Después de recoger la mandíbula del suelo y procesar lo que acaba de decir Daniela, estoy segura de que mi sonrisa es grande y estúpida. Pareja, dijo que es mi pareja, una palabra y soy la persona más feliz ahora mismo en el planeta. Por lo menos en este metro cuadrado, porque la cara de pocos amigos de mi madre me dice que ella no se ha alegrado tanto como yo por la noticia.
Superado el momento, y con Daniela, mi pareja, jejeje, espero que la sonrisita que se me escapa cada vez que lo repito en mi cabeza se me pase pronto, que estamos en público y no puedo hacer lo que me apetece hacerle, y menos aún con mis padres aquí. Se fuerte, Miranda.
Entramos en el restaurante donde ya están casi todos reunidos y hechas las presentaciones, es decir, después de presumir presentando a mi 'pareja', jejejej...ains que no se me pasa... las conversaciones se solapan unas sobre otras, de diferentes temas, aunque intentando evitar sobre todo el de política, que no queremos exaltados que la cosa no está para ello. Así que nos centramos en los amigos que se van, con anécdotas que nos hacen reír para ocultar las lagrimas que asoman en los ojos por la eminente despedida y las promesas de visitas en cuanto sea posible y que muy difícilmente podamos cumplir.
Aunque mi madre ha pasado un poco de la charla conjunta y ha canalizado su 'Oriana Falacci' interior para atacar a preguntas a Daniela, que ha respondido a cada una de ellas con una sonrisa en la cara, creo que ahora mismo mi madre sabe más sobre ella que yo misma.
Al final de la noche mi Dani ha enamorado a todos mis amigos y mi padre es su fan, aunque eso ultimo no estoy segura de que me guste. Mi madre, por el contrario, no es su fan, pero la ha invitado para que la lleve a la próxima cena en casa, así que deduzco que un poco bien le habrá caído, así que al final no soy yo la única que cae a sus encantos.
Esa noche descubrí que se había separado de su marido (ahora ex, ejem), que hace un par de semanas se había mudado del piso que habían comprado juntos, y que ya no era una mujer soltera, porque ahora era mía y no tengo planeado dejarla escapar.
Dormimos en una maraña de almohadas, sábanas, piernas y brazos, agotadas de hacerlo rápido y duro, lento y suave, en el salón, en el pasillo, en la ducha y finalmente en la cama, donde caímos rendidas después de alcanzar el éxtasis en incontables ocasiones.
Y ahora, una semana después, nos encontramos cogidas de la mano delante de la puerta de la casa de sus padres, es mi turno de pasar el interrogatorio y algo me dice que yo no lo haré tan bien como lo hizo ella.
Con los nervios a flor de piel, y como si fuera una peli de suspenso, en mi cabeza escucho la banda sonora de una de esas pelis mientras la puerta se abre lentamente y finalmente veo a sus padres, o lo que es lo mismo, mis suegros.
-Vaya, ya habéis llegado -Dice mi suegra con resignación mientras me hace una radiografía completa con unos ojos que me dice que esperaba no verme aparecer por ahí, y porque no me da la gana soltarla, que esa mirada de desaprobación al ver nuestras manos cogidas no la ha disimulado ni un poquito la viej...
-Mamá, papá. Esta es Miranda... es notaria y tiene su propia notaria ella solita -Suelta mi Dani de carrerilla y me da que a su madre le daba igual que fuera notaria, carpintera o que acabara de descubrir la cura contra el cáncer.
Me parece que nos hemos precipitado con este encuentro y que esto va ir de Guatemala a guatepeor...
Por fin. Miranda venga tú puedes, , seguro q lo haces también como dani. Además seguro q a tu suegri le encanta eso de tener una nuera notaria.
ResponderEliminarXd no tardeis tanto.
Pcinovatos
ayyyyyyyy si esque imagino todo y se te encoge hasta el pecho!!!!!!!
ResponderEliminary cuando la nombra,parece q ale hasta del alma....
gracias mil POR TODO artisstaza