jueves, 1 de agosto de 2013

Mi cincuenta clásulas 23


La corta e intensa llamada de Julia, unido a sus dos regalos, mantenían a Minerva subida a una nube de la que no quería bajar.
Fue llamada al despacho de la redactora jefe y sintió cierto pellizco de nervios al recordar la conversación con Julia. ¿Era Julia capaz de cambiar su orden de trabajo?
Por lo menos esta vez, no fue así. La redactora jefe, sólo ultimo los detalles para el reportaje en Menorca. El Martes, Minerva no estaría en Madrid.
Sería mentir, no decir que Minerva se decepcionó un poquito. Vale que le gustaba contradecir en cierta forma a Julia, pero hacerlo significando que estaría en Menorca, propiciaba no poder encontrarse con ella.
¿Como sería su próximo encuentro? ¿Hasta que punto era ella interesante para esa mujer? ¿Como aguantar las ganas de verla hasta después de Menorca? Ciento y una pregunta por el estilo, se hizo Minerva mientras el día transcurría.
Acostumbrada a ser precisa y anticipada en su trabajo, no debería volver a la revista hasta la tarde antes de su vuelo a la isla. Ociosa como quedaba hasta entonces, lo mejor era aprovechar el tiempo organizando una cena para esa misma noche con sus amigos. ¿Lugar? Su ático, el calor comenzaba apretar y la piscina era una inmejorable opción.
Quedo con el grupo más cercano de amigos, llamó a María para organizar la cena de esa noche, llamó a su madre con la que almorzó ese medio día y por fin, más allá de la hora del té, llegó a su ático.
A esas horas, María ya estaba enfrascada en la preparación de la cena y algún chiste hizo, sobre la fruta encontrada en la cocina, haciendo que Minerva se ruborizara.
"Es muy Minerva"
La facilidad con que cada palabra de Julia despertaba su deseo era brutal. Incluso, describiéndola como un fruto caribeño. Le había encantado recibir una llamada de ella, aunque añoraba el excitante jueguecito de los correctos correos que escondían algo más.
¿Donde estaría Julia en esos instantes? El googleo realizado por Fátima, más lo poco y disimulado sacado a su madre en el almuerzo sobre Julia, descubrió que ésta se dedicaba a comprar y vender empresas.
" Es mi Richard Gere"
¿En que país o lugar del mundo estaría ahora mismo? ¿Que estaría comprando? Minerva recordó su visita al despacho, las cabecitas que visualizo en cubículos, estarían haciendo justamente eso para ella; comprar y vender.
"Ay Julia"
Era sumamente excitante, dibujarla en su cabeza, como la poderosa mujer que conseguía  todo aquello que era de su capricho. ¿Incluso ella? En este punto, se enlazaba una punzada de deseo con palpitaciones temerosas. Compra lo que quiere, pero después lo venden despidiéndose.
El agua de su coqueta bañera estaba perfecta para sumergirse en ella, prender su iPod y dejarse llevar por la música. Un breve recuento y Minerva se sonrió. Esa mujer se había colado en su pensamiento acaparándolo por completo.
Acomodada en la bañera, repaso su móvil. Todo tipo de notificaciones figuraban en él. Pero no le apetecía bromear con sus amigos, ni repasar lugares increíbles que poder fotografiar, tampoco aquello que en las redes sociales fuese noticia del momento y raro en ella, ni siquiera lo que su admirada Annie Leibovitz hubiese dicho hoy al mundo.
Aburrida dejó el móvil en la repisa de la bañera y se hundió en el agua abriendo los ojos bajo ella.
¿Que tal sería decirle a Julia que no podrían verse?
" Julia, Julia, Julia"
Aun renegando, lo hizo. Seco sus manos y como no, mojándose los labios, tecleo rápido en su móvil.
De Min
Para Julia
Asunto: Sin confirmar
Hoy deje todo preparado para Menorca. Imposible hallarme en Madrid en las fechas comentadas.
Un saludo.
Pd. Si las probé. Pero, sin dudar prefiero frutos más femeninos.
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Estaba hecho, bastaba pulsar la tecla enviar y lo hizo, sumergiéndose de nuevo en el agua. Era tan excitante y loco, jugar con ella.
Tan loco, como volver a salir del agua, bajar la música y esperar impaciente que el móvil emitiera la señal de notificación de correo. ¿Que tono le pegaría más a Julia? Retomó el móvil y consulto su biblioteca musical. Quería distinguirla del resto de contactos de alguna forma y la música era lo mejor para ello.
Pronto, dejó la búsqueda, su eficaz móvil le avisaba de correo y ella no podía más que morderse, los labios.
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De Julia
Para Min
Asunto: Sin confirmar
Querida Minerva, mi agenda es lo suficientemente apretada y precisa, que necesito de usted más anticipación. Ruego, que la tenga en cuenta para futuras reuniones.
Pd. Papaya. Sufro una severa adicción a ella.
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" Por favor, piedad"
Fue el primer pensamiento de Minerva tras leer el correo recibido. Cerrando los ojos podía ver a Julia pronunciando esas palabras. Y si veía a Julia, si le parecía oírla, si sus grises ojos se clavaban en ella, el deseo más visceral se apoderaba de Minerva.
El agua estaba perfecta, ahora sonaba Pink, no había prisa y María no irrumpiría en el baño. Las manos de Minerva pedían libertad, pero aguantó lo suficiente para excitada como estaba, responder el correo.
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De Min
Para Julia
Asunto: No soy yo, es mi trabajo
Lo haré, queridísima Julia. Tendré en cuenta su petición.
Pd. La papaya sumergida en agua, flota dejándose llevar.
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Increíble para Minerva el atrevimiento que ella misma mostraba con esa mujer. Atrevimiento que como no, la excitaba aún más, imaginando los ojos de Julia leyendo esa posdata. ¿Se sorprendería? ¿Le encantaría o le disgustaría? ¿Le resultaría tan excitante como a ella?
Demasiadas preguntas y un correo de vuelta, que puede responder a alguna de ellas.
"Dios Julia"
El agua ya no es perfecta, como el propio cuerpo de Minerva la temperatura sube y su mano izquierda se cuela baja el agua, buscando su propia piel.
"Uhm ...Julia"
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De Julia
Para Minerva
Asunto: .....
A b r e t e
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La mano de Minerva ante lo leído, se abre y sus uñas se clavan en el muslo que acarician. Toca obedecer y Minerva se abre como una rosa en flor. Una pierna a cada lado de la bañera.
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De Min
Para Julia
Asunto: xxx
Si...para...ti
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Es el último correo intercambiado entre ellas, el móvil de Minerva vibra, anunciando una llamada. Y sea como fuere, Minerva siente que la dueña de esa llamada sólo puede ser ella.
- Julia
- Mi sabroso fruto caribeño.



4 comentarios:

  1. ..... Queman¡¡...eso correitos queman...como lo hacen ellas...como seguro esta esa bañera...como..como...¡¡Imposible subir más el fuego que desprenden estas dos..palabras justas en el momento justo para hacerlas ''llegar a lo más lato''Están utilizando y con gran maestría esas ''armas de mujer contra mujer''...Gana ahora esa Julia con ese ''abrete''...'' puerta de la Locura más absoluta''...no se queda atrás Minerva con su contestación...noo...no se queda..

    Leerte Escritora es todo..todo un placer...

    Celeste_negro

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  2. Sensualisimo juego el de las dos..una lucha de Titanes en la que la que ahora Minerva es la dominada pero quiza en un futuro sea la dominadora..

    La vida..si la vida da tantas vueltas...
    Electrizante Gemo y a pesar del tema muy elegante niña..como tu...Me encanta....
    Divina-Wilson

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  3. A este paso hierve el agua....
    Besos y gracias

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  4. ay ay ayyyyyyyyyyyy pero como deja ésto asíiiiiiiii


    ARTISTAZAAAAAAAAAAA gracias

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