jueves, 14 de mayo de 2015

Emergencias 156


- Mi cuerpo nunca me miente, apuesto a lo que quieras a que ya, somos más de dos- dijo Lucía sin ninguna gana de levantarse de las piernas de Su. No había prisa por salir de ahí y así estuvieron largo rato. 
Para comprobar que a Lucía su cuerpo le mentía o no, quedaban días por delante, para su reserva en teoría a solas, no quedaba tanto.
Queriendo madre e hija escaparse de Pedraza ese fin de semana, no les faltó quedar para tomar el conocido café Sánchez. Solas en la cocina de Lucía con la natural complicidad entre ambas, ésta enseñaba por la tablet a su hija algunas "cositas" compradas por Internet para su esparada salida con Su el fin de semana. Y no es que a Marina le estuviese sorprendiendo lo que estaba viendo, es más. Lo que estaba provocando es querer quitarle alguna de las "cositas" compradas por su madre. 
- De siempre te ha fascinado la lencería- le dijo Marina sin perder detalle de lo que estaba viendo. Su madre era única para elegir exquisitamente- Pero- dejó de hacerlo para mirar a su madre, por lo que acababa de ocurrirsele- ¿Te das cuenta que con Su te has vuelto muy de boudoir?- compartió con ella sus pensamientos y de primeras, Lu entrecerró los ojos no sabiendo muy bien a que se refería su hija- La lencería hecha atrezo- la ayudó y Lu pasó a sonreír de lado- Jajaja, que fuerteee.
- Mae West lo sabía. Una transparencia, una mirada felina y un rizo perfecto son armas infalibles- sabiendo ahora de que hablaban a Lu no le faltó tirarse el rollito. Sin olvidar poner un coto al capricho de su hija- El negligee ni lo mires, es mío.
- Mamá- habiendo acertado de lleno con los deseos de su hija, provocó que Marina protestará e incluso estuviese a punto del pataleo- Somos madres primerizas, mis últimos meses han sido Ito y política, necesito y quiero darle mujer a Inés. 
- Jajaja, como si no conociéramos a Inés. Con tus tetas le vale- evadió Lucía y las dos tuvieron que reir de buena gana. Pero aunque su madre llevase mucha razón a Marina no se le quitaron las ganas de llevarse alguna cosita de las compradas por su madre.
- Entiende que no tengo tiempo, subo a elegir- rápida se escabulló de la cocina, sabiendo de sobra donde estarían esas prendas guardadas y no le importó el grito de su madre, pidiéndole detenerse. Si el timbre de la casa no hubiese sonado, Lucía hubiese ido tras su hija a evitar que la desplomase de lencería. Pero sonando insistente tuvo que dejarla e ir a abrir la puerta. Tras ella apareció Karla, con no muy buena cara. Vale, que no la abrazara a Lu le dio pistas de que algo no andaba bien para la pequeña de las Merino. Por suerte el cariño que ambas se profesaban y la infinita complicidad, provocaron que Lu no tuviese que esperar mucho para saber que le pasaba a Karla.
- La semana que viene tengo las pruebas psicológicas para la licencia. Es una mierda- dijo Karla a su estilo, cagandose en todo. Algo que a Lu desde el momento de conocerla, le había enternecido. Karla era capaz de lanzar palabras mal sonantes con gestos que resultaban de lo más tiernos. Ojos llorosos, voz entrecortada y un abrazo by Lucía que todo lo calmaba- ¿Miento o digo la verdad? Me he drogado y he tenido mogollón de pajas mentales- abrazada por Lu, a Karla no le costada nada soltar sus miserias. Algo que aún enternecía más a la Sánchez.
- Uhm...¿Cuánto hace que no fumas?- conociéndola, Lucía optó por hacerle ver, más que atizarla con optimismo.
- Yo que se...antes de que Ito naciese, ¿no?- sin tenerlo claro, le contestó Karla.
- ¿Crees que alguien con una adicción fuerte superada no cuenta los días que lleva sin ella? Tú no fuiste una adicta- tuvo que ser más clara Lu. Esforzándose por mantenerla abrazada. La ecuación era sencilla: atacon de cojones en Karla era igual a extra de mimos.
- Ya..claro- protestó Karla rallada. De repente todo su pasado le pesaba de mala manera.
- Y tu Tia pasó no hace ni un mes la renovación de su licencia- insistió Lucía- habla con
- No, ni de coña- enrabiotada se soltó de Lu, cortándola- No voy a hablar de esto con ella. Por primera vez me mira distinto, no lo voy a joder ahora- exaltada subió la voz, incapaz de mirar directa a Lucía y su calma amorosa.
- Tú Tía te ha mirado siempre de la misma forma, Karla- sentenció Lucía, cerrando los ojos por lo que sabía Karla le contestaría. Bastaba mirarla para saber que estaba echa un trapito y eso en Karla era igual a rabieta de órdago.
- Mientes, no estabas con nosotras, eso es mentira- la increpó Karla, sin darse cuenta de lo pérdida que estaba o puede que si, pero el miedo a defraudar a su Tía, le hacía pupita- No estabas cuando me sacaba de la mierda de sitios donde yo me metía, no la viste mirarme asqueada sujetandome la cabeza mientras yo vomitaba. No estabas allí así que ahorrate ese siempre conmigo, yo no soy Inés y puede que en verdad no merezca volar- mentar a su hermana le hizo girarse dándole la espalda a Lucía. Ahora si que le era imposible mirarla de frente.
- ¿Ya?- paciente Lucía se quedó sin acercarse. No alteró la voz en absoluto entendiendo a Karla. Inés la graciosa, Inés la piloto, Inés la sana, Inés la formal...y ella todo lo contrario- ¿Has terminado?- le preguntó aguantando las ganas de volver a abrazarla. Karla tal cual estaba se veía muy pequeñita, para lo que ella sabía era Karla.
- Por ahora parece que sí- se encogió de hombros Karla. Escupidas sus miserias, ¿que más le quedaba?
- Tu Tía solo puede mirarte de una forma, no me hace falta haber estado antes para saberlo. Vas y hablas con ella, punto- le ordenó variando la estrategia como buena madre. Pero Karla continuaba evitando mirarla de frente- ¿Karla?- insistió Lucía. No, esta vez no sería ella quien fuese a abrazarla, lo haría Karla solita. 
- Mierda- quejándose como Lucía esperaba finalmente fue a por ella.
- Nadie, escuchame bien, nadie tiene el derecho a juzgarte y tu Tía sería incapaz de hacerlo- cobijandola en sus brazos, Lucía quiso hacerla valer. Por favor, ¿quien podía juzgar la rebeldía de una niña criada de esa forma? ¿Y quien podía no entregarse a la ternura que toda Karla destilaba bajo esa apariencia suya? Puede que su hija Marina si lo hiciera, pero sólo para bajar de intensidad lo que estaba ocurriendo con ellas en la cocina.
- Hay que ver, las que formas para robarme a mi madre. Menos mal que eres mi cuñada preferida y todo te lo perdono- le dijo Marina guardándose de cucar un ojo a su madre. A sus ojos, magnífico el trabajo que había hecho ésta con Karla en minutos.
- Jajaja, joder...soy tu única cuñada- mimada por ambas, hasta las miserias le parecían menos miserias. 
- Detalles sin importancia. Mira que negligee me acabo de conseguir- tiró de arte Marina en cuánto la escuchó reír y ahora quien no rió fue Lu.
- Marina...te dije que el negligee no.
Vale, venía riña entre madre e hija y al poco, empujada por ambas Karla se marchó al helipuerto. Lucía tenía razón, no debía temer a su Tía y de paso, podría hablarlo con ella y con Inés. Ambas llevaban años renovando esa licencia y bien sabrían que hacer. Pero eso sería después de cotillearles lo visto en casa de las Sánchez. 
- Yo no digo nada, pero tenéis a las Sánchez comprándose trapitos ultra sexis y tengo lo que merecen. Es un refugio pérdido de la mano de Dios, mega coqueto, romántico y todas esas mierdas. ¿Lo mejor? La dueña es una tía de la hostia que además es lesbiana- las informó mostrándoles en el móvil la pasada de refugio que obvio, entusiasmó a las Merino.
- Jijiji que sea lesbiana le da puntos- dijo Inés copiandose en mil sitios el enlace al refugio.
- Eso es muy bollonazi- le advirtió Karla- me quedo con Ito el finde, no hay problema.
- Llevo toda la vida bajo el heteronazi, que se jodan sin invertimos los polos- dijo Su enganchada a las increíbles vistas del Refugio.
- Me lo pasó la fumetas. ¿Vais o vais?- les insistió Karla y estaba claro que si. Aunque en principio para Inés era imposible ese finde reservado por Marina para vete tú a saber qué, e igual estaba Su. Normal, ninguna sabía que las Sánchez planeaban un finde en Aranjuez, creyendo a su vez que no coincidirían. Y así pues al final....lo único que quedó claro, es que Ito se quedaba con Karla y Nacho. 
Mensaje de Lucía a Marina: ¿Vais al final?
Mensaje de Marina a Lucía: Pues..tengo una reunión y no sé a que hora terminaré.
Mensaje de Lu a Marina: No te preocupes. De todas maneras Su quiere ir a no se qué sitio.
Mensaje de Marina a Lu: ¿Te quedas sin atrezo? Uy...jajajaja
Mensaje de Lu a Marina: No creo, tu sin regalo de cumple, si.
Mensaje de Marina a Lu: Mamaaaaaaaaaa
Mensaje de Lu a Marina: Porque soy una blanda, sinoooo

Mensaje de Inés a Su: Venga, tú a Aranjuez yo al refugio.
Mensaje de Su a Inés: ¿No era que no podíais? 
Mensaje de Inés a Su: ¿El que?
Mensaje de Su a Inés: Ir este finde.
Mensaje de Inés a Su: ¿A donde?
Mensaje de Su a Inés: Inés 
Mensaje de Inés a Su: Jijijiji. 
Mensaje de Inés a Su: Hostis que tiaca me ha mandado el primo Agustín.
Mensaje de Inés a Su: Desde que está embarazado tiene mejor gusto. 
Mensaje de Inés a Su: Pero...¿que tiene en el chochito? Ay que chochito más raro.
Mensaje de Su a Inés: ¿No adviertes que te estoy ignorando?
Mensaje de Inés a Su: Jijiji, ¿lo que?

Visto lo visto, normal que no se aclarasen y que llegado el finde....



4 comentarios:

  1. Me encanta esta “familia” es lo más alegre, siempre le ven la positividad a todo. Y Marina & Lucía, una relación a envidiar, lo mismo que la forma que está última cuida a Karla, como si fuera una hija más.

    Y qué decir de nuestro dúo de pilotos, jajaja, con ganas de probar el refugio ambas y otras cositas.

    Con ansias espero ese tan merecido fin de semana de las dos parejas. Y como será el de Karla, Nacho e Ito, le nacerá el instinto de ser madre? jajaja

    Gracias.

    A.

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  2. Opino lo mismo..una familia de lo mas positivo y..de lo mas ''loca''....
    Son todos encantadores y positivos..bueno..algunas no..jajaja
    Pero lo mas importante es que estan unidas todas....Me encantan...
    Divina_Wilson

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  3. .....'''' necesito.....y quiero darle MUJER a Inés...'''' palabras....deseos que provocan fuego cuando salen de boca de esa Doc....demasiado ocupada con tanto trabajo....y un negligee a punto para cubrir sus ganas...creo que la la Piloto le espera locura con mayúsculas.....jijiji...
    Lucia y Susana van hacía el mismo destino...quemarse.
    como me gusta esta ''familia'''' y esa VIDA...que sienten tan intensamente..

    ....gracias....por ¡¡tanto¡¡¡¡

    celeste-negro...

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  4. Me encanta la historia. Es de esas que estás deseando leer porque seguro te arranca una sonrisa. Casi siempre predomina el buen humor, la locura, la pasión, el amor, etc.
    Si echo la vista atrás, admiro la forma en la que has ido encajando a cada uno de los personajes de esta historia. Les has ido dando su protagonismo y lugar en su justa medida. Y a pesar de que hay dos hechos trágicos, las muertes de los padres de Inés y Karla, estos acaban por superarse gracias, en parte, a la entrada de la familia Sánchez.
    Para mí, el personaje clave de esta historia es Lucía. Ella no sólo se convierte en el complemento perfecto de una Susana solitaria y parca en palabras, sino que también aparece como esa madre y sobre todo amiga de las Merino.
    Muchas gracias por los trozos!
    L.a.c.e.r

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