la espalda.
- No le nace, Marina. Me la pase queriendo involucrarla, examinando sus reacciones y nada. No quiere ser madre, no es juventud, no es su carrera, es simplemente que no quiere ser madre- afirmó Nacho.
Marina lo escuchó tranquila, sin dejar de mimar a su amigo en un momento de su vida ciertamente inquietante. Siendo una mujer Sánchez, con ideales propios y claramente progresista, ella lo tuvo claro.
- Te vas a olvidar por un momento de la mujer que amas, yo lo voy a hacer de mi cuñada a la que adoro y me vas a responder a esto; ¿tú quieres ser padre?- tras preguntarselo Marina sintió el estremecimiento que Nacho sufrió. El dolor de sentirse egoísta, la conciencia de tener que perder un sueño u otro y finalmente el hondo suspiro que dio antes de contestarle afirmativamente. Algo que ella ya daba por hecho y que sin querer hundirlo o romperlo, la llevó a ser la Sanchez que su madre había parido- Listo, estamos en pleno siglo XXI cariño, si un hombre hoy día quiere un hijo, lo tiene.
Laura en cambio, no era Sánchez, ni mejor, ni peor, simplemente distinta. Por eso su consejo a Karla fue diferente al de Marina.
- Una pareja son dos y las cosas que implican a ambos deben ser porque ambos lo quieren. Por mucho que él lo quiera no puede convertirte en un útero esperando que ya embarazada el instinto aparezca, porque eso puede ser una utopía. Y no me vale que use otro útero, porque su hijo viviria con vosotros y en mayor o menor medida, tendrías que involucrarte. ¿Sabes cuantos problemas os podría suponer algo así?- fue lo dicho por Laura. Y obvio, a Karla que ya llevaba lo suyo tras el día con Ito, la mierda empezó a removersele aunque para su sorpresa, primo Nacho antes que su rebeldía.
- ¿Y no es más duro quedarte sin ser padre porque tu pareja no quiere ser madre? Su sacrificio sería muy heavy- fue el argumento de Karla y ok. Tanta seriedad en Laura no era propia y sinceramente no se veía capaz de encontrar una solución repentina para sus dos amigos.
- Darling, si ni siquiera me has dicho lo cañón que estoy embarazada- queriendo destensar la situación y darle aire a Karla, no midió coquetear con ella hasta que Karla, pérdida en su propio laberinto, le barrió todo el cuerpo con la mirada y así llegó primero a su labios y después de vuelta a sus ojos. Que ambas se mirasen de lleno como en otros tiempos, provocó que Laura se acelerara de golpe y que a Karla se le entre abrieran los labios- Jo...der- pensó Lau en el momento justo en que su mirada se perdió en los labios de Karla y no. Ni de broma podían permitirse lo que coño les estuviese pasando. Por eso corrió a tapar los labios de Karla y a decirle antes de marcharse- Continúa no siendo conveniente, que tú y yo nos quedemos a solas.
Desde luego que no lo era. Al menos no, tal cual se encontraba la pequeña de las Merino. A la que sólo le faltaba haber sentido ganas de acorralar a Laura contra la barandilla y demostrarle cuán le gustaba el vestido. Si había buscado calmarse consiguió el efecto contrario, pero aún tuvo el suficiente temple de no coger el coche y pirarse de allí en busca de "algo" que si la calmase. Aunque las ganas siguieron tentandola y para su suerte, al bajar del porche tropezó con su Tía, ¿pelando patatas? ¿Desde cuando pelaba su Tía patatas?
Vale, decir que pelaba patatas era demasiado para el destrozo de patatas que encontró Karla al acercarse a la mesa. 
- En el ejército hay máquinas que hacen esta cosa. Parece sencillo pero no lo es, aunque voy cogiendo la técnica- enfuruñada con las patatas a destrozar, Susana dejó desencajada a Karla, aunque pronto reaccionó al robot militarizado que podía llegar a ser su Tía.
- Pulil cela, laval cela- con algo de humor se sentó junto a ella, pero ni modo. La ansiedad que le producía la situación comenzó a hacerle mella y sus piernas moviéndose sin parar, hicieron que Susana sin dejar las patatas la espiase lo justo, por conocerla tanto, para saber que no estaba bien.
- Sush...tranquila- bajando la mano por debajo de la mesa le pidió a Karla que la tomara.
- Ven conmigo al pueblo- apretandosela a muerte. Karla quiso huir, de las risas de Lu y Mamen frente a la lumbre, de su hermana correteando a Ito o al revés, de las charlas de Fátima con el resto y sobre todo, de Nacho regresando junto a Marina.
- No necesitamos ir al pueblo- usando el plural, Su se volcó en calmar la ansiedad manifiesta de Karla- necesitamos respirar aquí juntas pelando patatas.
La imagen de ambas entre susurros con Susana esgrimiendo una patata con un cuchillo clavado, llamó la atención de Lu y necesitó de poco, para acercarse hasta ellas y cerca de la mesa, darse cuenta que Karla no estaba ni por asomo bien. No había problema, arte para que Susana bajase la patata y dejase de fruncir el ceño tenía de sobra, como para también, relajar a Karla.
- Uhm...desde luego amor es que todo lo haces bien- sensual y divertida por lo que sabía provocaría, hizo sonreír a Karla que pasó a mirar a su Tía, quien a su vez miró la patata y después a Lu.
- ¿Sólo bien?- blandiendo la patata, la exmilitar perdía seriedad.
- Luego en la siesta vemos si te subo la nota o no- continuó el coqueteo Su.
- Ey ey ey que estoy aquí- les advirtió Karla entre risas y wau, seguía siendo flipante para ella ver a su Tía pegandole un señor muerdo a Lu.
Hecho, de momento la peque de las Merino pudo volver a relajarse e incluso a divertirse, porque a ninguno se le había olvidado la gran misión de ese día: averiguar si había bombo Lu&Su.
- Lu jijij, aprovecha y tumbate un poquito. Venga, que hace solecito rico.
Y a ello, iba Inés con un péndulo en la mano.



4 comentarios:

  1. Complicada la situación en la que se encuentra la pareja más joven de la saga, pero pienso que karla aun es muy joven con 23 años, y aunque la diferencia de edad con Nacho no es tan grande, es un tema que los dos deberían de saber hablar y sobre todo llegar a un acuerdo, por el bien de ambos. Este Nacho es un amor, pero no puede seguirle el ritmo a sus amigas en este tema, que un hijo no es una prenda de vestir que se puede devolver. Y entiendo muy bien a Karla, aun no se siente preparada, pero eso puede cambiar.

    Ahora veo más asentada a Laura en este tema que a Marina, jajaja, se han intercambiado.

    Sigo reivindicando la madurez de la paraje Lu & Su, me encanta la experiencia que tienen para saber las necesidad de esta loca tropa, en cada momento. Pelando patatas? Pues es algo que todo el mundo debería saber, es muy útil.

    Pero sobre todo, esa capacidad de arroparse y ayudarse, me gusta.

    Y ahora la pregunta es para Gemo, yo tengo un poco de lío en la cabeza porque el amigo de Fátima es, ¿Fernando o Felipe? Jajajaja

    En fin un día más sin saber si tenemos princesita para el futuro. E Inés con Ito es un amor, como se llevan. ¿Quién es el crio y quien el adulto?

    Gracias

    A.

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  2. Entiendo perfectamente a Karla. Como ha dicho A, es muy joven todavía y puede que aún no tenga el instinto maternal. Aunque yo hace tiempo (no tanto) que tuve la edad de Karla, y a pesar de que quiero y mucho a mi sobri, mi instinto es nulo, jeje. Que no significa que eso pueda cambiar en caso de que conociese a...en fin, que a día de hoy no está.
    De cualquier forma, creo que este es un problema importante para una pareja. Deberán hablarlo mucho y ver qué quieren cada uno para su vida, si persiguen objetivos similares o no. Las cosas no se solucionan teniendo un hijo por probar y ver qué pasa, porque las consecuencias pueden ser aún peores.
    En cuanto a Lu y Su, son geniales y sé que me repito hasta la saciedad. Ya se va notando el influjo de la médico sobre la piloto...¿pelando patatas? Esta Su no deja de sorprenderme...si eso es de primero de la ESO por lo menos, jajaja. Bueno, yo no es que sea un hacha en la cocina, ni mucho menos, así que nunca es tarde si la dicha es buena. Ole por nuestra Su.

    Deseando leer el siguiente trozo.
    Muchas gracias Gemo.

    L.a.c.e.r (aunque como he visto que algunas de vosotras os habéis presentado, mi nombre es Laura. Un saludo a todas).

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  3. ...... decisiones....dudas....y de nuevo decisiones....momentos en la VIDA donde se tiene que pensar...'''si darlo todo por quien amas...o pedirle que en el mismo modo...lo hagan por ti ''' difícil si....lo es...pero quien dijo que la misma vida lo fuese?.. Marina siendo más pragmática...aún así...por amor también tomo decisiones...
    ..... Y dudas....dudas de esa Karla que en un momento puede pensar por besar una boca de la que ya sabe su sabor...dudas...Y porque no tenerlas??...
    ..... la madurez y eso que enseña la vida en cada momento o situación...eso es lo que tienen S@L...sabiendo siempre dar lo que cada una de ellas o ellos necesitan...lo hacen¡¡¡

    ..... Escritora....una vez más bordas tus letras para dar ...quitar...poner...y hacer sentir sensaciones en cada una de las situaciones...una vez más y siempre ÚNICA....lo eres¡¡¡¡
    ....gracias......por ¡¡¡tanto¡¡¡¡.

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  4. Llegar a casa, hogar, familia... Así es para mi
    Gracias artiiiiiissstaza

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