Continua la consulta de la Doc Amor. II Parte

Tras el intento poco productivo, de solucionar la apatía sexual en la que estaba sumido mi matrimonio, mediante los consejos de mis amigas y mi mami, decidí consultar unas cuantas páginas en internet. En ellas se aconsejaba preparar un encuentro intimo con tu pareja y sorprenderla bien fuese con lencería provocativa o con algún juguetito extra.

Decidida, tras ver el mismo consejo repetido en diferentes foros femeninos o de parejas, acudí a una tienda erótica, también conocida como sexshop.

No es la primera vez que acudía a una de estas tiendas, lo he hecho alguna vez acompañada de amigas para preparar alguna despedida de soltera, lo he hecho con mi mujer y hasta he asistido a algún tapersex con amigos e incluso con mi mami y hermanas. Me saltaré la unión especial que mantengo con las últimas nombradas e iré al grano.

Me plante en la tienda a la que Lara, que así se llama mi mujer y castigo, y yo hemos acudido alguna vez. Me encantan esas tiendas, porque es super curioso todo lo que allí te puedes encontrar, empece examinando las estanterías, porque para la lencería tengo un gusto muy definido y sabía que en elegirla no iba a tardar demasiado.

Así llegue a los juguetes que yo llamo “clitorianos” , porque básicamente son para masajear el clítoris buscando un enorme placer sexual, pues bien, de estos hemos tenido creo que dos. Uhm, si, el primero era grande con forma de micrófono, con un cabezal flexible y estrías. Ah...era rosa, me encanta lo rosa, como toda niñita de papa. Ahora que lo recuerdo, no a mi padre, sino al juguete, que mal terminó el pobre.

Porque cuando tú estas casada, con una persona inquieta, lo justo de salvaje, apasionada y marimandona en la cama, si la pones a que te de placer con un juguetito así, pues pasa lo que pasa.....

- Agm...si...cariño a la derecha, muevelo a lo derecha- le pedía excitadisima pero en ese punto en el que si dejan de tocarte donde quieres se apoderan de ti unos nervios que eres capaz de coger el puñetero juguete y llevarlo tú solita a donde quieres.
- Jejeje, le voy cogiendo el puntillo yo a esto- eso es lo que decía, pero la realidad era, que sus manos, con las que debía manejar el juguete comenzaron a viajar por mi cuerpo, haciendo que hasta yo, me olvidase del juguete- madre mía, como me gustas.

Ansiándose, ya estaba ansiándose, que yo la conozco muy bien, pero me acaricia tan rico que no fui incapaz de detenerla y menos, cuando el aparatito quedo atrapado entre su cuerpo y el mio, y justo donde yo lo quería. Momentazo perfecto, porque disfrutaba de sus caricias, de sus besos y de esa cosa rodeando mi clítoris a un ritmo constante. Hasta que....

- Que le den a la cosa esta
Si, ansiosa como es, quiso sustituir el aparatito por sus dedos y lo lanzó fuera de la cama, haciendo que impactara contra la pared, inutilizandolo. Bueno, a día de hoy, una de mis sobrinas lo usa de micrófono, si es que era monisimo todo rosita él.

Y nuestra siguiente adquisición clitoriana no lleguemos ni a probarlo, porque a mi querida mujer, le dió por investigarlo y acabó destrozándolo sin posibilidad de regresarlo a su estado original.

Retomando, mi inspección por la tienda me topo con las bolas chinas jajajaja y éstas me hacen reír, porque entre que yo tengo mi lado viciosillo y que ella es como es, las bolas fueron todo un éxito en nuestra casa, hasta que..

Cenábamos con mis padres, yo esa tarde tuve turno y llegue poquito ante de cenar, lo que desconocía es que a mi mujer le dió por ponerse las bolas chinas, mientras preparaba la cena y como tiene la penita cabeza que tiene, se le había olvidado quitarselas.

Así que se paso toda la velada, haciendo movimientos extraños y sudorosa, yo al principio creí que podría estar pillando algún virus, pero cuando me confesó en una de las idas a la cocina, lo que verdaderamente pasaba, la mandé directa al baño, para que dejara de sufrir jajaja

Pero, el destino siempre es juguetón y hasta que pudo ir al baño, pasaron bastantes minutos mas, tantos como para tirar las bolas a la basura nada mas se marcharon mis padres de casa.

Doc: Ehm.....

So: ¿Ehm?

Doc: No que....saltándome la pregunta que debería hacerte de si probasteis juguetes tipo dildo, ¿que lencería usas y tienes tan clara?

So: Ah...jeje, pues no se. Es que

Doc: Jem, jem, jem.....no te extrañe mi pregunta ¿eh? Seguro esta recogida en el protocolo establecido para el sas que padecéis.

So: Ah, si es así. Pues no se, suelo usar negligges.

Doc: Agüita

So: Agüita no, normalmente colores oscuros, cortitos y pues

Doc: Mae mia...ejem.....y cuando los llevas, ¿lo haces con pelo suelto o recogido?

So: Doctora, ¿esta seguro que esto es imprescindible para eso que ha dicho que tenemos?

Doc: Jem, jem y que yo te lo vea puesto, mas, mucho mas. Que lo dice la OMS, ¿eh?