viernes, 14 de febrero de 2014

Mi cincuenta cláusulas 83


El mismo Hugo le había recordado la entrevista con Marga y Julia en un principio nada dijo. Pero minutos más tarde en la soledad de su despacho el encuentro de esos dos, le resultaba divertido. Más si Minerva por mensajes le preguntaba a cada tanto.

Mensaje de Minerva: ¿Llegó Marga? Esta super nerviosa, toda una Anastasia Steel.

Mensaje de Julia: ¿Quien es la señora Steel?

Mensaje Minerva: Jajaja...es la chica ingenua de Grey, a la que el señor Grey castiga como amo. Pero vamos....otras señoras Grey no necesitan de látigo para dejar marcas, me encontré dos moratones más.

Otra vez la risita tonta se le escapaba a la magnate. Su mañana podía resumirse en risitas tontas, sonrisas bobas y suspiros adolescentes. Carraspeando se llamó al orden, tenia una financiera que movía cifras astronómicas a cada segundo por todo el mundo y ella dedicaba su mañana a suspirar por su señorita De Urrutias. Creía retomar el control, cuando un nuevo mensaje de Minerva, le hacía volver a reír.

Mensaje de Minerva: Señora Arango que la conozco, no vaya a espiar el encuentro de esos dos.

- Sólo veré la llegada- murmuró traviesa activando las cámaras del Hall y respondió al mensaje de Minerva. Marga llegaba justo en ese instante.

Mensaje de Julia: Llega verdaderamente bonita la señorita Merchán. Lástima que sólo tengo ojos para usted señorita Minerva.

Mensaje de Minerva: Le quedo arrogante señora Arango y ya que estas espiando, cuéntamelo.

Mensaje de Julia: Es incorrecto y poco galante. Mejor salgo a saludar a una de sus damas de honor. Ha sido un placer escribirme con usted. Atentamente, la señora arrogante.

Mensaje de Minerva: Jajaja, no provocaras mis celos. Se despide cordial, su ferviente sumisa.

- ¡Es la leche!- exclamó Julia en voz alta en clara imitación a Minerva. Apenas unas palabras intercaladas con su usual coqueteo y podía sentir como su sexo le latía excitado y como su buen humor no era un espejismo sino un estado constante. Dispuesta a cumplir con lo escrito en el mensaje, se incorporo de su butaca revisando su traje y con una nueva ocurrencia escribió, el por ahora, último mensaje.

Mensaje de Julia: ¿Látigo?

El escueto Pi Pi, anunciando una nueva respuesta hizo que su móvil vibrara en su pantalón, pero para entonces estaba en el pequeño Hall donde se encontraba el despacho de Hugo. Sonriendo se aproximó a Marga, quien era atendida por una de las secretarías clones made in Arango.

- Ya me ocupo yo, Izascu- despidió amable a la secretaria y sonrió aún más cuando Marga la miró entre expectante y claramente nerviosa- Buenos días, señorita Merchán- saludo extremadamente educada ofreciéndole la mano y Marga se colgó a su cuello, agradeciendo un rostro familiar.

- Dios mío, Julia- exclamó Marga al tiempo que se colgaba de ella- Que no te puedo mentir, que yo no tengo por costumbre mentir, que fue una bravuconada, que- detuvo su incontinencia verbal severa para aspirar mejor el aroma de Julia. La magnate olía como las mismísimas diosas del Olimpo y sus brazos abrazaban tal cual lo había explicado millones de veces Minerva.

- Eh- dudo Julia, Marga no la soltaba y Hugo los miraba desde la puerta del despacho con el ceño fruncido- se que no eres periodista- le susurró tratando de calmarla pero Marga continuaba sin soltarse de su cuello.

- Uhm...por dios que bien hueles- murmuró Marga en su propio universo.

- Hugo nos mira- le avisó Julia aguantando la carcajada. El nombrado continuaba frunciendo el ceño, claramente molesto y la situación le divirtió. Ahora si, Marga se soltó dando un pequeño grito- Estas muy bella, fuera nervios...es sólo una entrevista- la animo usando su voz más aterciopelada y Marga estuvo a punto del gemido, cuando se vio reflejada en sus grises ojos al tiempo que le besaba las manos.

"Dios mío.."- pensaba Marga naufragando en la intensa atracción Arango- "Como entiendo a Minerva, madre mía"

- ¿Marga?- llamó su atención Julia soltando delicadamente sus manos. Marga se veía realmente encantadora nerviosa y sonrojada.

- Si...si si..- contestó rápido soltando excesivo aire por su boca- "Que momentazo, Joder"

- Hugo te espera-la invito a seguirla Julia mirándola de reojo- señorita periodista- bromeó encantada con la situación.

- Julia Joder- protestó Marga sonriendo cuanto podía, el guapísimo Hugo apoyado en la puerta, comenzaba a acaparar toda su atención- "Esta buenísimo madre mía, no me lo puedo creer...me mira...me está mirando y Julia también...Joder"- Julia- la detuvo no queriendo quedar como una asalta guapísimos millonarios. De repente sentía la necesidad imperiosa de explicarse- Lo hago por una amiga- prosiguió hablando a excesiva velocidad- quiere ser periodista y le comenté y surgió y aquí estoy, haciéndole un favor- terminó mordiéndose el carrillo.

- Una amiga- murmuró Julia descuadrada. Sabía por Minerva que un momento de exaltación Marga había solicitado la entrevista, no que existiera una amiga periodista- ¿Que amiga?

- U..u...u..- titubeo Marga viendo difícil salir del enredo en el que ella misma de había metido. Hugo acercándose a ellas, la puso aun más nerviosa- Una del grupo.

- Ah- exclamó la magnate guardando las manos en sus bolsillos. Si era amiga del grupo lo era de Minerva- ¿Para que revista trabaja? ¿Vanity?- preguntó con verdadero interés, mientras Hugo las saludaba.

- Buenos días, fue puntual señorita Merchán- educado al más puro estilo Arango el joven tomo la mano de una paralizada Marga. Besandole la mano el adorable Hugo Davo y mirándola con una ceja alzada la poderosa Julia Arango- Hilando con Julia es cierto. Al final no me comentó para que revista será.

Marga imploro que el suelo se abriese bajo sus pies en ese preciso instante. Ambos la miraban esperando una respuesta que ella no tenía y no le quedo más, que improvisar con su habitual desparpajo.

- Para la que decida contar con mis entrevistas- dijo esperando una carcajada de ambos. Estaba bromeando claramente pero en idéntico gesto, los dos elevaron la misma ceja sin dejar de mirarla intensamente. "Como bese igual que mira, me declaro su fiel sumisa"

- Eh- fue Julia la primera en reaccionar- Bien...ven a mi despacho cuando acabéis, hablaremos de en que revista quieres publicar- se ofreció generosa con el pensamiento puesto en Minerva. Si su amiga quería ser periodista, lo sería.

- A ver- pidió calma Marga alzando los brazos. Su particular versión de Anastasia Steel estaba desvariando demasiado.

- Para mi sería un placer ayudarla, no es necesario te molestes Julia- se ofreció por igual Hugo intentando que Julia viese sus gestos pidiendo intimidad con Marga.

"Diosas del olimpo, este par me coloca a trabajar mañana mismo"- pensó Marga sonriendo feliz a un Hugo que la miraba pausado. Sin pretenderlo, los tres formaron un silencioso triángulo. La magnate mirándolos boba, podía sentir el hilo de tensión que unía a ambos. Hugo trataba de mostrarse serio y relajado, y Marga lo hacía coquetamente sonriente.

- ¿Julia?- la llamó Hugo tras unos instantes.

- Si- respondió sin dejar de sonreír a ambos.

- Te ha sonado el móvil, seguro es Minerva- la informó aprovechando el bendito sonido del móvil, deseando poder atender en soledad a Marga.

- Perdón- se disculpó Julia sacando su móvil. Efectivamente era Minerva en un mensaje que la dejo muda mirando el móvil.

Mensaje de Minerva: Látigo, mordaza, cera derretida, corpiño...mi princesa interior y lo mucho que le gusta y excita, mimarte.

Hipnotizada por el mensaje Julia no pudo ver como Marga y Hugo se miraban esperando que dijese algo.

- Si...- de repente la garganta se le había secado a ritmo de Minervas que pronunciaba sin voz. En esas, tuvo que carraspear para proseguir- Si me disculpáis- señaló a la nada nublada por el huracán de pasión en el que Minerva la sumergía con sólo unas palabras escritas y Hugo pudo prestarle toda su atención a Marga.

- Señorita Merchan- dijo galante cediéndole el paso. Quería resultar educado, galante y poseer esa melancolía que a toda mujer atrae, pero Marga no se lo puso fácil.

- Señorito Davo- contestó haciéndolo estallar en carcajadas- Grey no se reía, Joder.

- Jajaja, ¿quien es Grey?
 
 
 
 

2 comentarios:

  1. masssssssssssssssssssssssssssssssssssss

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  2. ......cuando ese huracán de PASIÓN llega arrasando...muy poco se puede hacer...solo...¡¡entregarse a esa pasión¡¡¡ siiiii
    GRACIAS......

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