sábado, 2 de febrero de 2013

Wilson S.L. 4

Hogar, Wilson

Sentada aún en el coche, contesta a la llamada rutinaria de cada noche y solicita una vuelta mas a su conductor, que según lo planeado por ella misma, no es hora de regresar a casa.

Y su conductor, se limita a obedecer pero lo hace sin perder detalle, de la mujer que le ordena y por supuesto de la conversación que mantiene.

- ¿Me llamas para decirme que mi mujer está en el Satanás?- pregunta soltando el mechón de pelo con el que jugaba distraída, hasta que lo dicho por ese alguien con el que habla, la irrita sobremanera.



“ Que genio tie la condenáh, todo lo que tiene de guapa, de aquí estoy yo, de mírame y no me toques, a todo eso, le gana el geniazo que gasta. También es que, llamar pa decir que Doña Macarena está en el Satanás…amos que…valiente novedad, ¿Qué noche no? Hay que ver, que matrimonio este, cada una a su aire y después…¿eh? ¿De que habla ahora?...no no la mires por el espejo membrillo, que ojazos tiene y que pecho y que…¿me llama a mi?”

- Dígame señora

- Llevame a casa

- Lo que usted pida.

- ¿Estas segura que es mi hermana?...uhm….¿socia de Wilson S L?...¿desde cuando?

Gracias hermoso, na pa que me va a decir nada, si ella ordenar y mandar, y todos a obedecer cegados por ella y su..Ya está, ya se lo han chivado, era de cajón que se enfadara, su hermana una de las compinches de Doña Macarena, jejejeje malo soy…esto va a traer cola”

- No hagas nada, de los míos me ocupo yo…y

“ Y tú ni rechistes jejeje, lo bien que me lo paso oye….eah…ya hemos llegado, la vuelta mas tonta que me ha hecho dar”

- ¿Quién hay en casa?

- Cuando me llamo para recogerla, su hija, el señor Francisco y el Señor Roberto junto con su esposa, no…no…vamos no su esposa de usted sino de él…y..y cuando digo él me refiero a

- Buenas noches, Pepe.

Pe: Eh..si si, espere que le abro. “Eah, voy a perderme yo el modelito de hoy…jejeje guarro soy”

Varios minutos después, la dueña del modelito camina por la entrada de la casa, con cuidado de que sus altos tacones no resuenen anunciando su llegada. En el gran recibidor, detiene sus pasos y se retira el abrigo, para contemplarse en el gran espejo. Sonriendo de lado al mirarse, sube los bajos de su vestido de la rodilla hasta el medio muslo y abre su escote, mostrando mas pecho que como lo había hecho antes de llegar a casa. De un solo movimiento, coloca su melena chocolate en su hombro derecho y cuando se da el visto bueno, retoca su maquillaje, haciendo hincapié en sus larguisimas pestañas oscuras como lo son sus ojos.

Poco tiempo mas tarde, sus tacones resuenan en la tarima de la vivienda anunciando, ahora sí, que está en casa.

- Buenas noches- es su saludo a los tres comensales y sonríe agradeciendo el gesto de levantarse a los dos caballeros de la mesa- Francisco- besa la mejilla del patriarca de la familia y sin darle importancia lo ayuda a retomar asiento, dejando en un falsa familiartidad, la mano en su espalda.

Fr: ¿Te unes a la cena?

- No, cene fuera, una copita de vino si aceptaría- clava sus negros ojos en Roberto y se muerde el labio gustosa y sin importarle la presencia de la mujer del mismo, al ver como Roberto cumple en seguida su petición.

Pi: Ya veo, que la noche no debe ser muy fresca- escupe el fresca sonriendo por su dardo.

Fr: La belleza hay que exponerla y da igual las condiciones

- Gracias por lo que me toca- vuelve a besar la mejilla de su suegro y toma asiento junto a él- ¿Contestada tu pregunta Pilar?

Pi: Sobre la frescura de alg.... de la noche, no. Y con vuestro permiso yo me retiro.

Fr: Pilar- intercede el patriarca al ver marchar a su otra nuera con mala cara.

- Déjela, anda sensible ¿No Roberto?

Ro: Cuñada- sonríe el pequeño de los Wilson, no queriendo darle el gusto de dejarse picar por ella- ¿Y mi hermanita?

- Uhm…arreglando tus estropicios- contesta suave llevándose una uva a la boca, ante la atenta mirada de los caballeros y provoca que Roberto se mueva incomodo en la silla.

Ro: ¿Desde cuando la distribución es cosa mía?- pregunta recuperándose rápido y orgulloso la reta con la mirada.

- ¿Cómo sabes que ha sido la distribución?- pregunta apoyándose en el respaldar y cruza sus piernas, mostrándolas a ambos.

Fr: Jajaja, voy a reírme por como te ha cogido y mañana quiero una explicación, ahora me voy un rato con mi nieta.

- Nada de vinos, Francisco- advierte, olvidando cualquier estratagema al salir a relucir su hija.

Fr: Tiene un don en su paladar, solo hay que

- Pero no deja de ser una niña- coge la mano de su suegro, suavizando la advertencia.

Fr: Como quieras- besa la mano y fulmina con la mirada a su hijo antes de retirarse del salón.

Ya solos, vuelve a coger una uva y sonríe a un Roberto, que se mantiene en su silla observándola sin decir palabra.

Ro: A ti te informan y a mi también, ningún misterio.

- Jajaja, pues ten cuidado Roberto, puede que sean los mismos.

Ro: Estas contenta hoy- no entra en su juego e inicia el que a él, verdaderamente le interesa.

- Tengo motivos- se incorpora de su asiento, al leer en los ojos de su cuñado el juego iniciado.

Ro: Pronto, muy pronto, puede que te arrepientas de tu elección- la imita dirigiéndose al mini bar.

- ¿Que elección?- se sienta con postura muy ensayada en un de los sofás y recoge sus piernas sobre él, tras quitarse los zapatos.

Ro: Mi hermanita- regresa del mini bar, con dos copas servidas y no se molesta en disimular, el recorrido que sus ojos realizan por el escultural cuerpo con piel canela, semitumbado en el sofá.

- Uhm…el amor no se elige querido.

Ro: Jajaja- ríe dejando ambas copas en la pequeña mesita y se inclina hacia ella, acorralándola entre el sofá y él- a otro perro con ese hueso.

- Me encanta cuando te picas- agarra su corbata y lo tienta jugando al limite, al tirar de ella- ¿Sabes que los Ortiz han comprado a los Villar?- juega distraída con la corbata y por dentro, sonríe triunfante al verlo mirar sus labios- Necesitamos esas tierras.

Ro: Solo juegas conmigo- habla tras tragar saliva y se acerca a esos labios que se mojan llamándolo.

- ¿Acaso no quieres jugar?- pregunta disfrutando del éxito que le muestran los ojos inundados en deseo de Roberto y sonríe al escuchar un portazo- Lástima, ¿lo has oído? Mi mujer está en casa.




6 comentarios:

  1. ÉSTA HISTORIA...te lleva a lo más alto!!!!!!!

    ARTIISSTAZAAAAAAAAAAAA

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  2. Y los morrazos que nos vamos a llevar...!!!!

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  3. Vaya que esta mujer tiene armas,

    Cari

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  4. Esta mujer es pura dinamita..de esas que..aunque
    te amarguen la vida..no te importa...solo sabes
    que aunque te mienta..te domine y tu vida sea un
    infierno...quieres morir abrasada....Jjajaja
    Ainssssssss...a sido un desahogo niñas...
    Es que mujeres asi normalmente...que no...jajaja
    Gemo...Me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa....

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  5. Perdonnnnnn...La despistada de arriba soy yoooo

    DIVINA-WILSON

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  6. Ya me habia dado cuenta divina que eras tu la de arriba jajjajaja
    besitos de mariposa jjajajajaja

    Cari.

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