La Foto-'cita' de la semana

Continua la consulta de la Doc Amor. II Parte

Tras el intento poco productivo, de solucionar la apatía sexual en la que estaba sumido mi matrimonio, mediante los consejos de mis amigas y mi mami, decidí consultar unas cuantas páginas en internet. En ellas se aconsejaba preparar un encuentro intimo con tu pareja y sorprenderla bien fuese con lencería provocativa o con algún juguetito extra.

Decidida, tras ver el mismo consejo repetido en diferentes foros femeninos o de parejas, acudí a una tienda erótica, también conocida como sexshop.

No es la primera vez que acudía a una de estas tiendas, lo he hecho alguna vez acompañada de amigas para preparar alguna despedida de soltera, lo he hecho con mi mujer y hasta he asistido a algún tapersex con amigos e incluso con mi mami y hermanas. Me saltaré la unión especial que mantengo con las últimas nombradas e iré al grano.

Me plante en la tienda a la que Lara, que así se llama mi mujer y castigo, y yo hemos acudido alguna vez. Me encantan esas tiendas, porque es super curioso todo lo que allí te puedes encontrar, empece examinando las estanterías, porque para la lencería tengo un gusto muy definido y sabía que en elegirla no iba a tardar demasiado.

Así llegue a los juguetes que yo llamo “clitorianos” , porque básicamente son para masajear el clítoris buscando un enorme placer sexual, pues bien, de estos hemos tenido creo que dos. Uhm, si, el primero era grande con forma de micrófono, con un cabezal flexible y estrías. Ah...era rosa, me encanta lo rosa, como toda niñita de papa. Ahora que lo recuerdo, no a mi padre, sino al juguete, que mal terminó el pobre.

Porque cuando tú estas casada, con una persona inquieta, lo justo de salvaje, apasionada y marimandona en la cama, si la pones a que te de placer con un juguetito así, pues pasa lo que pasa.....

- Agm...si...cariño a la derecha, muevelo a lo derecha- le pedía excitadisima pero en ese punto en el que si dejan de tocarte donde quieres se apoderan de ti unos nervios que eres capaz de coger el puñetero juguete y llevarlo tú solita a donde quieres.
- Jejeje, le voy cogiendo el puntillo yo a esto- eso es lo que decía, pero la realidad era, que sus manos, con las que debía manejar el juguete comenzaron a viajar por mi cuerpo, haciendo que hasta yo, me olvidase del juguete- madre mía, como me gustas.

Ansiándose, ya estaba ansiándose, que yo la conozco muy bien, pero me acaricia tan rico que no fui incapaz de detenerla y menos, cuando el aparatito quedo atrapado entre su cuerpo y el mio, y justo donde yo lo quería. Momentazo perfecto, porque disfrutaba de sus caricias, de sus besos y de esa cosa rodeando mi clítoris a un ritmo constante. Hasta que....

- Que le den a la cosa esta
Si, ansiosa como es, quiso sustituir el aparatito por sus dedos y lo lanzó fuera de la cama, haciendo que impactara contra la pared, inutilizandolo. Bueno, a día de hoy, una de mis sobrinas lo usa de micrófono, si es que era monisimo todo rosita él.

Y nuestra siguiente adquisición clitoriana no lleguemos ni a probarlo, porque a mi querida mujer, le dió por investigarlo y acabó destrozándolo sin posibilidad de regresarlo a su estado original.

Retomando, mi inspección por la tienda me topo con las bolas chinas jajajaja y éstas me hacen reír, porque entre que yo tengo mi lado viciosillo y que ella es como es, las bolas fueron todo un éxito en nuestra casa, hasta que..

Cenábamos con mis padres, yo esa tarde tuve turno y llegue poquito ante de cenar, lo que desconocía es que a mi mujer le dió por ponerse las bolas chinas, mientras preparaba la cena y como tiene la penita cabeza que tiene, se le había olvidado quitarselas.

Así que se paso toda la velada, haciendo movimientos extraños y sudorosa, yo al principio creí que podría estar pillando algún virus, pero cuando me confesó en una de las idas a la cocina, lo que verdaderamente pasaba, la mandé directa al baño, para que dejara de sufrir jajaja

Pero, el destino siempre es juguetón y hasta que pudo ir al baño, pasaron bastantes minutos mas, tantos como para tirar las bolas a la basura nada mas se marcharon mis padres de casa.

Doc: Ehm.....

So: ¿Ehm?

Doc: No que....saltándome la pregunta que debería hacerte de si probasteis juguetes tipo dildo, ¿que lencería usas y tienes tan clara?

So: Ah...jeje, pues no se. Es que

Doc: Jem, jem, jem.....no te extrañe mi pregunta ¿eh? Seguro esta recogida en el protocolo establecido para el sas que padecéis.

So: Ah, si es así. Pues no se, suelo usar negligges.

Doc: Agüita

So: Agüita no, normalmente colores oscuros, cortitos y pues

Doc: Mae mia...ejem.....y cuando los llevas, ¿lo haces con pelo suelto o recogido?

So: Doctora, ¿esta seguro que esto es imprescindible para eso que ha dicho que tenemos?

Doc: Jem, jem y que yo te lo vea puesto, mas, mucho mas. Que lo dice la OMS, ¿eh?

 

Entre zorras te verás...

Así anda perdida gemo, entre zorras o zorros, a saber... Por ese motivo esta semana las historias no se van a actualizar. Pondré otras cosas, y las fotos/videos que me mandé la zor.., digo gemo, desde el lugar donde se encuentra, ejem...

Foto-Cita de la semana

Wilson S.L. 76

Minutos después de su amistosa pregunta, Anna se siente  subida a un ring, sin ser boxeadora. Como al pobre ingenuo, que por saber dar dos derechazos, lo suben al ring sólo para que su contrincante lo machaque y el viejo que dobló la apuesta, se lleve la pasta, importándole muy poco la suerte del muchacho.

El hijo de puta, que amaña el combate no es otro más que el viejo Wilson, su contrincante es Macarena enfundada no en boxer de boxeo sino en verdades y ella es la pobre muchacho, que suben al ring prometiéndole gloria y triunfo.

Primer golpe que la deja a  punto de ko, el descubrimiento de los planes de Maca. Alejarse de Wilson, y para tan atrevida misión, no había elegido a sus putas, ni tan si quiera a Martha. Las elegidas habían sido ella y Adri.

M: Lo tenía todo planeado, Anna. Absolutamente todo. Quería empezar con vosotras, mi verdadera familia. Puede que aún no hayamos conseguido serlo, pero sois lo que más quiero.

Segundo golpe, la sinceridad de sus palabras, que brotaban de sus malheridos e hinchados labios,  tildadas de emoción mezclada con dolor y desilusión.

Al segundo golpe le sigue un tercero y Anna sintió que no habría compasión con ella, o reunía fuerzas para soltar derechazos en forma se verdades, o esa noche en ese oscuro encierro sólo habría una ganadora. El tercero consistió, en asistir en directo y en primera fila, a la afronta de Maca con su padre.

Fr: No se que edad tendrás que tener, para darte cuenta que los putos sueños de Disney con princesa e hijos, no es más que eso, putos sueños. En Wilson, las princesas no son más que putas y los hijos son de otros jajaja.

M: No soporto su voz, jamás la he soportado, me da asco y no se puede hacer una idea, de cuanto entiendo ahora a mi madre.

Fr: Macarena, ¿como te atreves?

M: Me atrevo a más, no vuelva a referirse a ella en esos términos

An: Maca déjalo

Fr: Jajaja, ella si asume lo que es

Abrazadas, como cuando el boxeador que se sabe ganador, se abraza a su malherido contrincante, aprovechando para coger aire.

Las últimas palabras de Francisco, provocaron que Maca se incorpórase sin atender a su dolor y dispuesta, a sobrepasar la línea de fuego entre padre e hija. Pero los brazos de Anna la detuvieron. No iba a permitir, que el viejo ocupara más espacio en los remordimientos de Macarena.

M: Lo peor es que tiene razón- se lamenta Macarena en los brazos, ahora rígidos, de Anna- cada vez que el ha insinuado algo así respecto a ti, tú le has dado la razón. Primero Fran

An: ¿Quieres esto?- Anna la interrumpió soltándola, si en verdad iba a recibir semejantes golpes, no iba a quedarse quieta recibiéndolos- Elegí a Fran, primero porque jamás diste muestras de querer luchar por mi. Era mucho más fácil dejarte manipular por este cerdo.

Fr: Como no la pongas tú en su sitio lo haré yo.

"Cállese", fue la contestación al unísono que ambas dieron a la advertencia del viejo Wilson. Tras ello, Anna tomo aire, verla apoyándose desvalida en la pared, dolorida y sin fuerzas, le hacían replantearse si tenía algún sentido combatir.

M: Volví de Colombia, dispuesta a todo

An: Con una puta, contigo. Lo recuerdo perfectamente.

M: No es ninguna puta, es la única que se ha esforzado en conocerme. Tú jamás lo intestaste, sólo te agarraste a cada excusa que encontrabas para no aceptar, que Anna Esther Paredes, era una bollera enamorada de una Wilson, que además era una cría. Pero esa cría que fui yo, estaba dispuesta a todo por ti e incluso me jugué los huesos por ti en Colombia. Porque si con alguien quería tener mi primera vez era contigo. Con la mujer de la que me enamoré en cinco minutos de conversación. No pasó nada con Martha, nunca ha pasado porque siempre la he querido y respetado, porque aunque tú pienses lo contrario, no soy tan hija de puta como tú me ves- pausa de Macarena, las verdades que escupe por su boca, increíblemente, la cansan y reaniman por igual. Hace mucho tiempo que debería haber explotado como lo esta haciendo ahora. Porque encerrada en esa habitación, al final, va a resultar ser su mayor liberación- Ese que está ahí tirado y que se llena la boca, haciéndose llamar padre, quiso regalarme una noche épica, un bautizo Wilson, y te juro que moría de ganas por hacerlo. ¿Sabes por que? Porque Fran se la pasó alardeando de su historia contigo, ¿sabes lo que fue escuchar ciertos detalles sobre ti? ¿Te puedes hacer una idea? Yo soñaba con tus besos, con tus caricias, con tu cuerpo y era a él a quien tú se las regalabas.

An: No estuve con Fran,Maca....no antes de la cueva

M: Mientes, siempre me mientes

An: Ahora ya no tiene caso mentirte. Si salimos de ésta, sólo nos unirá Adri. Me canse de joderte la vida y en consecuencia de jodermela a mi.

M: Anna

An: Jajaja- rozando la histeria, al borde del agotamiento y con lágrimas cayendo por su rostro, Anna prosiguió con sus verdades-  Adoro mi nombre cuando eres tú quien lo pronuncia.

M: Es...yo....

An: Tienes que sentarte y estar tranquila

M: Aún podemos, podríamos ....Anna, esperas otro y yo

An: Hace unas horas el bebé que espero te supuso una recaída, ¿que cambia ahora?

M: Que ahora se la verdad, que ahora se que sólo hemos sido dos cabronas sin los cojones suficientes para reconocer que nos queremos y que

An: Y que ya es tarde, para nosotras. He pasado dos abortos, solo quiero que este embarazo continúe, disfrutarlo sin mas sobre saltos y...... y por favor miénteme, ¿Adri esta bien?

M: Si, esta a salvo y bien. ¿Cómo cojones no me lo dijiste? ¿Por que lo hiciste sola?

An: Maca

M: Esto es.....es de locos, yo te quiero Anna, no he podido querer a mas nadie mas que a ti. Desde mis dieciséis, Anna, prácticamente toda mi vida he estado enamorada de ti, solo de ti.

Últimos latigazos de un extenuante combate. El viejo deja el palco de honor y con ello la apuesta. Se centra en revisar el torniquete realizado por Anna en su pierna. Mientras ellas se funden en un abrazo, cargado de miedo por el mañana y tras él, vuelven a un combate, ahora amañado por ellas, donde ambas se sinceran contando como la misma historia, tuvo dos versiones.

Encuentros 28

"Escondidos, solos tu y yo, atrapados sin poder salir de mi interior, de tu interior, mientras que hacemos el amor"

Definitivamente, quien escribiese la letra de esta canción, lo hizo para machacarme y hundirme más en este sofá. Una semana, más bien diez días, que no lo abandono más que para satisfacer mis necesidades más primarias. Engullir chocolate acompañado de mil guarradas más y para acudir al baño, donde el espejo está tapado desde ayer.

"Que no quiero verme, paso de verme reflejada en el"

Ya hablo en alto sola y todo. Lo próximo es traerme cinco gatos a la vez o mejor, diez. Seguro dan compañía.

Diez días de mier...miércoles, si. ¿Para que van a entenderme? ¿Comí creí yo que lo harían con tan pésima explicación?

Me basta recordar la conversación con mi madre, esa divina mujer que ha provocado con sus millones de llamadas que desenchufe el teléfono.

- No lo quiero como debería

Esa fue la mil quinientas veinticuatro vez, que repetía la misma frase. A la que mi madre, por igual de veces contestó- que tenéis una hipoteca, que estas unida a él, más que nunca- Ja, ya ves tú que me importa a mi, en estos momentos la dichosa hipoteca.

Mi madre, esa incansable mujer que me dio a mi el ser, merecía que le volviese a contestar con lo mismo, una vez más.

- No me llena como tendría que hacerlo.

- De hijos, de eso es de lo que te debería haber llenado para que se te quitaran todas esas tontadas que piensas. ¿Que creías que era un matrimonio?

Y vuelta empezar e íbamos para para la  vez mil quinientas cinco.

He dejado de contarlas, ya es bastante calvario el que una y otra vez, insiriera con lo mismo.

Diez días, me han dado para tener algo clarísimo, Javi no me merece. En estos años no tengo nada, la más mínima mota que reprocharle, así que ese punto, el de mi separación y divorcio, esta totalmente claro.

Pero una cosa es tenerlo claro, y otra no sentirme una cucaracha. No puedo olvidar la forma en que me miro ayer, cuando vino a recoger más de sus cosas, creo que nunca podré olvidar, el dolor que vi en su forma de mirarme.

Él y ese dolor, es uno de los motivos que me tienen aquí encerrada criando kilos a conciencia, la incomprensión de mi entorno es la siguiente y la tercera si hubiese enumerado, sería mi morena ojos miel.

Pasan los días, pasan y algunas se quedan en mi culo, las calorías, y no consigo saber que hacer respecto a ella, Miranda.

No quiero mezclar, me empeño en no mezclar. He roto mi matrimonio, porque por ella he visto que es verdad lo dicho mil quinientas cinco veces a mi madre, no lo quiero como debería. Pero, ¿y Miranda? ¿Que hago con Miranda? Podría ser sincera y contarle mi nueva situación, ¿pero no sería igualmente egoísta como lo fui con Javi?

Alguien toca a mi puerta, pena que la puerta no pude insonorizarla.

- Voy- contestó al timbre, avisando que voy a tardar en acudir, a Dios gracias que puedo aún levantarme del sofá.

Ahora es cuando recuerdo las comedias románticas americanas y sus finales, y estos me parecen de lo más bonito del mundo. Como necesitaría yo ahora mismo un final made in EEUU, abrir la puerta con los pelos a lo loco, los ojos hinchados, la camiseta arrugada, horrososa para resumir y que tras la puerta estuviese mi morena ojos miel. Que besazo le iba a dar ahora mismo, de película. Vamos que si.

- Que penita por favor, con lo bonito que es el piso. Dime que por lo menos, te lo quedarás tú.

No, no es el final de una película americana, es española de la Mancha y no es mi morena ojos miel, son mis padres.

- Y lo que os queda por pagar, dime como lo harás, ¿eh? Dímelo Daniela, que por lo menos entienda algo de lo que te está pasando.

Mis padres y la hipoteca.

Wilson S.L 75

Debía de estar amaneciendo, en el frío sótano la oscuridad se desvanecía por momentos y el bulto quejica, que no dejaba de gemir, comenzaba a tomar forma. La de un cerdo cruel y sin escrúpulos.

Las horas que impasibles no se detenían, hacían que Anna a cada golpe de aguja se sintiera mas desahuciada. No sabia nada de “ellas”, absolutamente nada y cada tiempo que pasaba, su temor aumentaba por lo que pudiera haberles ocurrido.

Poco importa, estando como esta, su destino e importa mucho menos, cuando mira atrás y recuerda todo lo vivido hasta aquí.

Sonora carcajada que no se escucha por falta de fuerzas. Carcajada provocada por su propia imagen, la que ve en el tiempo. Una estúpida engreída, herida en su ego por una adolescente. ¿Acaso Macarena pudo elegir?

Se pregunta ahora, y se le mezclan las arcadas que le produce cada gemido de dolor de su suegro con su imagen colgada en el tiempo. “Si pudiese volver atrás” Ilusorio pensamiento, ella no es así. Del error se debe aprender, no buscar en él autocastigos y tardíos latigazos.¿ Para que?

¿Qué ha cambiado? ¿Puede el sentirse totalmente desahuciada cambiar lo vivido? ¿Lo no sentido?

Puede que el miedo o directamente el terror que siente al pensar en que a Macarena le haya ocurrido algo, le haga sentirse un poquito mas culpable de lo que siempre se ha sentido.

Y ese miedo, la hace sollozar, al pensar que la ultima imagen de Maca que le quede, sea la del “muñeco roto”. Mejor cambiar de registro, y recordar los últimos días en La Laguna, allí donde se dibujaba embarazada, allí donde las tres compartieron espacio, con destellos de dulce aroma a familia.

Fr: Aggg…..empiezo a no sentir la puta pierna

La nueva queja de Francisco, ahora no la inmuta. Que se queja y sufra lo que quiera o mejor, que sea lo que merece.

Fr: Sush, no te muevas, se escuchan pasos.

Patético, el viejo intentando recomponer su postura de macho protector, le dan ganas de reír. “La familia se cuida” Maldito bastardo.

Sin querer prestarle atención, Anna se queda inmóvil, los pasos son reales y cada vez se aproximan más a ellos. Que pocas ganas de luchar siente, sin ellas no tiene nada a lo que aferrarse.

Fr: Hembra, eres una puta hembra que sabe arañar y morder por los suyos. No te vengas abajo ahora, cojones. Tienes una Wilson y viene otro, levanta la cabeza y planta cara.

La ¿anima? el viejo y no ríe, porque las fuerzas le siguen faltando, pero la puerta se abre por unos segundos, los justos para ver como sueltan un cuerpo como si de un bulto se tratase.

Segundos de luz, que a Anna y a Francisco, le dan para identificar el bulto arrojado al suelo.

An: Maca

Como un chute de adrenalina inyectado en vena, la imagen de Maca, cayendo al suelo como un despojo, recorre su cuerpo imprimiéndole fuerza. La necesaria para levantarse y correr hasta donde Macarena, permanece inmóvil.

An: Maca- solloza arrodillada junto a ella y el examen que sus ojos hacen unido al de sus manos temblorosas, la hacen llorar, al comprobar con horror, los golpes que el cuerpo de Maca presenta. La vertiginosa sensación de horror que siente, la atenaza.

Fr: Hijos de puta- maldice a su estilo y él no puede moverse- ¿Qué le han hecho?

An: Cállese- exige levantando del suelo el rostro de Maca- Maca…Maca, ¿me escuchas? Maca por favor- suplica y desesperada, pega la oreja a la boca de Maca, intentado comprobar que aun respira- Maca

M: ¿Anna?

An: Si, dios Maca, ¿Qué te hicieron?

M: Nada…solo….necesito descansar y….y te sacare de aquí

Incontables las veces que Anna, pronuncia su nombre en sucesivo, apoyando la cabeza de la dueña de ese nombre en sus piernas. Los labios de la misma, están irreconocibles y los ojos, los ojos ni siquiera se le ven.

An: Necesito agua, deme el agua- exige a su suegro fulminándolo con la mirada, mientras sus manos acarician con miedo hacer daño el rostro dolorido de Maca.

Fr: Apenas queda, debemos graduarla

An: Que me de la maldita agua, tengo que limpiarla

M: ¿Anna?- con los ojos cerrados y el cuerpo malherido, la voz de Anna le parece un sueño y se aferra a sus piernas.

An: Maca soy yo, escúchame, es mejor que no te duermas, voy a limpiarte un poco, pero apenas veo y no quiero hacerte daño.

M: ¿Tu?

An: Estoy bien

M: ¿Sangras?- con las mínimas fuerzas, intenta colar las manos por el vestido de Anna, pero las manos de ésta la detienen. No lo que no consigue Anna, es detener las lagrimas que incansables surcan su rostro sin compasión. Esta destrozada a golpes y aun así se empeña en comprobar que ella y el niño que cree es de otro, estén bien.

An: Maca- con las manos de Maca entre las suyas, aprovecha para llevarlas a sus labios, pero la humedad viscosa que halla en ellas, la alarman. ¿Hasta donde llegaron esos animales?

Fr: Hijo putas- grita el viejo al dejar el agua junto a Anna y comprobar, aquello que Anna mira horrorizada- le cortaron el sello.

An: Cállese de una vez- ahora es Anna la que grita, ya es lo bastante doloroso verlo como para encima escucharlo a viva voz.

M: Estoy bien, Anna….solo necesito

An: No te duermas- la interrumpe sellando sus labios, con dedos temblorosos- mantente aquí conmigo

M: Contigo

An: Si, conmigo

Pronombres personales que para ellas siempre sonaron a utopía y ahora, en este justo instante, se convierten en una realidad. Para ambas, desaparecen tiempo, espacio y hasta la impresentable compañía de Francisco. Solo están ellas.

An: ¿Dónde querías llevarnos?

M: Dos veces, van dos veces que intento construir algo nuestro y me lo joden.

An: No merecemos más suerte que esa, ¿Dónde era?

M: Colombia, una pequeña casa en la Isla de Providencia….Tiene caballos, tu adoras los caballos….. y…Adri esta bien y conseguiré sacarte de aquí.

An: Bien, no te muevas, trata de no moverte. ¿Cuándo fue la primera?

Mi cincuenta cláusulas 13

Cada molécula que forma el cuerpo de Minerva, quería gritarle; si. Nos mojaremos y tu harás lo dicho. Quiero sentir esa lamida, quiero que esos perfectos dientes blancos muerdan mis labios y quiero esa lengua enredándose con la mía.

Pero Julia, le ha retirado la hermosa visión de sus ojos y la tentadora caricia en sus labios, para dejar apoyada la mano en su abdomen, mientras habla, o mas bien ordena, mediante una llamada telefónica.

Minerva no escucha, ni si quiera puede centrarse en nada, que no sea, la mano de Julia, en apariencia inofensiva, apoyada en su abdomen y en controlar su acelerada respiración. La distancia entre ambas es escasa y el calor que emana la mano, traspasa su camiseta de tirantes, haciendo imposible controlar el sube y baja de su pecho.

“¿Como se respiraba?” se pregunta Minerva, abriendo los ojos, cuando la mano de Julia, busca entretenimiento en su cuerpo, y comienza a subir sigilosa por su abdomen.

Con la respiración a mil, su pecho en un candente y nervioso movimiento oscilante, los ojos abiertos y la boca siguiendo la estela de estos entornándose- “Que ganitas de mojarmelos”- hila pensamientos tan rápido como su respiración se acelera mas y mas, conforme la mano llega a su escote, y el dedo indice, que amenazante y excitante, se paseo por sus labios, lo hace ahora delineando el final de su camiseta.

- Minerva, ¿disponen estas instalaciones de helipuerto?

La pregunta de Julia, por poco no le cuestan un respingo adolescente a Minerva. Su Minerva, pronunciado bajito, la sobresalta y la pregunta que sabe le ha hecho, se pierde en su cabeza, cuando Minerva le devuelve la mirada y “ojos verdes”, la espera sonriendo.

- Como sea, Mila. Si no es aquí, habrá alguno alrededor, necesito estar en Londres en un par de horas. No quiero el tiempo de espera de anoche en Cuatro Vientos, mira que puedes hacer con ello.

La ultima de parrafada de Julia es escuchada por Minerva y sus intentos de aparentar normalidad. Difícil cuando el dedo indice de la “exigente f18”, se detiene en el inicio de su canalillo y difícil, cuando sus fosas nasales, se empeñan en disfrutar del atrayente aroma, que Julia emite.

- Por favor- con un “por favor” tardío, concluye la llamada Julia y suelta una pequeña carcajada, al presenciar como Minerva rueda los ojos- ¿Y?

- Un poco tarde, sonó ese por favor.

- Uhm, puede y puede también, que fuese usted la culpable de mi tardanza.

- Jajaja, yo estaba aquí muy quieta.

- Ujum, me gusta como suena eso, Minerva

Volvía abrir escotillas el f18 y un nuevo intercambio de frases entre ellas, provocaban que Minerva, suspirase un- dios mio, esta mujer no conoce lo que es piedad- mientras al dedo de Julia se le une el gordo y un breve movimiento le sube apenas un centímetro la camiseta. Cubriendo, un centímetro mas, su escote.

Sin dejarla reaccionar, a ese censurador gesto, Julia la mira ahora fijamente a los ojos, observando en ellos o puede que queriendo ver mas allá, segundos en los que ninguna dice nada, hasta que es Julia, quien rompe el contacto visual y el silencio.

- Debo irme

- Queda mucho por hacer

- Una mas

- Dos

- Use las de las Bahamas

- Quería otras

- Dos mas y yo, tendré mi primera

- ¿Que? ¿Cual?

Intercambio de peticiones, regateo de ambas y Minerva que se pierde. Los susurros de esa mujer, no pierden exigencia y si ganan mandato. Pero pronto se halla, Julia por primera vez rompe el contacto corporal y elige hábilmente la cámara Polaroid, que hay con otras mas en la mesa.

- ¿Ha sido alguna vez modelo?- pregunta Julia, observando la cámara que sujeta y a Minerva, parece pararsele el mundo, en ese mismo instante.

Julia observa la cámara, con una mínima sonrisa y su rostro, emite un estado relajado y pausado, como si el f18 estuviese, justo en ese momento en que mira la cámara, estuviese volando con el único propósito de disfrutar de las vistas.

- Profesionalmente, nunca he posado- contesta Minerva, contagiándose de la bonita sonrisa vista en Julia.

- Uhm, eso me hace saber, que para algún particular si lo ha hecho.

- ¿Particular?, me refería a las habituales fotos con amigos, celebraciones y ese tipo de cosas- argumenta Minerva, un pelin molesta por la insinuación soltada por Julia. Desde luego, ella no va haciéndose según que tipo de fotos, ni tampoco su autoestima da como para posar ante particulares.

- Tiene cierta tendencia a contestar- Julia rebate, cámara en mano y fotografía de Minerva tomada y a la espera de impresión.

- Es que no poso para particulares, ¿que clase de pregunta es esa y que insinuación llevaba?- desesperada por la manía que parece tener esa mujer de regañarla, Minerva se calienta y hasta omite, que esa mujer, le este haciendo fotos.

- No lo haga- advierte, tras disparar una segunda fotografía y ahora no mira nada mas, que los labios de Minerva.

- ¿El que?- cansada del jueguecito, Minerva le arrebata la cámara y sus cuerpos vuelven a estar separados por tan solo centímetros. Minerva sabe perfectamente a que se esta refiriendo pero también va siendo obvio, que alguien debe frenar el ordena y mando, de esa mujer.

- No me rete

- ¿O me castigara?

- ¿Quiere que lo haga Minerva?

Si, gritaron alteradas por su cercanía y por sus ansias de marimandonear todo lo que toca, las moléculas de Minerva. Pero una cosa es, lo que todo su cuerpo le gritaba y otra dejarse ganar, por esa mujer.

- ¿Quiere usted hacerlo Julia?

- Jajaja, contestona y rebelde, aun me gusta mas- bomba lanzada por el espectacular f18 y Minerva que cierra los ojos, ansiando el castigo prometido - Lástima, no termino de mojarse el labio- nueva caricia, esta vez breve, de su dedo en los labios de Minerva y esperar un segundo, a que los ojos de ésta vuelvan a abrirse- No debería jugar con fuego, Minerva.

Encuentros 27

¿La 'luna de miel' se terminó? Esa etapa que hemos estado viviendo, de encuentros constantes, en cualquier día, en cualquier momento, a cualquier hora y casi siempre en el mismo lugar, mi casa.

Encuentros con falsa sensación de libertad, en donde ella no tenía un anillo en su dedo anular, ni una pareja esperándola en casa. Días, semanas y meses en donde he estado engañándome conscientemente, intentando eludir la realidad, esa que parece regresar para abofetearme en la cara.

Hace más de una semana que no nos vemos, que Daniela me rehuye con falsas excusas, diez días en los que he pensado mil cosas diferentes para justificar su alejamiento, a cada cual peor, diez días en los que he sentido cosas que no me puedo permitir sentir, porque yo sabía cuál era la situación cuando empezamos con esto, pero ya se sabe, el corazón tiene libre albedrío, no escucha razones y yo ahora estoy pagando las consecuencias de no saber jugar con fuego, porque vaya si duelen estas quemaduras.

Mis amigos empiezan a notar que algo pasa, ya no salgo como antes, ya no ligo como antes, es que ya ni coqueteo como antes! Incluso han intentado crearme 'citas' con otras mujeres. Mujeres a cada cual más simpáticas, inteligentes y guapas, mujeres que cualquiera estaría encantada/o de conocer y que yo, sin embargo, desestimo sin más, porque no son ella, no son Daniela.

Al final no será la 'luna de miel' la que ha terminado, quizás lo que ha terminado es esta absurda relación que probablemente nunca debería haber empezado.

Tal  vez es hora de dejar entrar a alguien en mi vida que sí pueda quedarse, que sí quiera quedarse, que me elija a mí, que me quiera a mi las 24 horas del día los siete días de la semana y no solo minutos robados al tiempo.

Sí, tal vez no encuentre a esa persona al cruzar la calle o parando en un semáforo, pero salir hoy con la amiga de Susana es un comienzo. Y el timbre sonando es la señal que estaba esperando para empezar ese nuevo capítulo...si no fuera porque al abrir la puerta quien está allí de pie no es la amiga de Susana, quién está allí es mi historia incompleta...

"-Daniela."

Wilson S.L. 74

Los zapatos italianos, resonaban por el parque, a paso lento, queriendo hacerse notar. Fácil para Macarena identificarlos, sin necesidad de mirar a quien se acercaba hasta ellos, cosa que no podía hacer. Uno de sus ojos estaba completamente cerrado y por el otro apenas tenia un hilo de visión. Gloriosa coca, que le permitía mantenerse consciente.

Apenas vio un destello de uno de los zapatos, confirmo sus sospechas. Negros, con la punta en blanco, brillantes y con unos centímetros de tacón, clásicos de la mafia italiana. Solo había un imbécil en su territorio que gustara de vestir como aquellos narcos, Montero. La arpía envidiosa a la que su hermano la había vendido.

Mo: Jajaja, la gran hija de puta aguanta como una bellaca- ríe Montero y tirando del cabello desordenado y manchado de Macarena, le levanta cabeza, comprobando la gran obra de los rusos- Señora, mis respetos- la suelta tras lo dicho y la cabeza bascula por propia inercia y sin fuerza que la haga retener hacia el suelo- Jajaja, tan fácil que se dio, Señora. Esperaba mucho mas de Wilson y he de decir, que tu puta tenia razón....por cierto, mis condolencias por ella. Una lastima, una mujer muy bonita, pero los vicios, ay los vicios Macarena, te llevan a la ruina, pobre muchacha. Según me dijeron, su cuerpo solo aguanto apenas unas horas sin descomponerse.

M: Miriam- solloza, atada de pies y manos. Le es imposible, no sentir pena por la forma en que murió Miriam y porque después de todo, sus últimos años estuvieron vinculados a ella.

Mo ¿Lo ves? Te volviste una blandita, pero no creo que fuese por la puta yonky, pobre enamorada e ingenua, después de todo, ella creía que íbamos a por la misma que provoca que estés blandita ¿Es rojo o es rubí? No se me dan bien los colores

M: Hijo puta- balbucea escupiendo sangre y ahora si levanta la cabeza, para ver la pantalla, por la que se ve a Anna- tócala y te juro que

Mo: Jajaja, ¿amenazas? Mírate Señora, poco miedo das ahora mismo. Yo si puedo amenazarte, mas vale que tus chicos cumplan lo pactado y no intenten nada, o jajaja, la puta de rojo no morirá tan fácil. Ey, no me mires así. ¿Cuántas no ha regalado así tu padre a sus chicos? Yo haré lo mismo, que la gocen los muchachos y cuando este bien abierta y desgarrada será mi turno. No es por nada, es que la tengo muy gorda y me da que ella, a tal cosa no esta acostumbrada. Gime de rabia Macarena, eso es.....la señora esta sufriendo....es una sorpresa que te aguanten los dientes, claro que jajaja, yo con el sello me conformo. ¿Me lo das? Jajaja, ah no, que te lo cortaron. ¿Quieres verlo?- terminado su monologo, saca de su americana con delicadeza un pañuelo, el cual abre sonriendo y acaba mostrándoselo a Macarena.

M: Vete a la mierda- la imagen de su propio dedo, incluido el sello Wilson con él, no le produce nada. Lo único que la mantiene con fuerza, es creer a Adri a salvo, y luchar por mantenerse en pie por Anna.

Mo: Me apetece un cigarrillo, ¿podrás fumar? El golpe que tienes en las costillas, se esta poniendo muy negro, no se. Mejor no- sentencia y se sienta en una silla frente a ella. Han sido muy larga la espera para verse en ese momento, disfrutando del fracaso de Wilson y no va a desaprovecharlo- Vamos a charlar un poco. He de reconocerle a tu padre, que hizo buena elección, ¿sabes que confiaba mas en ti que en tu hermano mayor? Supongo que los huevos que le echaste en Colombia le hicieron dudar, pero fíjate, después de todo, tu hora llego y te hiciste con el poder. Nunca he cortado un dedo- cambia el hilo de la conversación cuando se dispone a guardar de nuevo el pañuelo en su americana- Podría igualarte la mano, en consideración contigo. Pero, no. No es mi estilo, solo quería el sello y estos rusos no se miden jajaja ¿Cuántos cortaste en Colombia? Jajaja, me contaron que en el primero vomitaste y tu padre enfureció. ¿De verdad te hizo tragar tu vomito o es leyenda? Como sea- no espera contestación y se cruza de piernas, disfrutando del espectáculo. Macarena ha vuelto a bajar la cabeza y nada queda de la señora- ¿Qué hacemos ahora Macarena? ¿Uhm? Cuando estos tengan su coca y yo Wilson, ¿qué hago contigo?- hace una pausa y se agacha, para comprobar que Macarena continua respirando y escuchándolo- ¿Me lo dices?

M: Lo que quieras

Mo: Ey no, derrumbada no te quiero, así pierde gracia. Deberías ser una heroína y decirme aquello de, haz conmigo lo que quieras pero a ella déjala jajaja romántico he sido siempre. Déjame decirte, que ha sido una gata. Nada fácil contenerla, según me contaron. ¿Y ahora aquí entre amigos? ¿Dónde esta tu hija? El ruso echaba fuego, porque a los suyos se le escapara.

Prosigue Montero incansable, pero Macarena deja de escucharlo tras esa ultima frase dicha. La frase de la esperanza necesaria para Maca. La justa para no ceder a la inconsciencia que provoca el dolor, los golpes y las heridas. Confirma lo que creía desde un principio. Su niña huyo, por eso el ruso solo pudo chantajearla con Anna y su padre.

Un hilo de esperanza, que le hace rezar a lo que no cree, pidiendo que la niña se acordara del bunker. Fino, como fino es el hilo, por el que vuelve a mirar a la pantalla, donde ve poco mas que un bulto, encogido en una esquina.

“Anna”

Lamenta toda ella, divisándola en esa oscura y fría esquina. Y el hilo de la esperanza continua igual de fino, pero el de coraje y ganas de luchar aumenta, con esa visión.

Mo: Uhm, me aburriste. Creí serias mas divertida, aunque obviamente, nunca has sido una tía divertida, mas bien todo lo contrario- prosigue Montero, levantándose de la silla. En pie, mira la obra de los rusos y decide que es la hora de marcharse- Hubo algo que siempre fuiste, y es señora. Jamás, has fallado a nuestros pactos. Yo me considero un caballero y si todo sale, según lo pactado, podrás ver morir al bastardo de tu padre y tendrás de vuelta a la puta de rojo. En caso contrario, ya sabes que vendrá- decidido a marcharse avanza hacia la salida, pero el silencio de Macarena, termina por hacerle volverse malhumorado- Un gracias no hubiese estado mal, pero jajaja, en verdad, deseo que todo salga bien y veros en la ruina. Jajaja, pena de Wilson ¿no crees? ¿Qué harás entonces? ¿Qué harás sin un puto duro?....no me contestes y recuerda, poner a trabajar a tu mujer para ti, es comer pan de chocho, ¿para eso quedaras Macarena Wilson?

Primera Consulta, Doc Amor

Transcripción primera consulta;

 

Cinco años, cinco increíbles años junto a ella y lo mejor, planes y sueños que ya se van realizando a la vez que otros surgen y lo mas de lo mas, una vida en común, vista de la misma forma y con la misma ilusión.

Pero, lo hay, hay un pero que me tiene preocupadísima y que mis amistades mas intimas se toman a coña, basta recordar mi ultimo café con mis dos bolletes preferidos, Isa y Mar.

- A ver, ¿cuántas veces a la semana?

Cuando Mar me lo preguntó, la esperanza de que se tomaran en serio mi problema y pudieran así aconsejarme, se apoderó de mi.

- Dos, en alguna tres.

Ya lo he dicho, hablaba en confianza y con ellas jamás finjo o exagero.

- Jajaja, no me fastidies Sole. ¿Y lo consideras poco?

- Jajaja, madre mía. Cuando consigo dos por semana con mi Sergio, para mi ya es una semana de alto voltaje.

Hasta que me quitan toda la esperanza y comienzan con sus típicos...

- Te preocupas por nada

- Con el tiempo, la cantidad disminuye

- Lo que importa es mantener la calidad

Pues no, yo no me conformo, nosotras no hemos sido así y no vamos a empezar ha serlo, con ayuda de mis amigas o sin ellas.

Yo quiero lo que tenia, cantidad con altas dosis de calidad, con ese polvito mañanero, con los aquí te pillo aquí te mato del trabajo o donde fuese que nos dieran el apretón, con los callaitos en casas ajenas, con los larguísimos cuando ambas libramos, con los apañaitos como.....

- Cariño que estoy con el periodo y me duele la tripa

- Ya, bueno pues...jejeje no pasa nada tonti

- Pero....

- Jejeje ¿que?

- Besar puedo

- Jejeje ¿y?

- Jugar con tus carnes también

- Jejeje ¿si? Mira que...uhm dios....pues....pues....dios....pues yo que me dejo

- Jajaja, así hasta parece que me duele menos.

Pero, porque lo hay, me digan lo que me digan, tres meses para cuatro, que parece imposible coincidir. Y en el digan lo que digan, incluyo a mi madre.

- Una Jefa de Recursos Humanos, la otra de Logística, horarios locos las dos, las dos estresadas y mas con la que ahora esta cayendo. Muy normal que estéis menos fogosas pero lo preocupante es, ¿y los niños para cuando?

Nada, que no encuentro quien me entienda y la que lo hace....

- Jejeje que estamos reventaitas, cariño. Pero esto con un fin de semana en la montañita se nos pasa.

- Vale, muy bien. Y ese fin de semana, ¿cuando?

- Eh....jejeje...ahí si hay un problema.

- ¿Lo ves?

- Pero no de lo otro, vamonos a la cama y veras como...

- Que no, obligado no lo quiero.

- ¿Pero quien nos obliga?

- Tú.

- ¿Yo?

- Si tú

- Yo no ¿y tú?

- Jajaja malisima eres

Jajaja si, por cosas como esta no estoy extremadamente preocupada, porque mientras me haga reír como lo hace, todo tendrá solución. Solo me falta encontrarla.

- Ahora, ven conmigo.

- Pero que estoy acabando el pedido de Almería.

- Y yo soy tu jefa, vamos a lencería.

- Esto no soluciona nada, que lo sepas.

- Jejeje, tu déjame a mi y ya veras..

- Bien pero...amm...uhm....si...si si cariño, tu olvídate de los prelimi...agm

- Sole...¿estas ahí? Han fallado dos camiones...

Sol: Ahí me dije, Sole Gutierrez, esto lo solucionas si o si. ¿Puedo beber agua? Tanto contarle me ha dado sed.

Doc: Claro, morenaza. Tu bebe, bebe que yo te vea, después seguimos que esto está de lo mas interesante.

 

Sol: Pero, ¿me ayudara?

 

Doc: Jejeje, ¿eh? claro, cielete, ¿pa que estoy si no?