Marcada/Los GarWi y su 1ª Comunión 5

Media hora en urgencias, un hambre de morirse que la pobre jueza ni tiempo ha tenido de probar sus lentejas, un calmante dado a la niña, que la cosa en la sanidad pública está muy recortada y el traumatólogo de guardia tiene que atender a tres coma cuatro pacientes cada diez minutos. Como hace para que le cuadren los decimales no lo sabemos ni es importante para la trama, vamos ya por favor.

La trama, el argumento y hasta el gusanillo de la cuestión, es que Paula llora desconsolada sin que su madre, la jueza, pueda hacer nada.

- Mi vida pero ya está…¿no te duele menos con el calmante?- le preguntaba la jueza, que sólo llevaba un paquete clínex e iba necesitando de más.

- Zi...pero snif...- contestaba entre sollozos la cría, y el ceceo no es porque el donante anónimo usado en la famosa procreación por botón fuese de Adra, sino que como García que es, se arranca en algo y tarda en desatrancar- Yo quería ser una princesa en mi Comunión...snif

- Amor...si tú eres una princesa siempre- le decía limpiándole la carita tan bonita plagaita lágrimas.

- Que saldré con el dedo roto en las fotos- se quejaba amargamente. Que si, Paula es la hija kuki que toda mujer quiere. Esa a la que ponerle vestiditos, ilusionarse con ella viendo la Cenicienta, ir de compras y que jamás se queje...pero la niña suele olvidar su vocación de trapecista suicida y esto, lo complica todo.

- ¿Recuerdas cuando hicimos la fiesta celebrando el aniversario de la Pilarica?- le preguntó recordando la gran fiesta y como la escayola acabo mojada y pa,tirar.

- Ziii

- Saliste guapísima en las fotos, a pesar de llevar la pierna izquierda escayolada.

- Fue la derecha. La izquierda fue cuando veraneamos en Torremolinos por el cumple del Tito Jero.

- Verdad....¿y el codo derecho cuando fue?

- Ese fue en el columpio que el abuelo ha quitado, el otoño pasado en el cumple de la abuela Rosario.

- Ay mi vida, ¿ves como no será la primera foto en que salgas con escayola?- le seguía el rollito a su hija en busca de consuelo, mientras pensaba: lo raro es que no salieses de mi barriga escayolada ya en preaviso. Dios mío, de mi vida.

- Jijiji- reía a lo conejilla García que su Mamá la estaba convenciendo además de comérsela a besillos.

- Mi chica más dulce- se la comía a besos babosos made in Mamalandia.

- Jiji ziiii, soy yo...ay Mamá, que ratillo más malo he pasado- se colgaba del cuello de su Mamá suspirando. Que es muy chiquitilla y tiene mala suerte. Que si.

- ¿Puedo ya comerme el sándwich?- preguntaba su madre. Pero vamos, con la jarta besos que le estaba dando a su hija,  no sabemos como aún tenía hambre.

Y si, Paula consintió que su Mamá cogiera el sándwich de máquina, más malo que nada, le quitase su plástico, cogiese el único clínex que quedaba, abriese su zumito y diera un mini bocadito al sándwich, que la jueza siempre ha sido muy pijina y esta más que acostumbrada a comerse un sándwich en una sala de espera de Urgencias. Casi su hogar. Pero entonces, a la niña le subieron los colores a la cara y se agarró al brazo de su madre, la jueza “que poquillo la dejan comer así cualquiera mantiene la línea”, para esconderse de un guiño y una sonrisa que le regalaban metros más allá.

- Dios de mi vida- murmuraba la Jueza dándose por satisfecha con su mini bocadito de sándwich- ¿Qué te pasa ahora Paula?

- Ay...allí- señalaba con el dedo y la jueza se lo hacía bajar rápido. La niña señalaba a una joven doctora.

- Pero cariño es sólo una doctora y habrá vestido la carita tan bonita que tiene mi niña. No hay más.

- Nooo...es una Doc bollo- insistía la niña, escondiéndose aún más. Que a ella las Doc bollo que le sonríen y guiñan la intimidan y ponen nerviosilla pérdida.

- Dios mío de mi vida- negaba con la cabeza la jueza  y aprovechaba para echarle una ojeada rápida a la doc. Nada, ella no veía nada por lo que pensar que la joven podía ser bollo- ¿Si? ¿Tú crees?

- Ta clarísimo, es bollo...siempre acierto.

- Jajaja- reía divertida la Jueza tapándose la boca, porque si, cuando su hija dice que alguna mujer era bollo, lo es en el 99 por ciento de los casos- Es que…¿como se lo notas?- se interesaba cogiendo a su hija en brazos.

- No se- contestaba dejándose abrazar- simplemente lo noto.

- ¿Por que yo no?- preguntaba realmente interesada pero alzaba las cejas al percatarse que la doctora venía donde ellas acompañada de otro colega.

- Porque tú eres bollo por amor, no llevas el bolloradar instalado, Mami si.

- Sush...- la mandaba callar que los Doc ya estaban muy cerca.

- Jiji Mami…- ronroneaba encantada  entre el abrazo de su Mama y el calmante que le había sido administrado. Tan a gusto estaba que…-¿Me das un orgasmo?- pedía sin saber lo que pedía y de repente caía al suelo.

- Paula por dios- la regañaba después de tirarla por la impresión de la pregunta. Y entre el sándwich, la niña, el dedo de la niña y los Doc que habían escuchado a su hija, la pobre jueza no sabia donde esconderse.

- Jajaja, estos niños- intercedía la Doc bollo ayudando a levantar a Paula- Oyen aquí y allí, y hacen sus propias conjeturas- explicaba amabilísima que ella es bollo y tiene el bolloradar instalado de serie, como debe ser.

- Si da gustito es orgasmo, lo dijo Mami- explicaba la niña, todita convencida sin importarle el rostro más que enrojecido de su madre.

- La madre que la- se mordía los labios la jueza interrumpiéndose,  que esta mal cagarte en tu suegra, aunque desestrese mogollón.

- Jajaja- reía la doc de buen humor- Huy, ¿y ese dedito?- preguntaba inconsciente de lo que una niña de nueve años plenamente consciente de su identidad sexual siente, cuando una Doc tan guapa le sonríe de esa manera.

- Ayyy- el efecto fue inmediato, Paula busco guarecerse en las altas piernas de su madre, sollozando avergonzaita.

- Vamos a la consulta cinco, soy la traumatóloga de Guardia. ¿Me dejaras verte el dedito?- insistía la Doc, que también hay que ver, que poquita sensibilidad.

- Ayyy…..Mama dile que entregue mi corazoncito….díselo- advertía la niña, encabezandonándose y la jueza comenzaba a imaginarse soltera y sin tres canijos. Que paz y que armonía perdida por un amor, ains.

- Jajaja….¿ya? ¿Y a quien fue?

- A María….es el amor de mi vida. ¿Tu tienes?

Y si a Paula la dejas hablar del amor de su vida, te la ganas aunque seas bollo.