martes, 14 de octubre de 2014

112- Emergencias 78

Oscura mañana, amenazante de tormentas. Así amaneció el día. Lucía podía intentar mejorar esa lúgubre mañana lluviosa, desperezándose en la cama sonriente. Pero ni modo, por la ventana no entraban rayos de sol, por más que sonríese. Tirando de refranero español, al mal tiempo buena cara, se dijo. Primero estirarse correctamente, después cerrar los ojos unos minutos y volver a sonreír. Al hacerlo la última imagen de Susana entrando a la base militar, llenaba sus ojos. Solo ella podía hacerse un selfie de espaldas y enviarlo, a cambio de un "llegué". 
Los planes de levantarse y darse una ducha cambiaron, por coger el móvil. Definitivamente, podía considerarse una enganchada más y ahora podía fingir revisar sus mensajes como si nada, pero los dedos la traicionaron buscando rápido el contacto de Susana. Pues genial, el cielo podía amenazar con chuzos de punta, que ella volvía a sonreír. El perfil de Susana era ella misma, sentada en una barquita en Cadaqués. Imposible ahora fijarse en el perfil, por ejemplo de Nacho y su selfie besando la barriga de Marina, o en el de Inés con una ecografía de un neonato sacando el dedo bajo el Estado: Esperando a pajarito, ni el de su misma hija con las manos de Xavier e Inés en su barriga, ni el de Fatima con una foto propia mirando a la nada o..basta, mujer de ganar, volvió al perfil de Susana, protagonizado por ella misma y no se aguantó las ganas de escribirle: Hasta lado romántico que tienes, ¿ah?.
Así tal cual, sin buenos días ni nada y tuvo suerte Lucía, enseguida pudo leer la contestación que Susana le daba: Algún defecto debía tener. Estaba a punto de cambiarla, no hay contacto que de ti no quiera saber. Pero que ovarios, me encanta lucir mujer.
La contestación de Susana, tan sumamente suya, fue como una caricia provocativa. Inaudito, como su cuerpo de inmediato reaccionaba aflorando deseos por ella. La mano que descansaba en su vientre, comenzó a dejar caricias mientras graba una nota de audio: Puedes tener una fotografía mejor que esa, para lucirme. ¿La quieres?- la tonalidad adquirida por su voz en esa nota de audio, no daba a equívocos. La excitación se dejaba notar en cada palabra y fueron esas ganas mostradas, las que la llevaron a fotografiarse con la sábana cubriendo solo partes de su desnudez y la envío en cuanto recibió el Si cómo respuesta a su pregunta de Susana. Enviándola, volvió a escribir: Sólo han pasado unas horas y ya vuelvo a arder por ti.
Prácticamente ni necesitaba una nueva contestación de Susana, aunque cuando llegó, mando la cordura muy lejos de sus sabanas. Antes, hasta algo pudieron escribirse.
Mensaje de Susana: Y a mi me encanta, que lo hagas. Matame de buena mañana como tú sólo sabes.
Mensaje de Lucía: Y también sabes que para ti no tengo pudor. Sólo necesito sentirte conmigo.
Mensaje de Susana: Lo estoy.
Mensaje de Lucía: Bien...porque te quiero aquí follandome.
No hubo más mensajes intercambiados, no de momento. Encendida, Lucía se giró en la cama con verdadera prisa. Las ganas quemaban su sexo, palpitando por sentir los dedos de Susana en él. Girada dejó el móvil grabando en la mesita y como había avisado a Susana, sin pudor se abrió de piernas cómo si la cámara del móvil, fuesen los ojos de ésta mirándola. Cerrando los suyos, se entregó por completo a esos mismos ojos. No hubo jadeo que la cámara no captara para Susana y cuando terminó exhausta y transpirada, volvió a coger el móvil mirando fijo a cámara. Un segundo, dos, tres y puede que cuatro transcurrieron con los ojos brillandole cómo nunca, sin que su respiración pudiera normalizarse. Y otros cuantos segundos más, para terminar estallando en carcajadas.
- Creo que para ti, empiezo a no tener límites y eso es muy peligroso- dijo a cámara antes de dejar caer el móvil sobre la cama y susurrar- Y no sabes lo que me gusta.
Quisiera o no, el reloj seguía corriendo y tras enviar el video a Susana, tuvo que salir de la cama, ducharse, tomar su primer café y tras comprobar, que no se le había hecho tarde, decidirse por pasar por casa de su hija y llevársela a caminar con ella. No mucho, su intención era media hora de caminata ligera, que a su hija, sin duda le vendría genial para la espalda. Tal cual lo pensó, fue haciendo pero cuando salió a la calle bien predispuesta con un chubasquero, comenzó a extrañarse. Los comercios estaban cerrados y apenas había movimiento por la calle. Así nadie la entretuvo y llegó pronto a casa de Marina, sorprendiéndose un tanto, al ser Xavier quien la recibió, con aparentes signos de no llevar mucho despierto.
- Buenos días- lo saludo y se sonrió. Xavier al verla parada en la puerta, de inmediato quiso cerrarse la camisa, pero daba igual. La barba estaba ahí, y su cara de necesitar café urgente también- Uhm...noche de juerga imagino- acariciandole la barba, Lucía se adentró en la casa y si, los vestigios de la noche de los chicos estaba por todos sitios. Incluyendo a Nacho en bóxer bostezando hacía ella- Jajaja, mi niño guapo- en confianza abrió los brazos para recibirlo y Nacho no dudo en abrazarse a ella, super mimoso. Abrazándolo, Lucía no se olvido de preguntarle a baja voz- ¿Todo bien?- no precisó porque no hacía falta. Nacho sabía por quien le preguntaba. Bastó sentirlo abrazarse más a ella suspirando, para intuir su respuesta. Nacho iba a dársela de todas maneras, pero entonces tropezó con el estático Xavier, que no sabía muy bien que hacer.
- Relaja y vete haciendo café. Lucía no muerde- le dijo Nacho, queriendo que Xavier se soltase sin tensiones y como no hacerlo, si Lucía se giraba sonriente.
- No, pero puedo hacerlo- a su modo, rectificó a Nacho y muy bien acompañada se metió en la cocina con ellos. Al poco, eran ellos mismos quienes la informaron de porqué los comercios estaban cerrados. Era festivo en toda Segovia y ella, ni se había enterado. Vale, sus planes estaban a punto de cambiar. Si en Segovia era fiesta, ella no tenia trabajo que la atase y si Susana tenía guardia en la base, ella por primera vez en su vida, pisar una base militar. Pero antes, debía darle un beso a su hija, si es que ésta conseguía despertar.
Y no es que Marina estuviese durmiendo. En realidad estaba de lo más despierta, pero tumbada aún en la cama con Laura y Karla escoltandola. Vale, era pésimo que fuese festivo y todos estuviesen libres menos Inés. Es lo que tiene servir al ciudadano, no entiende de festivos y a ella le había tocado pringar. Fuera de ahí, le estaba encantado ver en primera persona, como Laura acorralaba a Karla para que le contase su noche con Nacho. Que desconcertante verlas picarse, besarse y tocarse. No porque no fuera natural, sino porque en verdad juntas se veían genial, aunque su corazón como el de la misma Karla, tiraba más por Nacho. A sus ojos ambos eran ideales. La niña rebelde que era Karla, con el trovador super cariñoso y detallista que era Nacho y bueno, Laura tenía ahora otro entretenimiento.
- Jajaja te juro que no ha pasado nada y no me pongas las tetas en la boca, porque la volvemos a liar- las quejas de Karla con Laura encima de ella, la hicieron reír. Menudo par estaban hechas y que oportunidad tenía de observar bien de cerca cuanta verdad había en Laura sobre sus sentimientos hacia Karla.
- Vamos ya- protestó Laura, acomodándose sobre Karla, ajena a la atenta mirada de Marina sobre ella. Era imposible que entre ellos ni hubiese pasado nada y así se lo hizo saber- Os pasasteis toda la noche abrazados y así os fuisteis a la cama, no puede ser que no ocurriese.
- Ocurrir, ocurrió de todo- le contestó Karla, absolutamente sincera- No hemos dormido nada y por primera vez en mi vida, me importó una mierda el sexo y es raro, porque me moría porque sucediera y lo mejor- hizo una pausa necesitando morderse los labios de pura emoción- No me desgastan sus porqués, ni me ralla nada de él- les dijo a ambas y Laura pronto puso morros.
- ¿Es que yo te rallo?- un poquito protagonista siempre, Laura enseguida saltó, haciendo que Marina rodase los ojos para después pegarle una patada- Ayyy, da igual...yo estoy feliz- rápido pasó a mimar a Karla, procurando mirar a Marina. Que perra, como podía llegar a conocerla y como, como nadie, sabía bajarla a tierra. Pues casi pisándola, Laura improvisó a su forma- Su sonrisa es primavera y nació para el amor, una chica entre un millón, una entre un millón- pasó a cantar sobre Karla pero que no creyese así, que se libraba de que Karla le preguntase.
- ¿Y tú qué?- la pregunta de Karla, no es que se quedara sin respuesta. Marina lo hizo por Laura negando con la cabeza- Venga ya, saltaban chispas entre vosotros. Se queda bobo, mirándote. Lo vimos todos- en ese punto buscó el apoyo de Marina, pero nada, ésta arrugaba los labios sin mucha fe. Laura entonces fue consciente de como las cuñaditas se intercambiaban mensajes callados y ella si que no se calló.
- Pues tú no vayas de sobrada que tampoco follaste- le dijo Laura a Marina, pero oye, ésta no se ofendía.
- Jajaja, vaya novedad...mi hermana con dos vinos pues...en fin, una pena de Merino- dijo Karla y por ahí si que no pasaba Marina, de su chica se reía ella nada más, o no...porque con tanta risa acabó por llamar a Inés y..
- Cariño, se ríen porque no me follaste. Diles algo- le pidió a Inés nada más descolgó ésta con el altavoz puesto. Y puede que la piloto  con dos vinos no sea nadie, pero con dos cafés a fantasma no le gana nadie.
- Jijiji, ¿Estas segura que no? Porque a mi la ducha me ha dejado nueva- picada habló de más, provocando que su hermana y Laura se descojonasen por su respuesta, pero Marina...
- Ehm...¿me explicas por favor? Así, tranquilamente que entienda yo eso de la ducha si aún no he salido de la cama- autoritaria sonó de más Marina, pero nada que ver y oh, oh...pensó Inés, pagando su fantasmada. Mientras Mami Lucía llegaba a la habitación y como no, las encontraba hablando de sexo.
- Siempre pensando en lo único- las saludó hilando con el tema principal de la mañana. Aunque mira quien fue a hablar- Me encanta este momento de los hombres preparando el desayuno y nosotras aquí.
De momento, porque tras la ducha tuvieron que bajar y alguna, como era el caso de Laura, enfrentarse al hombre de barba dura, que al verla aparecer con sólo una camisa puesta, marcó mandíbula antes de girarse no queriendo mirarla. La rabia de verla con tan poca ropa estando la casa llena, contrarrestaba con la ansiedad de observarla más detenidamente.
Por una vez Laura, no estaba pretendiendo nada, que no fuese tomarse un zumo. Con ambos baños ocupados, por Karla y Laura, y ya sin Lucía en la casa con la que entretenerse, la mejor opción era un rico zumo de naranja recién exprimido. Igualito a los que Nacho estaba preparando. Soñolienta a por él se fue, pero se quedó parada ante la ancha y fuerte espalda de Xavier, acompañada de un culo de lo más Agh...daban ganas de arañarlo por entero. Aunque, no es que el reflejo de Xavier en el cristal de la ventana le animase a ello. Un tanto parada, por la clara omisión del abogado, optó por esconder su decepción abrazándose a la espalda más estrecha de Nacho.
- Buenos días, ¿ese zumo es para mi?- aniñado le salió y el abrazo fue muy cerrado. Normal, el tipo del que quería un abrazo mañanero, que la envolviera perfecto entre sus enormes brazos, volvía a la omisión hacía ella, después de una noche de lo más bonita. Ajeno a Xavier, que estaba malentendiendo por completo ese abrazo, Nacho enseguida quiso mimar a su amiga y se giró, abrazándose de frente provocando que la camisa de Laura mostrase más carne de lo normal y horror para los intereses de ésta, confianzudo Nacho rompió el abrazo con una cachetada en el culo de ésta.
- Estas durita, ¿volviste al running?- entre amigos, Nacho siguió a lo suyo y Laura por igual lo hizo, aunque que demonios. Le estaba reventando el silencio de Xavier y su obsesión por una única tostada.
- Me abandonasteis los dos, en algo que tenía que echar mi falta de sexo- a más quemada con Xavier, más pasota se volvía. Ah vaya, esa información pareció sorprender a Xavier, que apretó mandíbulas tirando la tostada al cubo de basura. Ahora si, Nacho comenzó a extrañarse. Laura se apoyó en la encimera bien cerca del callado Xavier, sin dejar de tocarlo a él. Estaba claro lo que Laura intentaba hacer y no le apetecía lo más mínimo, ser usado para algo así y mucho menos quería que lo fuese Karla, pero no le dió tiempo a avisarla cuando ésta llegó a la cocina y fue atrapada entre las piernas de Laura.
- Estábamos hablando de como quemar energías cuando no se folla. ¿Como lo hace mi peque?- sorprendió a Karla con la pregunta. De cabreada con Xavier, estaba pasando a dolida y así, se metió en un berenjenal ella solita.
- Ehm...¿haciéndomelo?, de todas maneras yo me lo hago por deporte, desastresa y limpia- le contestó bien llana Karla, sonrojando a Nacho. Pero daba igual, Laura sólo tenía un propósito; molestar a Xavier. El mismo que continuaba omitiendola. Le hubiese bastado una sonrisa, una simple sonrisa, ni siquiera le estaba pidiendo su sonrisa más sexy de medio lado. Pero nada, eso era lo que conseguía, nada por su parte.
- Al cachitas no le pregunto. Seguro no baja de cuatro horas en el gimnasio Jajaja- a matar tiró y prontro Karla busco entender que pasaba en Nacho, pero para nada iba a servir. Laura iba embalada y Marina uniéndose con todos, temió lo peor- Tss, aunque con los anabolizantes ya se sabe- unió los dedos especificando un tamaño bien pequeño y para Xavier fue bastante. A la primera tostada tirada en la basura le siguieron las que acababa de sacar del tostador. Era eso o cerrarle la camisa a Laura como si fuese una cría. Ni siquiera la más aguda, que era Karla, supo que decir y no hizo falta, fue el mismo Xavier el que recuperó el habla.
- Mejor os dejo desayunar tranquilos, tuve que haberme ido a noche. Disculparme- educado pretendió marcharse sin más. A la mierda las niñitas consentidas...que no se callan.
- Es que ni siquiera tenías que haber venido- volvió a atacarle Laura y basta, no iba a aguantar ni una más, por mucho que las ganas de ir a por ella y bajarla de la encimera para besarla, le estuviera estrujando el estómago. De haber estado solos, sin duda se hubiese dejado llevar por esas ganas, pero con tres personas presenciando su vapuleo, plantó cara.
- Desde luego, me hubiese ahorrado verte así- le dijo encarándose con ella, harto de sus ataques. Mientras los otros tres se miraban sin encontrar la forma de detenerlos.
- ¿Así como?- quiso saber Laura o en verdad no. Sólo eran las ganas de que él no llevase la última palabra. ¿Pero por que le hacía eso?
- Desnuda y...- quiso detenerse Xavier en ese momento  o irse sin más, pero Laura le mantenía la mirada bien altiva- sobandote cómo si fueses
- Vale ya...a los dos- alzó la voz Marina, temiendo que Xavier acabase la frase.
- Si..vamos a calmarnos- la acompañó Nacho, pero ni caso. Ese par ni veía, ni escuchaba a nadie más que no fuesen ellos cara a cara.
- Jajaja, desnuda dice el melón...te voy a enseñar lo que es desnuda- de un salto se bajó de la encimera y Xavier tuvo que cerrar los puños luchando contra si y las cada vez más inmensas ganas de callarla besándola. Hubiese sido lo mejor, porque Laura bajada de la encimera dió un paso y se quitó la camisa por entero- Esto es desnuda, imbécil- mostrándose aguantó estoica brazos en jarra, las ganas de llorar. Mientras Xavier se marchaba con todo un tormentazo oceánico revolviendo su interior. Después, fue Laura la que se marchó corriendo a la habitación de Marina y los tres restantes se quedaron mirándose todavía alucinando.

- Vale- habló Karla tras carraspear- en momentos así extraño a mi hermana. Ella hubiese sabido salir con cualquier chorrada tipo; ¿hola k ases? ¿Te la follas o k ases?



3 comentarios:

  1. Como está el patio, de revuelto entre Laura y Xavier, uff

    Ante todo que Susana no pierda el móvil, jajaja, que poco me fio de ellos.

    Nacho y Karla, viento en popa.

    Me gusta cómo van las cosas. Me quedo siempre con ganas de leer más.

    Gracias,

    A.

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  2. ..... Y TODO TRASCURRE ENTRE ENREDOS Y MÁS ENREDOS...PERO SIEMPRE...CON EL LADO BONITO DE LA VIDA...COMO DEBE SER...SIN MÁS...EL OTRO LADO...ESE HAY QUE ESQUIVARLO ...MUCHO MEJOR HACERLO...
    ...ME SIGUE ENCANTANDO ESTA HISTORIA.....

    GRACIAS....SIEMPRE....ESCRITORA....

    CELESTE-NEGRO.

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  3. Lucía y Susana no pierden el tiempo...está claro que no, jejeje.
    En cuanto al encontronazo de Laura con Xavier, me ha encantado la actitud de éste último. Creo que Laura está muy acostumbrada a conseguir todo lo que se propone y a que le vayan mucho detrás, y Xavier parece que no está dispuesto a entrar en ese juego.
    A ver como lo arreglas para que este par de dos acaben juntos...
    Un saludo Gemo
    L.a.c.e.r

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