lunes, 18 de marzo de 2013

Wilson S.L. 36


La habitación permanecía en penumbra, pero podía pasear por ella sin ningún problema. Frente a la cama detiene sus pasos e inhala por la nariz cerrando los ojos.

M: Joder Miriam- protesta en voz baja tras detectar un olor muy conocido y con sigilo camina ahora hasta el baño. Ya en él enciende la luz tras cerrar la puerta y busca en la papelera.

Ni rastro de jeringuillas en ella, pero el papel de plata alojado en el pequeño cubo, parece guantearle la cara. Quizás Miriam no se pinche, pero ya fuma en plata.

Cabreada por el descubrimiento cierra los ojos y suspira, no queriendo que el cabreo la gane. Por eso trata de tranquilizarse y cuando lo consigue, regresa a la habitación y abre las persianas, sin respetar el sueño de Miriam.

Mi: Maca- protesta girando su cuerpo desnudo bajo las sabanas y se esconde de la luz bajo la almohada.

Sin atender a su protesta, abre la mesita y coge las distintas papelinas que encuentra en ella, a continuación hace lo mismo con el bolso de Miriam.

M: ¿Tienes mas?- pregunta mostrando la mano con las papelinas, pero Miriam continua boca abajo- Miriam- alza la voz y retira de golpe la almohada- muy bien- tira las papelinas al suelo y retira ahora, sin ningún miramiento la sabana que cubre a la pelirroja.

Mi: Maca- ahora si la mira y por la forma que los ojos de Maca la miran, empieza a temer- solo...yo solo

M: Estate quieta- ordena hincando la rodilla en la cama y con fuerza, la sujeta por la espalda contra la cama. Y lo hace solo, para comprobar que la ausencia de jeringuillas no se debe solo al ingenio de Miriam para esconderlas.

Mi: Uhm..- ronronea retomando su roll- esto no es capaz de dartelo y siempre tienes que..ah..Maca- protesta cuando la mano que se cierne sobre su espalda, la presiona mas contra el colchón.

M: Sush, no me calientes Miriam, no me tienes precisamente contenta- exige, revisando cada centímetro de su piel, conociéndola como la conoce, sabe que es capaz de pincharse en el lugar menos esperado.

Mi: ¿Que me miras?

M: ¿Te has pinchado?

Mi: No...ya te tiene ganada otra vez esa zorra

M: No te quiero hacer daño, Miriam. Deja de hablar de ella.

Mi: Jajaja, bien que sabes de quien hablo.

M: Se acabo, levantate- vuelve a ordenar pero no espera que Miriam se incorpore, le ayuda ella tirando de su brazo. Entre trompicones por las protestas airadas de Miriam, la lleva hasta el columpio donde la agarra, esta vez no con el propósito habitual.

Mi: No me pincho, te estoy diciendo la verdad- trata de sonar contundente y ahora coopera, dejándose amarrar de pies y manos.

M: Te vas a ir a Santorini

Mi: No, no lo voy hacer

M: Harás lo que a mi me salga de los cojones, iras con Eduardo, te recuperaras y entonces veremos- una vez la tiene sujeta, comienza su minuciosa inspección.

Mi: No te quiere y puedes mandarme todo lo lejos que quieras, que al final vendrás a por mi. Nunca te ha querido, quiere las bodegas y quiere hundiros. Por dios santo, si conoces sus planes a la perfección. Hacerse con la presidencia del consejo de las bodegas y barreros de un escobazo....y no me pegues.

M: ¿Cuando cojones te he pegado? Tienes unos días Miriam, después te irás. Eduardo seguro encuentra lo que yo no.

Sentencia y comienza a soltarla preocupada. ¿Que cojones esta pasando con su mundo estos días? ¿Como puede Miriam temerla así?

Con más preguntas por el estilo, vuelve a su despacho donde intenta calmarse dándose una ducha.

Y mientras tanto, Anna en pantalón recto verde, alta botas, camisa blanca y chaleco abombado verde, recibe en una de las bodegas a su hermana pequeña.

An: ¿Que haces aquí?- pregunta sonriente al verla ahí y se extraña, al verla vestida de traje.

Es: Me han chivado que es un día importante- sonríe ladeando la cabeza y se queda quieta a apenas un metro de su hermana. Anna luce mas bonita de lo normal y no solo sonríe con los labios.

An: Dame un beso, no nos hemos visto en días- es ella la que acorta la distancia y agarrando el rostro de su hermana, la besa en la mejilla y no suelta su cara. Llevaba días sin verla, y justamente hoy, le apetecía y mucho.

Es: Estas- susurra mientras sus ojos se pasean por el rostro de su hermana y sonríe contagiada por la sonrisa de Anna.

An: Estoy- la invita a continuar y arruga la nariz divertida. Después vuelve a darle un beso, pero nuevamente no la suelta y con las manos, ahora le acaricia el corto cabello.

Es: Muy guapa y.....no se, ¿especial?

An: Tu si que lo eres- la atrae hacia si y la abraza, despeinándola.

Es: Si que estas especial, si- disfruta del abrazo entre ambas y ríe cuando Anna comienza a moverse con ella entre sus brazos- ¿Me dirás por que?

An: Hoy almorzamos las tres juntas, yo os contare y tu después, me contaras como piensas salir del lío en que estas metiendo.

Es: Oh, oh....Anna sabe todo.

An: Jajaja, por lo menos eso intento. Y ahora vete a descansar- cierra mas el abrazo y después la suelta, sin poder ni querer dejar de sonreír.

Es: ¿Avisas tu a Val?

An: Si, vete- le pide irse, pero ambas hermanas se miran a los ojos sin dejar de sonreír y ninguna se mueve- Ese traje es de Maca

Es: Si- baja la cabeza rascándose pero la mano en su barbilla de Anna, le hace volver a alzarla.

An: Ten mucho cuidado, por favor.

Son las últimas palabras intercambiadas de ambas, a lo último dicho por Anna, le sigue un te quiero mudo de Estefania y ella contesta con un yo también, igual de mudo.

Estefa entonces se marcha y Anna, continua inmóvil y sonriendo viéndola marchar, hasta que parece verse así misma y se cubre el rostro con ambas manos negando con la cabeza. Se sentía increíblemente bien, la noticia de su embarazo la tenía emocionalmente desbordada, no le apetecía mas que sonreír y disfrutar de los suyos.

Los suyos, increíblemente por igual, en ese suyos hoy incluía a Maca. Torciendo los labios, por este último pensamiento, comprueba que la coleta alta que hoy lleva, continua en perfecto estado y decide ir a la antigua sala de empaque, donde en poco mas pinchara la barrica según el protocolo Paredes. Con prácticamente todo el personal que ha participado en esa creación vinera.

Pero las pisadas aceleradas de alguien, le hacen volver a girarse y volver a negar con la cabeza, ahora es Valeria, la que llega con una vestimenta que grita “guerra y noche”, haciendo aspavientos con las manos.

An: Fresquito el conjuntito para las bodegas- asevera, esperando que llegue hasta ella y ya se imagina, que su hermana mediana tampoco durmió.

V: Madre mía Anna- para de correr y avanza lo poco que queda hasta ella, nerviosa e histrionica. Su noche ha dado para mucho, sabe de la poca simpatía que su hermana le tiene a Martha, y ademas esta Estefa.

An: Jajaja ¿Que?- ríe ajena a todo lo vivido por su hermana esa noche y se cruza de brazos, a la espera de que su hermana hable. Es Valeria y a ella, no hay que forzarla para hablar.

V: La he liado gorda, Anna

An: No es novedad

V: No, esta vez creo que me supere a mi misma. Por cierto estas guapisima.

An: Al final me lo creeré, ¿que has hecho?

V: Joder, a ti no te va a gustar, pero es que a Estefa menos, mucho menos.

An: ¿Y a Estefa por que?- pregunta dejando de sonreír, puede que siempre difiera con la menor, pero nunca ha dejado de ser eso justamente, la hermana pequeña consentida.

V: Dios- se cubre el rostro con ambas manos y coge aire, dispuesta a soltar la bomba.

Ann: Maca

Pero el susurro de su hermana, nombrando a Maca, le hace descubrir su rostro y mirar hacia donde lo hace su hermana.

Que no es otro sitio, que la entrada a la sala donde están, por la que Maca, en su clásico traje y abrigo largo, entra acompañada por Faus.

V: Si es que grita el mafiosa, con esas pintas- mira de reojo a su hermana esperando alguna replica o regañina, pero su hermana contempla en silencio la figura de su mujer llegando hasta ellas- el abrigo abierto, el pelo suelto, las manos en los bolsillos, no te engañes, lo tiene todo ensayado. Aunque si, un poquito de respeto da.

An: Comemos juntas a las tres- la informa sin dejar de mirar a Maca y retiene las ganas de morderse el labio. Esa imagen de Maca, siempre le ha fascinado. Autosuficiente, seria, elegante y con un punto de maldad, que crea el respeto del que habla su hermana. Que diferente, a aquella muchacha de jeans y camisetas.

V: Eah, la bomba para mas tarde.

An: Serán bombas y si, mejor mas tarde.

Y minutos antes....
 
 



4 comentarios:

  1. Eeeeessssooooo siiii es un cuuuuueeeerrrpppooooo¡¡¡¡¡¡ madreeeee miiiiiiiaaaaaaa¡¡¡¡¡¡ quitaaaaaaa el seeeentiiiiidooooo¡¡¡¡¡¡ viiiiivaaaaa las PIBAAAAASSS¡¡¡¡¡
    un Besico desde R. teterooooooo jejeje

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  2. Maca hace muy bien en tomarse la molestia de desintoxicar a Mirian, de alguna manera en paralelo también le ayuda...
    Más y más cada capi de esta historia me sorprende, esta vez el descubrimiento de que Maca sabe de los planes de Anna, o sea , recuperar las bodegas... y me pregunto....Anna es tan obvia... o es Marta espía doble, toma aquí suelto allí y viceversa ...
    te echo de menos..
    beijos

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  3. Supongo que una no llega a ser una mafiosa de alto nivel si no está al tanto de todo lo que le rodea y es evidente que Maca lo está o al menos intenta estarlo....
    Besos y gracias

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  4. Uyyyyyyyy con lo que me gustan a mi las pelirojas... Ahora entiendo un poco porque Maca no se le puede resitir a Miriam pese a que Anna Esther sea una puta diosa. De verdad que lo entiendo!!!

    Cari.

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