La
noche no estaba para jugarse el ir ganando. Mirando la bata de felpa
sacada del altillo donde había sido guardada para los restos, la
sargento apretaba culillo, congratulándose por su táctica de juego.
Y yo la entiendo, su señora esposa atacaba con bata de seda corta
que dejaba ver una lencería de escándalo debajo de ella. No le
quedaba de otra que contrarrestar a lo grande. Y no hay mas grande y
anti-morbo, que una bata de felpa.
Si,
esa que el día de reyes tu suegra le regala a su hija mirándote a
ti, porque lo sabe. Sabe que con esa bata, tú no tocas a su hija,
así hayas visto la seis temporadas de The L Word completas y del
tirón. Es imposible tocar a una mujer con bata de felpa, porque
siempre te recordara a tu madre y lo mismo en vez de pedirle hacer el
amor, le pides unas “gachas”. Vamos ya con los regalos a traición
que se tienen que guardar en altillos y vamos ya, con el litro de
barón dandy que le regalare yo el año que viene.
Con
ella en sus manos, la bata que todo hay que decirlo, regreso a la
cocina, no sin antes rozar su carita con la bata, porque si, algo
diré a favor de esas batas, es que son suaves, como las Mamás,
obvio. Disfrutando de la confortable caricia, entro a la cocina y sus
tres canijos mas la madre de los tres la miraron a cejas alzadas,
copyright de esa casa.
-
Jem, jem, jem- se rió para si misma, porque si, su plan era la leche
y yo la apoyo- Que esta refrescando, a ver si te nos vas a resfriar-
le explico a su señora mujer, la misma que la miraba entrecerrando
los ojos ante sus inmediatas intenciones.
-
No hace falta, amor. Estoy genial- dijo acariciándose el escote en
una demostración de frío no tengo ninguno, y frío el gestito a la
sargento no le dio.
-
Jum….pero es igual- se empeño ante la mirada de sus tres canijos,
que miraban a una y otra, como si fuese un partido de tenis.
-
Ya tiene bata, Mami…y bien bonita- hablo Paula y sus ojillos
mostraban un corazoncito bombeando- yo tendré muchas así de
bonitas.
-
Jejeje- babeo la sargento por su canijilla, hasta que su desgastado
cerebro sumo canija, mas bata sensual, mas sexo, orgasmos,
eyaculación precoz y el resultado de la suma le hizo negar con la
cabeza y detener toda risa y/o sonrisa- Ni hablar, tu de estas batas
no vas a tener- le prohibió a la niña y la manilla se le fue al
escote de la jueza, quien sonreía de lado, poco mas aguantaría la
sargento- Tu de felpa, como esta, bien bonita que es- mostró la bata
y hasta la olla cuece corazones negó con la cabeza- Que si, que es
guay.
-
Mami, ya no se dice guay- le dijo Pedro encogiéndose de hombros, los
intentos de su madre la sargento por mantenerse en la “movida”
dejaban mucho que desear.
-
¿Mola mazo tronco?- ya esta, se encabezonaba la sargento en saber y
Pedro negaba con la cabeza- ¿Mola mazo tela heavy metal gear total
extrem tres?- un poquillo mas y se ahoga, pero quienes se rieron eran
sus tres canijos mientras ella sonreía a lo conejilla feliz y con
esa sonrisa, la magistrado no se podía contener, porque esa
sonrisilla pasaba de los ojos con la que la miraban al cerebro, del
cerebro al corazón y del corazón se precipitaba hasta su
nervio-gustillo en la entrepierna, ejem. Evitando comérsela ahí
mismo delante de sus canijos, tiro de sus jeans haciéndola sentar y
cuando la sargento dio con su culete en la silla, la miro, viendo
fuego en sus ojos- Jem, jem, jem- rió acercando sus carillas- Que
no, que has sido malilla conmigo.
-
Que si, que no lo he sido, amor venga- ronroneo la jueza, que sabe
mucho de derretir poniendo morritos y la sargentillo apretó muslos
del calambrazo de deseo que sintió con esos morritos a milímetros
de los suyos. La una mirando a la otra y sus tres canijos, mirándolas
babosos. Que rico es, que las “Mamis” se quieran, ains.
En
modo love total, la más romántica de la casa, que no es otra que
Paula, murmuro a sus hermanos, no tan bajo como ella quería:
-
Ahora si que si, se dan el orgasmo.
Y
el Paulaaaaaa, de la jueza al escucharla se continua oyendo por
varias provincias del sur de España. Un Paulaaaa, al que
inmediatamente le siguió un taconeo bajo la mesa y un:
-
Esther
Porque
si, pasa en los matrimonios, más de lo que quisiéramos. Desmontas
una vez la lavadora, creyendo en ti misma y en tus chapuzas para
arreglarla, luego demuestras que tienes demasiada fe en ti y no
llegas, no ya a arreglarla, sino que ni siquiera eres capaz de
devolverla a su estado original, y oye...se rompe la nevera y has
sido tu. Que tu con la nevera, solo tienes un buenos días y un
buenas noches, pero en su lógica tu tienes toita la culpa de que se
haya averiado. ¿Solución? Desmontala y deja separaita por piezas,
vamos ya con las famas que hay que arrastrar.
-
¿Jum?- pregunto la sargento perdiita en el escote de la bendita bata
y ahí cabo su tumba sin ella saberlo.
-
¿Jum?....No solo ha sido Paula, Patricia antes también, ¿que has
hecho con los orgasmo?- tan afanada estaba en culparla que no se
midió y dijo una incongruencia muy gorda. Pasa que en esos momentos,
el partido estaba empatado y la sargento solo era capaz de atender a
su deseo. Y aquí es preciso realizar un inciso. ¿No quería eso la
magistrado Juez? ¿Acoso no quería temita? ¿Que les pasa a las
mujeres para que tan rápido cambien de opinión? Me están dando
ganas de dejar el trocillo aquí e ir a por un helado.
-
¿No era que querías escribir y después tomaríamos una cañita?
-
Es que....Cari sal de la historia, no ves.
-
Ah...perdón.
-
Pendon tu jijiji
-
Cariiiii
-
Valeeee, vamonos a echar la caña.
-
Que escribas y calles.
Para
muestra un botón, así somos de cambiantes, como la misma jueza.
Pero lo importante, no es que las mujeres cambiemos de opinión como
la marea en noches de luna llena, lo importante del asunto, es que
estando empatadas, las dos fueron conscientes de que tienen tres
hijos de nueve años, que hablan del orgasmo con demasiada
naturalidad. Recogiendo tras la cena, ambas cuchicheaban sobre lo
sucedido.
-
Y yo les explique- decía la sargento sentía y aun dolida y aun sin
saber que sabía y mejor que hable ella- pues lo que yo se, que se ve
aun creyendo que se, resulta que nada se o se, pero se ve que sin
saber que se- hacia un alto dudando y yo naita digo porque me he
perdido en mitad la frase- y al final como dijo aquel, ser o no ser,
he ahí la cuestión, do you remember?
-
Jajaja- se partía la caja la señora jueza que se ve, que ella si ha
pillado mas de media frase y se abalanzaba a por ella cogiéndole la
carilla- te como, pero que te como ya.
-
Jum- se dejaba babear a besos con el ceño fruncido- mas sin saber
que sabía- se quedaba atrancada en el saber o no saber, mas el ser o
no ser- supe cuándo te quería…toma ya, menuda mariconilla te he
dicho jem jem jem- y se partía, que sabemos ella necesita poco para
reírse de todo y de nada, pero sobre todo, de ella misma y eso, solo
lo hacen las grandes.
-
Jajaja, uhm…que rico sabes hoy.
-
Jejeje, ya estamos…. ¿entonces se o no se?
-
Luego te lo digo, ahora pongámonos en marcha, tú recoges la cocina,
yo los baño uno a uno y zanjamos el tema orgasmo.
Resultado
del partido al descanso: Sargento 1-Jueza 2
A mí ya me faltan palabras para expresarme aun siendo tan rico en ellas nuestro idioma.
ResponderEliminarPor lo tanto solo puedo decirte, GRACIAS. Eres como una droga pero buena que se necesita la dosis justa para poder empezar el día con una sonrisa.
...... ''' PROVOCADORA DE SONRISAS''''
ResponderEliminarGRACIAS.......