martes, 18 de junio de 2013

Mi cincuenta cláusulas 13


Cada molécula que forma el cuerpo de Minerva, quería gritarle; si. Nos mojaremos y tu harás lo dicho. Quiero sentir esa lamida, quiero que esos perfectos dientes blancos muerdan mis labios y quiero esa lengua enredándose con la mía.

Pero Julia, le ha retirado la hermosa visión de sus ojos y la tentadora caricia en sus labios, para dejar apoyada la mano en su abdomen, mientras habla, o mas bien ordena, mediante una llamada telefónica.

Minerva no escucha, ni si quiera puede centrarse en nada, que no sea, la mano de Julia, en apariencia inofensiva, apoyada en su abdomen y en controlar su acelerada respiración. La distancia entre ambas es escasa y el calor que emana la mano, traspasa su camiseta de tirantes, haciendo imposible controlar el sube y baja de su pecho.

“¿Como se respiraba?” se pregunta Minerva, abriendo los ojos, cuando la mano de Julia, busca entretenimiento en su cuerpo, y comienza a subir sigilosa por su abdomen.

Con la respiración a mil, su pecho en un candente y nervioso movimiento oscilante, los ojos abiertos y la boca siguiendo la estela de estos entornándose- “Que ganitas de mojarmelos”- hila pensamientos tan rápido como su respiración se acelera mas y mas, conforme la mano llega a su escote, y el dedo indice, que amenazante y excitante, se paseo por sus labios, lo hace ahora delineando el final de su camiseta.

- Minerva, ¿disponen estas instalaciones de helipuerto?

La pregunta de Julia, por poco no le cuestan un respingo adolescente a Minerva. Su Minerva, pronunciado bajito, la sobresalta y la pregunta que sabe le ha hecho, se pierde en su cabeza, cuando Minerva le devuelve la mirada y “ojos verdes”, la espera sonriendo.

- Como sea, Mila. Si no es aquí, habrá alguno alrededor, necesito estar en Londres en un par de horas. No quiero el tiempo de espera de anoche en Cuatro Vientos, mira que puedes hacer con ello.

La ultima de parrafada de Julia es escuchada por Minerva y sus intentos de aparentar normalidad. Difícil cuando el dedo indice de la “exigente f18”, se detiene en el inicio de su canalillo y difícil, cuando sus fosas nasales, se empeñan en disfrutar del atrayente aroma, que Julia emite.

- Por favor- con un “por favor” tardío, concluye la llamada Julia y suelta una pequeña carcajada, al presenciar como Minerva rueda los ojos- ¿Y?

- Un poco tarde, sonó ese por favor.

- Uhm, puede y puede también, que fuese usted la culpable de mi tardanza.

- Jajaja, yo estaba aquí muy quieta.

- Ujum, me gusta como suena eso, Minerva

Volvía abrir escotillas el f18 y un nuevo intercambio de frases entre ellas, provocaban que Minerva, suspirase un- dios mio, esta mujer no conoce lo que es piedad- mientras al dedo de Julia se le une el gordo y un breve movimiento le sube apenas un centímetro la camiseta. Cubriendo, un centímetro mas, su escote.

Sin dejarla reaccionar, a ese censurador gesto, Julia la mira ahora fijamente a los ojos, observando en ellos o puede que queriendo ver mas allá, segundos en los que ninguna dice nada, hasta que es Julia, quien rompe el contacto visual y el silencio.

- Debo irme

- Queda mucho por hacer

- Una mas

- Dos

- Use las de las Bahamas

- Quería otras

- Dos mas y yo, tendré mi primera

- ¿Que? ¿Cual?

Intercambio de peticiones, regateo de ambas y Minerva que se pierde. Los susurros de esa mujer, no pierden exigencia y si ganan mandato. Pero pronto se halla, Julia por primera vez rompe el contacto corporal y elige hábilmente la cámara Polaroid, que hay con otras mas en la mesa.

- ¿Ha sido alguna vez modelo?- pregunta Julia, observando la cámara que sujeta y a Minerva, parece pararsele el mundo, en ese mismo instante.

Julia observa la cámara, con una mínima sonrisa y su rostro, emite un estado relajado y pausado, como si el f18 estuviese, justo en ese momento en que mira la cámara, estuviese volando con el único propósito de disfrutar de las vistas.

- Profesionalmente, nunca he posado- contesta Minerva, contagiándose de la bonita sonrisa vista en Julia.

- Uhm, eso me hace saber, que para algún particular si lo ha hecho.

- ¿Particular?, me refería a las habituales fotos con amigos, celebraciones y ese tipo de cosas- argumenta Minerva, un pelin molesta por la insinuación soltada por Julia. Desde luego, ella no va haciéndose según que tipo de fotos, ni tampoco su autoestima da como para posar ante particulares.

- Tiene cierta tendencia a contestar- Julia rebate, cámara en mano y fotografía de Minerva tomada y a la espera de impresión.

- Es que no poso para particulares, ¿que clase de pregunta es esa y que insinuación llevaba?- desesperada por la manía que parece tener esa mujer de regañarla, Minerva se calienta y hasta omite, que esa mujer, le este haciendo fotos.

- No lo haga- advierte, tras disparar una segunda fotografía y ahora no mira nada mas, que los labios de Minerva.

- ¿El que?- cansada del jueguecito, Minerva le arrebata la cámara y sus cuerpos vuelven a estar separados por tan solo centímetros. Minerva sabe perfectamente a que se esta refiriendo pero también va siendo obvio, que alguien debe frenar el ordena y mando, de esa mujer.

- No me rete

- ¿O me castigara?

- ¿Quiere que lo haga Minerva?

Si, gritaron alteradas por su cercanía y por sus ansias de marimandonear todo lo que toca, las moléculas de Minerva. Pero una cosa es, lo que todo su cuerpo le gritaba y otra dejarse ganar, por esa mujer.

- ¿Quiere usted hacerlo Julia?

- Jajaja, contestona y rebelde, aun me gusta mas- bomba lanzada por el espectacular f18 y Minerva que cierra los ojos, ansiando el castigo prometido - Lástima, no termino de mojarse el labio- nueva caricia, esta vez breve, de su dedo en los labios de Minerva y esperar un segundo, a que los ojos de ésta vuelvan a abrirse- No debería jugar con fuego, Minerva.

4 comentarios:


  1. Ufffq!!! Que ganas dan de agarrar a Julia y plantarle un buen morreo para que deje de ordenar, no se cómo aguanta Minerva.

    Excitante. Gracias por seguir.

    Genu.

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  2. Un poco soberbia Julia o me parece a mi?pero no deja de ser seductora,ja,ja, seguro que a Divina esta señora le encanta,ja,ja.
    Saja

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  3. oHHH siiiiiiiiiiii!!!!!! vamos!!!!!!!!
    se puede hasta sentir la tensión JODER

    artisstaza GRACIAS

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  4. ....Una que ordena...que sabe hacerlo...que en cada orden es más y más deseable...Y la otra que a cada orden dada más le gustaría obedecerla si con ello consigue toda la atención de semejante mujer...Quiere no sin embargo medir sus fuerzas...aún sabiendo que perderá la batalla antes incluso de empezarla y además ...''esta deseando que la pierdan a ella misma....

    ....Seducción con mayúsculas en esta Historia ...¡¡¡¡siii¡¡¡¡¡

    Saja seguro que a Divina y alguna más...jejejeje....seguro...te lo digo yo..

    Celeste-Negro

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