Entre
al bar, sí. Que yo había parado en ese bar, para tomarme un café no para
estar pendiente de una sombreritos. Deje que las niñas se fuesen a
su aire a la barra. Que no soy yo ninguna lapita, por mucho que las
niñas sean de arte; graciosas, simpáticas y cafeteras. Perfectas
para echar un café y más tarde unas cervezas. Pero no.
Yo
no había salido del pueblo a hurtadillas de mi madre, para
relacionarme, lo había hecho en busca de libertad. Pasa que, fue
poner un pie en el bar y cagarme en todito.
"Dile
que yo estoy muy bien. Que nunca he estado mejor. Si piensa que tal
vez me muero, porque ella no esta, que va. Dile que al final de todo,
se lo voy a agradecer. Aunque pensándolo bien, mejor dile que ya no
me ves"
Sonaba
el canta penas mayor de la historia, Franco de Vita, haciéndome
regresar a mi realidad. Puedo apretar a todo lo que da, el puño de
mi moto, que no llegaré lo suficientemente lejos como para que una
simple y penosa canción, me hable de ella.
Asquito
vida por favor. Mira que no habrá cancioncillas para poner que me
tienen que poner esta. Y mira si soy un ser extraño digno de
estudio, que me pongo y significando lo que significa el asquillo
canción, la tarareo.
Jejeje,
ains. Ahora me da la risa, con el coraje que le daba a ella que
hiciera eso. ¿Pero que quieres que te diga maja? Las canciones están
ahí, que tu no sabes que te están taladrando la penilla cabeza con
ellas, pero están ahí, forman parte de ti.
Me
cantas; "no me gusta que a los toros te pongas la minifalda"
y veo a mi Tía Concha dándolo todo en la verbena del pueblo, si me
cantas; "adiós mi España querida te llevó metida en no se
donde", veo a mi madre fregando platos, que me cantas; "amiga
mía no se, que decir ni que hacer para verte feliz" y veo a
Sonia. La dueña del primer beso que robé.
Porque
los besos a las niñas bonitas hay que robárselos. Tratar de que no
se lo esperen, una gracieta, una sonrisa y te lo robé. Me lleve tú
beso. Después cerraras los ojos y el beso proseguirá o no, tú vida
enredada a la "roba besos", proseguirá o no, pero el recuerdo de aquel
beso que te robaron una de tarde mayo, ese si proseguirá en tu
recuerdo.
Ya
estamos, una penilla canción y a mi me da por echarle cuenta a cosas
sin sentido alguno o si que lo tienen, pero hay que pararse a
buscarlo y no tengo tiempo. Mi madre ya tendrá breado mi móvil a
mensajes, dije que gastaría dos depósitos de gasolina antes
de regresar a sus faldas y llevó sólo medio. Me queda mucha costa
por recorrer. Mejor, me acabo los dos expressos que he pedido. Jejeje
vamos, como si sombreritos se lo fuese a tomar conmigo y me pongo en
marcha.
Morena,
al final me marchó sin verte la carita. No has entrado y a mi no me
quedan excusas para seguir en este bar. Mala eres conmigo, niña.
Claro
que, valiente novedad. Te creía distinta sombreritos. Pero como
todas, me pones la miel en los labios y me la retiras como si fuese
alérgica. Y me encanta la miel y no soy alérgica.
Tres
euros que dejo en la barra, saludo a las niñas, jejeje saladas son y
aire. Tengo gasofa y asfalto por quemar. ¿Que hago aquí parada? Pues
nada, entretenerme con la maquinita de bolas para niños. Te
fastidias, también te quejabas porque comprase estas bolas. Pues
mira que te diga, no eran para mis sobrinos, eran para mi jijiji.
¡Tiritiri! Me ha tocado el cochecito rosa, que monada por favor. No,
bola sólo una. Es algo que debo cumplir. Un bar, una bola y ni una
más.
Ahora
si, vuelvo a saludar a las niñas que me estaban mirando sonriendo,
ni idea de por qué, chupa al hombro, casco en mano, bola al bolso
y...y si yo ahora fuese una persona sería e interesante. Me pondría
a recordar alguna película en blanco y negro narrando la similitud
de una pedazo escena de esa peli con lo que me está pasando ahora
mismito, quedaría mega interesante, pasa que lo interesante es lo
que uno ha vivido, no lo que ha visto fingir vivir, podría hasta dar
mil detalles de como la luz se colaba por la puerta, de la canción
que sonaba en el justo momento en que ella abrió la puerta o mil
cosas más.
Pero,
¿para que? Basta con decir que se me pararon los pulsos cuando vi su
carita. Y que obstaculizándole la entrada sin querer, tararee; "
Si alguna vez fui sabio en amores, lo aprendí de tus labios
cantores. Si alguna vez amé, si algún día después de amar, amé,
fue por tu amor, Lucía, Lucíaaaaa"
No
había nombre más bonito para esta niña, un sentido ole pa la madre
que la parió y le puso nombre.
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Muy original, motera. ¿Me dejas pasar?
Ni
voz más pierde sentidos, tampoco.
quiero másssssssssssss
ResponderEliminarartisstaza GRACIAS
......esta Morena le dara trabajo a la Motera..seguro¡¡¡....menudo pase¡¡¡
ResponderEliminarGracias.......
Celeste-Negro