112- Emergencias 68

Loco, tierno, romántico y sobre todo, tan de Nacho. Desde que comenzará el curso de Azafata de vuelo, apenas habían podido coincidir y en la mayoría de las ocasiones hacía sido junto a Laura. Bueno, no podía culparlo. Las dos escapadas de los tres juntos, dejaron más de un brecha abierta entre ellos. Por eso fue mucho más emotivo encontrarlo cómo pasajero de ese avión, tanto como lo había sido que Susana hubiese ido a verla, pero distinto.

Lo fue al verlo subir al avión, tan guapo como solo él podía serlo e indiferente. El chispazo que atravesó a Karla, al verlo saludar a su compañera fue nada, al sentido cuando haciéndose el indiferente, la línea de sus miradas se cruzaron, ruborizando a Nacho. Después de sentirlo le fue imposible no seguir sus pasos por el avión, verlo tomar asiento y como no, escuchar a sus compañeras encantadas con la varonil presencia de éste.

- Agh...dios, es una monada el chico del 14, dejarme que lo atienda yo...por favor.

Obvio, con tanta atención femenina puesta en él, Karla ni pudo acercarsele. Poco celosa, incluso le divertía el pequeño alboroto que hacían las chicas sobre Nacho. Para ella ya era bastante el increíble y bonito gesto que éste había tenido para con ella, volando sin ningún sentido a Tenerife.

Una almohada pedida por Nacho a una de sus compañeras, fue el motivo aprovechado por Karla para por primera vez, acercarse a Nacho y sus nervios mal disimulados. Punto totalmente extraordinario que conseguía a ojos de Karla, Nacho a su favor. Podía estar buenísimo como nadie, podía tener la sonrisa más bonita vista, pero era nada comparado, al poder que le otorgaba a ella, el ruborizarse ante cada cruce de miradas o sonrisas compartidas.

La almohada solicitada fue la excusa, dársela fue el primer roce entre ellos y las gracias amables y educadas de Nacho, fue el punto final y a su vez, el inicio de todo. Porque Karla no se aguantó las ganas de gozar cuanto quiso de los nervios que en él provocaba unidos a su sonrojo natural y sonrisa roba corazones.

Ok, el jueguecito de te doy la almohada, ay no espera, te la coloco, muévete un poco y dios...no puedes oler más rico de lo que lo haces, terminó con la sonrisa de Nacho tatuada en su rostro y con Karla, mordiéndose los labios a punto de sangrar de las inmensas ganar de morderle a él, justo su sonrisa. Había que acelerar, o cualquiera de sus compañeras vendrían al rescate del "guaperas" simpático hasta morir. Mejor improvisar algo rápido y bien facilito.

- Ve al aseo y no cierres con pestillo- le pidió con la almohada por fin colocada y con los labios rojos a punto de romperse.

A la mierda su primer vuelo y sus intenciones de convertirse en una chica seria y formal. Dos meses echándolo de menos, bien valían un puesto de trabajo. Ya después peregrinaría a Torrejon pidiéndole perdón a su Tía y de vuelta al Inem, por supuesto.

Nacho la obedeció aunque no pudo dejar de ver en él cierta reticencia, que no hizo más que aumentar las ganas de la hembra avariciosa y consentida, en la que se convertía con él. Después de todo, no se le dió nada mal, simular estar trabajando y colarse con toda la soltura del mundo en el aseo donde Nacho había entrando y WTF, el Nacho que la recibió en ese aseo, un tanto acobardado, o tímido, o tierno o lo que fuese, le dió un chispazo propio de más de mil watios. Pero nada, la hembra avariciosa, consentida sumaba con él así, más ansia por ese hombre que la esperaba con las manos en los bolsillos.

- Tenerife- le dijo nada más cerrar la puerta y tuvo que cerrar los puños o la perra en la que se estaba convirtiendo podría hacer jirones la camisa que llevaba Nacho, para empezar.

- Si...es una isla muy bonita- contestó Nacho rígido cómo una tabla. Imposible en tan pequeño espacio escapar de su presencia, menos de su mirada y ni hablar de su olor. Joder, no tenía escapatoria y Karla daba el único paso posible en ese aseo y entre ambos.

- La isla bonita es La Palma, no Tenerife- lo acorraló Karla y eso que se estaba exigiendo no ser tan perra con quien lo merecía cero. Pero siguió, lo hizo en palabras y lo hizo en formas. Nacho se encogió de hombros, que más daba Tenerife o las restantes seis islas Canarias, si la Única verdad era la que iba a salir por su boca.

- Da igual...ninguna de ellas te hace justicia- dijo y nada más hacerlo, deseo que el asqueroso wc del avión lo tragase por entero y por patético. Menos mal, que Karla fue muy Karla con él y su patetismo, echándose a reír en toda su cara.

- Jajaja, eso fue muy caballeroso- se burló son ninguna mala onda, buscando que Nacho volviese a mirarla de frente, pero no hubo caso.

- Vale- subió los hombros Nacho, buscando cualquier punto donde fijar la vista que no fuera Karla.

- Super kuki- prosiguió Karla, sin dejar se buscar su mirada.

- Vale...bueno, pues...- siguió huyéndola Nacho en un metro cuadrado de espacio.

- Mega gentil- insistió Karla teniendo que morderse los labios. Ese Nacho enrojecido y huidizo desataba a la perra más hija de puta y zorra que llevaba dentro.

- En fin- acortó Nacho. Si seguían podían hacerlo por horas y Karla tenía un trabajo por atender. Justamente por el que él estaba volando a Tenerife para volverse en el siguiente vuelo.

- Voy a besarte- por igual acortó Karla posando las manos en su pecho y dios, sintió como las uñas le crecieron adivinando el gustazo de hacer esa camisa con tirantes jirones. Mejor siendo Nacho, sujetarse a sus tirantes esperando el beso con el que lo había amenazado, pero Nacho tenía sus propios planes.

- No- se negó Nacho y vale, debía reforzarse cogido así por Karla, parecía un monigote.

- Lo voy a hacer- de nuevo insistió Karla, era la hostia tenerlo ahí, con beso o sin él.

- No- siguió negando Nacho, pero joder ya era demasiado y al final, tomó las manos de Karla situadas en sus tirantes y de nuevo sus miradas se cruzaron. No hizo falta más, para que los dos se emocionarán.

- Estoy volando, Nacho- le dijo Karla reteniendo la emoción agarrándose fuerte a sus manos y a Nacho le brotó una sonrisa bien orgullosa.

- Lo se...- porque era así. Después de todo Karla volvía a volar y si su padre estaba la mitad de emocionado que él allá donde estuviese su alma, bien valía que Karla faltase a su palabra y que él temblase como hoja sacudida por el viento.

- Si y me encanta que estés aquí conmigo- terminó por confesar Karla olvidándose de hembras caprichosas para ser la Karla que sólo Nacho sacaba. Estando ambos emocionados lo abrazó entre risas sin olvidar a sus compañeras- Me estoy hartando del babeo que provocas.

- Jajaja, me puse guapo...eso es verdad- concordó con ella Nacho, aferrándose a su cuerpo. Joder, era tan sumamente bueno volver a abrazarla, pero podía dejarse llevar por sus anhelos, Karla debía volver al trabajo y para eso, debía soltarla aunque eso le supusiese crujir como lo hace un olivo centenario. No muy distinto lo estaba sintiendo Karla y no por la obligación de trabajar, sino porque Nacho no merecía sufrir más sacudidas de su parte o de parte de Laura. Por eso lo soltó, guardándose las ganas locas de besarlo y así, ella volvió al trabajo y Nacho a su butaca.

Cuando aterrizaron, Karla tuvo que seguir aguantando los comentarios de sus compañeras, mientras Nacho volvía a embarcar media hora más tarde de regreso a Madrid. Todo en el aire nuevamente entre ellos dos...o tres.

Mientras tanto y tras el almuerzo, el WA volvió a ser el protagonista entre Marina e Ines. Tras los primeros estados y después de que Ines prácticamente se cayera del helicóptero al recibir dos fotos de lo más sugerentes de sus premios magníficamente colocados, no en estanterías y si, en el cuerpo siempre apetecible de Marina, volvieron a tomar protagonismo de nuevo de la mano de ésta. Sería por estar arrepentida de la nueva bronca montada, sería por lo largas que se le pasaban las horas sin ella pese a hacer de todo o simplemente porque era verdaderamente adictivo jugar con ella mediante esa aplicación y su posibilidad de mensajes ocultos en un estado. En ésta ocasión volvió a las canciones y así como estado puso: Sabes que yo puedo ser, terriblemente cruel para que no pierda la tensión...

Natural, Ines lo leyó enseguida. Podía haber hecho dos traslados, haber discutido con Marina, buscado pagar su cabreo jugando al ajedrez online o leyendo cualquier cosa, que el móvil estaba siempre bien pegado a su mano y con él, todo un sin fin de redes sociales. Aunque, seguía ganando por excelencia el WA, donde enseguida se daba cuenta del nuevo estado de Marina, sonriéndose al darle toda la razón. Absolutamente cruel, algo que para su desgracia le gustaba en exceso. Pidiéndole mas tiempo a Oscar y sus ganas de café, tecleó rápido en el móvil, modificando su estado por: Voy a ser terriblemente fiel, cuando se te pase la emoción...

Desde luego era un mensaje muy claro para Marina y la continuación a la canción utilizada por ésta. Ok, más valía dejar el móvil y darle el café mas que pedido por Oscar si no quería perder a un amigo.

- Es increíble, te monta la de dios es cristo ...y con un estado del WA, ya te tiene sonriendo como tonta- le dijo Oscar caminando a su lado, directos a cafetería, deteniéndola sorprendida- Creeme, no sólo yo he pillado los mensajitos que os dejáis por ahí- continuó aclarándole a Ines, pero no es que le importara mucho a ésta tras ver a Manu en la barra de cafetería.

- Fuck- fue el pensamiento de Ines nada mas reconocerlo. No por él, sino porque le recordó la cena con el omnipresente Xavier y sus putos espermatozoides.

Razón tenía Oscar, no sólo el se había dado cuenta del jueguecito entre ambas, de las primeras fue Lucía y en ésta ocasión, también fue testigo de su intercambio. Nada tendente a enjuiciar y todavía en la consulta rellenando informes, le pareció muy divertido la forma en que su hija e Ines, aireaban sus cosas y le apeteció probarlo ella misma. Al igual que su hija, necesitó de una contrincante y vaya tontería, ni a pensarlo tuvo que ponerse. Dispuesta a jugar escribió como estado en su WA: Oye esta canción que lleva alma, corazón y vida..

Tras hacerlo dejó el móvil sonriendo quinceañera. Era jodidamente bueno sentirse así de pava por solo pensar en que haría o pensaría o haría Susana al leerlo. Contando que lo hiciese.

- Fuck- pensó al momento Lucía como lo hiciera Ines. Sentirse adolescente pasados los cincuenta estaba genial, desesperarse esperando no sabía muy bien que, no le gustaba tanto.

Y-Fuck- fue lo que pensó Susana hora y media más tarde, cuando leyó el estado de Lucía. Iba a escribirle un mensaje cuando topó con su estado y Los Panchos. Una cabronada tan propia de Lucía, que le haría retener una sonrisa costase lo que costase. Cosa distinta era guardarse las ganas de devolverle la tremenda horterada, cambiando su estado por: Bailame... la.

Dos palabras, sólo dos palabras le bastaron para que al leerlas, a Lucía se le olvidase la hora y media que había tardado en contestarle y casi, que aún estaba en la consulta donde sería difícil consentirla. Vale, había pasado de gamberra, a la pubertad y de ahí a una mujer sensualmente generosa. Susana le pedía bailar y ella le bailaría, claro que sería a su forma y cuando quisiese.

- Uhm- medio gimió planeando su baile, sin olvidarse de volver a cambiar su estado por : A mi manera, cielo.

Ella medio gimiendo y Susana quisiera o no, gimiendo por completo. Ella lo había pedido y ahora por lista, sufriría las taquicardias que Lucía seguro le provocaría con el dichoso bailecito. Lo mejor mientras tanto, era escribirle aquello por lo que cogió su móvil.

Mensaje de Susana a Lucía: Aprovechando que estoy en Madrid , quieren cenar en el Chef-House de Luis. A las 19 h, tienes tren.

Mensaje de Lucía a Susana: No te hacía voyeur.

Mensaje de Suana a Lucía: Yo a ti un poco exhibicionista, si. ¿Dormimos a que Aurora?

Mensaje de Lucía a Susana: Dios mio....esto es un corte en toda regla. ¿De verdad piensas que bailándote lo que sea voy a dormir a que Aurora? Tú limitate a recogerme, lo demás dejamelo a mi.

Mensaje de Suana a Lucía: Fiu...que alivio, por un momento pensé que me escribía con alguien que no eras tú.

Mensaje de Lucía a Susana: Sabía yo que no me puedo relajar nada, te encanta que te de caña. Viene Fatima que habíamos quedado para unas compritas. ¿La invito? A mi me parece que cuadraría genial con Felipe.

Mensaje de Suana a Lucía: Ahora de celestina...volvamos a tu baile y a no dormir con Aurora, mejor.

Mensaje de Lucía a Susana: Jajaja, solucionado...Felipe y Fatima que duerman donde Aurora.

Mensaje de Susana a Lucía: Pierdo reflejos, iba a preguntarte que donde dormimos nosotras.

No, no le hacía falta preguntar por donde dormirían, ya intuía lo tonta que sería esa pregunta y el nuevo estado de Lucía, ya de compras con Fatima, le confirmó que dormir no sabía donde, y menos si lo haría.

Estado Lucía: 19 h. Un tranvía llamado deseo.

Así entre estados de WA, algún mensaje y alguna llamada, para Ines llegó su fin de turno y con él, cumplir con la promesa hecha a Marina de no llegar tarde a la cena o cumplir con la cerveza prometida a Oscar y otros compañeros.

Otra que se entretenía en chorradas, el mejor plan era cerveza con Oscar y llegar tarde a la cena. Así contentaba a un amigo, se quejaba con él de puro gusto sobre Marina, llegaba tarde a la cena y se libraba con ello de la mirada con la que Xavier recibiría a Marina y sus vestidos "no recuerdo estar embarazada". Plan perfecto y tres pájaros matados de un tiro. Eso hizo y para cuando estaba metiendo el coche en el garaje de casa, para ir caminando hasta el restaurante habitual de Marina, ésta ya andaba quejándose vía WA por su tardanza.

Mensaje de Marina a Ines: Alguien debería avisar a las heteros convertibles de estas cosas. Estar con una mujer conlleva que te diga que llegara a hora y pase justo una hora y no haya llegado.

Mensaje de Ines a Marina: ¿El esperma andante ya te ha revisado a gusto?

Mensaje de Marina a Ines: No empieces con los celos tontos,   que no.

Mensaje de Ines a Marina: ¿Yo no puedo y tu si?

Mensaje de Marina a Ines: Entra de una vez, que te estoy viendo por la ventana.

Mensaje de Ines a Marina: Jijiji....estas guapísima. Y no se si eso me agrada o me enfada.

Mensaje de Marina a Ines: También estoy súper cachonda, si quieres nos ponemos a discutir que te produce saberlo.

Mensaje de Ines a Marina: Joder...entonces que le den a la cena.

Mensaje de Marina a Ines: Jajaja, que entres de una vez.

Mensaje de Ines a Marina: ¿Se puede saber que vestido te has puesto? Tienes las tetas que...ponte ahora mismo la pashmina.

- Agh....joder- tuvo que quejarse al aire Ines, porque tras su ultimo mensaje vio perfectamente a Marina dejar el móvil con toda la intención del mundo en el bolso. Muy bien, la pashmina no se la pondría pero el pañuelo que ella llevaba al cuello si- Puto sube y baja- prosiguió quitándose el pañuelo mientras entraba en el restaurante. Vale, siendo el habitual de Marina y ahora también de ella, no faltaban los curiosos que observaron sin pestañear como entraba y como se dirigía a la mesa ocupada por Xavier, sus padres y Marina mas sus bufas a punto de romper el escote. Normal por otro lado, ahí estaban cenando como si nada, pero en verdad eran la pareja de lesbianas que iban a tener un hijo en común con el abogado armario empotrado que venia a cenar con los futuros abuelos paternos. Un poquito de curiosidad debían dar, siendo sinceras. A lo que había que sumar, el empeño de la futura Mama de seguir usando ropa de no embarazada cuando estar, estaba. En otra ocasión el vestido o para que engañarse, las bufas exageradamente generosas de Marina, le habrían hecho salivar a lo bollera salida, pero estando Xavier sentado justo enfrente de esas bufas, le daba auténtico ardor de estómago y así, no podía llegar a la mesa de la mejor de las maneras- Buenas noches- saludó en general para enseguida tender el pañuelo a Marina- Está refrescando.

- Tranquila, ya he pedido que suban la calefacción- le contestó no Marina y si Xavier, provocando que el estómago le ardiera directamente. Bien, desde luego no pareciera que sería una cena amena sino todo lo contrario. Aunque un esperma andante no la iba a callar.

- Lo que tu digas, guapo...pero mejor se lo pone y punto- con autoridad exigió y con la misma dio con su culo en el asiento, sentada a la fuerza por Marina y no, el WA no quedó en silencio. Porque el padre de Xavier, resultó un cachondo mental con un grupo muy especial en esa aplicación.

Mensaje de Alfonso a " Los Ramones ": Ha llegado la novia, le ha querido tapar los melones y el snoob de ni hijo se ha puesto gallito....se monta, ésta noche se monta. La foto de los melones en cuánto mi bruja se descuide.

Mensaje de Xavier a Papá: Te has equivocado mandando el mensaje, dame ahora mismo el móvil.

Mensaje de Alfonso a Snoob-hijo: Jajaja, que era broma...¿como iba yo a fotografiar las tetas de mi..Eh, ¿exactamente Marina que me toca?