martes, 23 de septiembre de 2014

112- Emergencias 65

Lucía ya se había marchado del Púb, dejando allí a Laura y Nacho. No se podía catalogar de algo extraño, pero que ambos se quedarán ahí, sin conversar con los conocidos de siempre, sin tontear con nadie y sin ninguna apetencia de "caza" si era bien extraño, entendiendo que ambos, eran extremadamente sociales.


Nacho a brazos cruzados, como el niño que acude a un acto obligado por sus Papis y que debe aguantar el sopor de no entender que hace ahí, sin nadie "guay" con quien jugar. Mientras Laura se limitaba a aburrirse como una ostra. Ni siquiera le entretenía criticar la estética claramente hortera de algunos.
¿Que estaba pasando con ellos? Era el púb de moda, rodeados de amigos, conocidos y gente "interesante" que poder conocer, ¿porque se aburrían entonces? Ni ellos tenían respuesta para esa pregunta y así, fue Nacho el que primero que tiró de móvil, justamente como el niño al que obligan a estar sentado, quieto y callado y al que tratan de consolar dándole un móvil para que se entretenga. Laura tardó poco en imitarlo y los dos, parecieron buscar entretenerse con mensajes recibidos, consultar alguna red social o a saber. Porque en verdad, Nacho se quedó sonriendo ante la foto de perfil que Karla había puesto. Ella misma de niña y subida en hombros de su Tía, bajo el estado: Yo necesitándote y tú prefiriéndome.
El conjunto de foto y letras, le hicieron emocionarse. A través de ambas cosas, podía sentir como esa niña se agarraba a su Tía, no sólo intentando no caerse. Ahora para él, tomaba sentido que esa mujer de facciones duras se hubiese presentado en Pedraza a por Karla y le llenaba de orgullo que ésta se lo agradeciera de una manera tan pública.
Laura a diferencia de él, era mucho más práctica y directamente escribía a Karla-Peque...- Ni una palabra más. Empleó las justas como el suspiro que brota solo, en un llamamiento a Karla, que podía ser un tanto consentido y caprichoso. Tras escribirlo miró a Nacho, quien cruzó la mirada con la suya. Ésta sería la típica noche en que ambos pasarían del Púb para irse a la casa de alguno de ellos, donde reír y acabar follando. Pero no, a Laura no le apeteció lo más mínimo y por como la miraba Nacho, juraría que a él tampoco le apetecía.
Así las cosas, lo más práctico era marcharse cada uno a su casa, con ambos tratando de ser y sentirse tan naturales como siempre. Después en la soledad de sus camas, Laura recibió la contestación de Karla a su mensaje- ¿Hoy no me pides que le quite el coche a alguien para ir a verte?- en tanto Nacho también escribía pero lo hacía en su propio perfil del whatsapp- Me gustas por tantas cosas...- y una vez lo hizo, dejó el móvil para abrazarse a su almohada, y dormir con un rostro pecoso como última imagen guardada por sus ojos.
Palabras que Karla no podía leer, estando inmersa como estaba, en plena conversación vía whatsapp con Laura.
Mensaje de Laura a Karla: Por falta de ganas no ha sido. Pero ayyy, se me ocurre una cosa, ¿por que no nos escapamos los tres este fin de semana?
Mensaje de Karla a Laura: Ya decía yo...pues, ¿Nacho no trabaja?
Mensaje de Laura a Karla: ¿Escribí Nacho en algún sitio?
Mensaje de Karla a Laura: Escribiste..los tres. ¿Quien es el tercero si no es Nacho?
Mensaje de Laura a Karla: Exact, sweety. ¿Quien si no él para pasarla muy bien?
Mensaje de Karla a Laura: Ehm...
Mensaje de Laura a Karla: Para desfasar bailando toda la noche.
Mensaje de Karla a Laura: Laura...
Mensaje de Laura a Karla: Para juntos ver amanecer.
Mensaje de Karla a Laura: Lau
Mensaje de Laura a Karla: Sería perfecto. Un sueño logrado.
Mensaje de Karla a Laura: Yo diría fantasía...¿que sabe Nacho de tus planes?
Mensaje de Laura a Karla: Nada...y nada va a saber.
El último mensaje de Laura, dejó a Karla un tanto inquieta. Si lo pensaba, viniendo de Laura no era sorprendente su propuesta callada y ella misma ya había demostrado con creces que pasaba de cualquier prejuicio. Su temor no iba vinculado a Laura, más bien a su nuevo intento por mantenerse "limpia" y a Nacho.
Así concluyó una nueva noche, que para Inés amaneció siendo sepultada por Marina y su grano en el culo, o para ser precisos en el vientre de ella.
Era para gemir de puro gusto. Ríete de las tumbas de los poderosos faraones, eso era nada comparado con estar bajo el cuerpo de Marina y contra sus sábanas. La única pega que podía ponerla, es que su boca a quien estaba besando era a la almohada. Porque si, de lo increíblemente bien que estaba y se sentía, besó lo primero que pilló y no es que la almohada se quejara, pero eso no era lo que ella quería besar. Sus labios lo que querían besar, era la calidez que cubría su cuerpo. Para conseguirlo tuvo que girarse con cuidado bajo Marina y dios...ahora si que gimió, las bufas de Marina le daban los buenos días, prácticamente asfixiándola entre ellas. Vale, ahora no sólo besaba si no que además, le entraba risilla floja. Marina estaba tan dormida que podía hacerle de todo, como ocurriera horas antes. La diferencia que rompía sus ganas, era que en esta ocasión se hacía pis y la obligación personal de dejarla descansar. Por eso, tuvo que salir de la cama y..
- Oh dios...otra vez no- se quejó al verlos de nuevo como ella, arrascándose una nalga mientras se estiraba camino del baño- Jijiji- aunque molaba verlos bostezar con carillas de sueño super feliz. Bueno, eso era despertar en casa de Marina. Ser acompañada por corazones con piernas y patas hasta el baño, que la mirasen hacer pis, lavarse las manos, quitarse las braguitas, quedarse con ellas en las manos sin saber donde ponerlas, decidirse a dejarlas en un pequeño taburete bien dobladas porque nunca hay que quedar de cochina, entrar a la ducha y volver a gemir. La ducha estaba llena de botes, entre champús, geles, serum, cremas, mascarillas y otros más pequeños que necesitaban una correcta inspección- Jolines- exclamó sintiendo todas las ansias del mundo por probarlo todo a lo loco. Y no sería la primera vez, después de conseguir salir de la ducha tras lavarse el pelo con tres champús distintos, se encontró gimiendo de nuevo, frente a todos los maletines de maquillaje que Marina tenía escrupulosamente ordenados en un gran armario- Espera, espera no- se tuvo que pedir antes de comenzar a abrirlos todos. Primero debía hidratarse un poco y dios, otra vez a gemir. Marina tenía desde el body Milk clásico, pasando por cremas anti estrías, anti edad, anti moho, bueno esa no, pero era la única que faltaba ahí. No fue fácil, elegir cual ponerse y vale, terminó haciéndolo por partes y así...cuando quiso salir del baño, sacó una conclusión muy clara. El granito debía ser niño para romper con tanto baño barbie o una simple ducha podría llevarle un día entero.
Eso sí, Marina seguía durmiendo. Verla ahí tendida y tan guapa durmiendo con los rayos de sol que se colaban salpiqueando su cuerpo y cama, fue una imagen de lo más bonita, que por supuesto, la llevó a querer consentirla. Traerle el desayuno, sería la leche. Pero sin engañarse, de intentar hacerlo ella tal cual de encantada estaba, acabaría quemando las tostadas y seguro cargándose las estúpidas cafeteras de hoy en día. Fijo, que introduciría la cápsula de café que no era para esa cafetera. Mejor salir a la calle, y que otro quedase mal.
Con una soltura impropia se hizo con las llaves, cerró la puerta y salió al jardín. Jolines de nuevo, a ese pedazo de nogal le venía faltando una casita de árbol si o si. Al pequeño pájaro, ahora todavía grano, le encantaría tener una casita propia donde recibir a sus colegas pájaros y donde esconder sus pajarracos secretos y la Tía y Karla, seguro se ofrecerían a ayudar a construirla. Con esos pensamientos llegó a la reja. Hacía un día increíble o no, porque ningún chaparrón acabaría con su estado pletórico, aunque estuvo a punto de hacerlo la reja y su empeño en no cerrarse. Cabreada con ella y pasando del dicho; más vale maña que fuerza, le puso el mismo empeño en cerrarla que el puesto por la reja para que no fuese así.
¿Pero que hay de un pueblo sin una vecina cotilla paseando? Pedraza tenía la suya y pasaba justo por su acera, mientras ella sudaba tinta tirando de la reja.
- Buenos días- saludó a Inés con cierto tonito doña Concha y lista como toda cotilla que se precie, aprovechó que la visita de Marina estaba sola para indagar, deteniéndose junto a ella.
- Buenos días, Concha- respondió a su saludo Inés y se ganó al momento a la mujer. Vaya, vaya...la rubia a la que Marina había besado delante suya dando de que hablar, resultaba de lo más mona recordando su nombre.
- Ayy, ¿que te pasa con la reja criatura?- pasó a interesarse primero por lo evidente, ya vendría después las confianzas para saber que hacía la rubia saliendo de casa de Marina.
- No cierra...no se que es- le contestó Inés verificando las bisagras. Ni puta idea que pasaba que no basculaban pero a ella le iba apeteciendo tener una radial a mano, todo fuera cortar.
- La tiene desencajada desde el pasado año- le explicó Concha, deteniendo todo movimiento de Inés. No podía hablarle, sin darle toquecitos en los brazos, que seguro enfatizaban sus palabras- Como Marina es como es- golpeó el brazo de Inés y meneo la cabeza en modo regañina, mientras Inés parecía prestarle toda la atención del mundo. Pero no, a parte de la radial, iba necesitando un soplete. De toda la vida, para tratar el hierro se necesita radial y soplete. Cortar y soldar, de toda la vida de Dios- Pero bueno, escúchame...¿te vas a quedar?- ahí estaba, con que disimulo y saber estar había llegado a la pregunta clave, pero ayy que sonrisa más bonita tenía la rubia y como se le iluminaba la mirada.
- Jijiji..hoy si, es que mañana trabajo- educada Inés le explicó echándole cuentas nada más que a la reja y a su mala costumbre de no llevar una radial en el maletero del coche, junto a una llave 3/15 que es la llave que siempre se pierde.
- Eso es una suerte hoy día. Y te voy a decir una cosa, de Marina podrán decir mucho, pero a trabajadora no la gana nadie. La piscina en centro de jubilados, se consiguió gracias a ella, no te digo más- le dijo con cuatro golpecitos muy bien dados.
- Es que es un amor...da para todo- bien orgullosa la secundó Inés, pero claro la cara tonta que puso en modo me derrito por todo lo que haga Marina,  alimentó el ansia por saber de la mujer.
- Deja la reja que ahora te diré quien te la arregla yendo de mi parte ...a ver, ¿donde ibas?- daba con soluciones para todo Concha. La carita tan bonita y llana de la rubia no merecía menos. Además, la estaba dejando marimandonearla como le daba la gana, no podía perdir más.
- Jiji...pues, primero a un kiosko, después necesito un café y por último, un sitio donde preparen un buen desayuno. Es para Marina, ¿sabe?
Ya está, la vecina se la había ganado haciéndola de guía y por igual estaba la vecina con ella, con dejarla marimandonear. Con ella de su brazo, Inés pisó por su segunda vez la plaza que tanto había significado y significaba para Marina. Gracias a Concha, incluso pudo imaginarla por allí.
- Eran tres demonios, ella y los otros dos..pero claro, no les podías decir nada o Lucía...vamos que no había quien les tosiese. ¿A Lucía la conoces?
Caminando por la plaza directas al kiosko, Concha continuó entre anécdotas e indagaciones, que terminaron cuando al llegar al kiosko a Inés le faltó saltar sobre una revista de aviación.
- No me lo puedo creer- dijo lanzándose a por la revista y su primera pieza para la maqueta de un helicóptero- Madre mía...es, es...es el primer helicóptero que pilote con mi padre- le dijo a Concha como si la mujer la conociera de toda la vida. Pero normal, era una pasada que justo ese mes se iniciara la maqueta del helicóptero que llevaba años esperando poder montar y era una pasada que justo la revista lo lanzase ahora y que ella la fuera a comprar en esa plaza y que Concha no pudiera prestarle más atención porque estaba acariciando la abultadisima barriga de una mujer ¿embarazada?- Joder..joder...-  alucinando completamente por las casualidades que acababan de darse, miró al cielo volando directa a su llegada a Kosovo. Allí donde por última vez, estuvo con su padre.
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Su Tía Susana le avisó en cuanto bajaron del avión, su padre estaba volando y ambas lo tendrían que esperar en el pabellón de visitas. No le quedó de otra que aguantarse las infinitas ganas de ver a su padre y caminando por la base, no pudo evitar imaginarlo en cada parte. Jugando al fron-tenis, corriendo por las pistas e incluso subido en el hangar de los cazas. Pero fue justo el sonido de estos últimos el que le hizo mirar al cielo en el momento en que tres cazas volvían a base y se disponían a aterrizar. El movimiento de uno de ellos, le subió las pulsaciones al momento.
- Jajajaja....es Papi, Tía...es él.
Adiós a aguantarse las ganas de nada, su padre la saludaba antes de aterrizar y ella soltó su petate para correr tras el caza que dibujaba figuras no propias de un aterrizaje.
- Inés...no puedes ir a las pistas...joder, ya me va a hacer correr.
Y lo hizo, su Tía tuvo que correr para pillarla y fue por ella, por la que pudo entrar a la zona de aterrizaje. No fueron las únicas que corrieron, con el caza detenido, Roberto dejó los informes a rellenar y ni siquiera perdió tiempo en quitarse el casco. Su pájaro corría hacia él, cinco meses después.
- Jajaja, Papi- a mitad de pista, los brazos de su padre la alzaron entre las risotadas nerviosas de ambos y mirando sus ojos- Se lo dije a la Tía, es verte y estoy bien.
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En Pedraza, ese mismo abrazo lo encontraba mirando al cielo y sus cientos de aviones surcándolo. Claro que, no estaba sola.
- Niña...espabila, que vamos a llevarte a donde mejor hacen el café aquí- le dijo Concha volviendo a cogerse de su brazo y si, Inés tuvo que espabilar.

- ¿Vamos?- le preguntó sin entender muy bien con quien más. Los más eran la propia Concha, el kioskero, la embarazada y otro joven con el que tropezaron camino al café- Jijiji, me está gustando a mi Pedraza. Vaya que si.



4 comentarios:

  1. El trío la… la... la, empieza hacer un poquito de agua, veremos por donde salen.

    Me gusta esa nueva amistad de Inés con la Sra. Concha, jajaja.

    Gracias.

    A.

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  2. reinazaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!! ERES LO MÁS MWEJOR!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
    gracias por tantiiisimo!!!!!!!!! esque me encanta, no me pueden gustar mas. no las puedo sentir más parte de como si fueran familia tejurooooooooooooo!!!!!! de ahi el ansia por querer saber más y MÁSSSSS
    gracias mil ARTISSTAZAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA

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  3. ........ SI EL MUNDO....ESTE EN QUE NUESTRAS VIDAS VIAJAN...FUESE COMO ESA TERNURA DE MUJER QUE ES INES...RODEADA DE ESOS CORAZONCITOS...JIJIJIJI...ES DE UN TIERNO QUE ABRUMA ESTO DE LOS CORAZONCILLOS...¡¡¡ ME ENCANTA¡¡¡¡ TODA LA HISTORIA¡¡¡¡ Y ESTO ES DE BROCHE DE ORO..JIJIJIJI....Y SI...SI EL MUNDO FUESE ASÍ...DONDE LA REALIDAD...LA QUE ASUSTA...LA QUE MOLESTA....LA QUE A VECES NOS ATRAPA NO TIENE CABIDA...TODO..TODO...SERÍA MUY DISTINTO...¡¡¡TANTO¡¡¡....RODEADA DE ESA MAGIA QUE PONE EN CADA HACER CON MARINA...EN ESA NATURALIDAD..EN ESA TERNURA QUE SE ENTRELAZA CON LOCURA¡¡¡ AYYY SI EL MUNDO FUESE ASÍ....NO SE QUERRIA NUNCA SALIR DE ESA HABITACIÓN DONDE DUERME LA MUJER QUE LE QUITA EL SENTIO....AUNQUE LE QUITO TAMBIÉN LA CALMA EN OCASIONES...
    LO REPITO ESCRITORA....ÚNICA....PARA HACERNOS SOÑAR CON ESE MUNDO QUE INES NOS DIBUJA EN MOMENTOS ASÍ....¡¡ÚNICA¡¡¡

    GRACIAS.....ESCRITORA....

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  4. ....JIJIJI ..DE NUEVO LO OLVIDE...LA DE ARRIBA SOY YO..
    CELESTE-NEGRO

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